Capitulo 9: Reencuentros

6 1 0
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


El tiempo pasaba de manera lenta para aquel joven de quince años, que en un abrir y cerrar de ojos perdió todo, su casa, sus padres y lo más preciado que tenía: su pequeña hermana. Pero no podía seguir viviendo bajo las condiciones de su padre, él tenía un sueño propio ser músico pero para su padre el empresario más importante de Corea eso era inapropiado. Tenía que seguir con la tradición que ha estado en su familia por años: seguir en el negocio familiar; por eso un día tomó una de las decisiones más importantes en su vida... Huiría a perseguir su sueño costara lo que fuera.

 Por eso después de una de las cenas más importantes que tuvieron sus padres esa noche, esperó calmadamente que todos en casa estuvieran ya dormidos, se iría a Busan. Había ya investigado bastante para saber que hacer apenas llegara a su destino. Lo que más le dolía era dejar a su pequeña hermana Naenae, si fuera por él se irían los dos pero no contaba con el dinero suficiente para poder mantenerse ambos, quería hacer todo rápido y porque sabía de ante mano que entre más tiempo se tardara iba a ser peor despegarse de su hermana, sabía muy bien el escándalo que armarían sus padres al darse cuenta que su hijo mayor se había marchado sin su consentimiento.

Terminó de acomodar su bolso rápidamente y ya estaba vestido completamente de negro, se asomó por la ventana de su cuarto que daba al patio de atrás, sabía que sus padres le pasaban llave a todas las puertas de la mansión incluyendo esa, por eso días antes había sacado una copia de llaves específicamente de la puerta del patio. Bajó rápidamente las escaleras y pasó directo a la cocina, con lo que no contaba era que su hermana se encontrara en ella tomando un vaso de leche caliente, cosa que hacia cuando no podía dormir.

En ese momento su pequeña Naenae volteó y vio el bolso que llevaba y como estaba, sabía muy bien que a ella no podía mentirle y esto sería más difícil de lo que pensaba.

– ¿En serio te irás? – Preguntó, cubriendo sus brazos debido al frío que hacía esa noche.

– Debo hacerlo.

– No quiero estar sola. – Admitió la chica de ojos llorosos–. Por favor, no me abandones.

– Nunca estarás sola. – La abrazó, intentando contener sus propias lágrimas. Al separarse, la tomó suavemente del rostro–. Escucha, eres mi hermanita, y no tienes idea de lo mucho que te amo. Pero debo irme, no puedo quedarme estancado aquí. Tú... entiendes eso ¿cierto? – Preguntó en tono consolador, no queriendo herirla más.

La joven de en ese entonces quince años asintió, limpiando unas lágrimas que se habían escapado de sus ojos resbalando sin cesar por sus regordetas mejillas. Chanyeol suspiró, separándose un momento y sacó algo del bolsillo de su chaqueta. Tomó la pequeña mano de la chica y en su dedo anular introdujo un pequeño anillo.

– Prometo regresar por ti. –Había dicho–. ¿Podrías hacerme un último favor? – Al obtener una respuesta afirmativa, siguió hablando–. Úsalo siempre, así siempre me tendrás contigo. – Alzó su mano derecha mostrando sus dedos, donde en su anular yacía un anillo parecido al de ella, con la diferencia de que en el suyo había un espacio en forma de corazón donde se supone que iba el que tenía ahora Naemin en su dedo–. Así como yo también te tendré conmigo. ¿Lo prometes?

Monster.⚠Where stories live. Discover now