VIRGIN. ››k.h‹‹

07.

Jamás me había considerado una persona agresiva, no me metía en problemas, ni era irrespetuoso. La mayoría de las personas que me conocían me adoraban.

Nadie llegaba a sobrepasar mi límite de paciencia pero justo en este momento sentía que iba a explotar, no podía soportar la sola presencia del famoso "Ten". Arrogante, burlón, todo un hijo de puta digno de ser golpeado y estrellar su cabeza en el suelo.  Había pasado tres semanas desde que me enteré lo que le había hecho a Dahyun y era sorprendente que no lo haya golpeado aún.

Estaba cansado, había terminado el entrenamiento y lo único que quería hacer es dormir y morir un rato antes de concentrarme en mi maldito examen pero hoy justo en este momento no podía.

No podía dejar de ver a Ten con sus amigos sonriendo y burlándose, lo admito, era una de las pocas personas  de ese grupo que me caían bien, estaba a favor de su relación con Dahyun, es divertido e incluso tierno pero después de presentar sentimiento a Dahyun vi el otro lado de la moneda. No sabía si era celos lo que me consumía o si en realidad eran sentimiento independientes pero estaba tan cabreado que no podía ni concentrarme.

Le había prometido a Dahyun que no lo iba a golpear, que no iba a armar un escándalo sólo por ella y lo iba a hacer, realmente no quería meterme en problemas, mi historial estaba impecable y quería que estuviese así hasta terminar el ciclo pero no podía.

Salí del vestidor, no me sentía del todo bien y JunHoe lo había notado, había notado mi cambio de humor repentinos.

-¿Tu cambio de humor se debe a Dahyun?-

-¿Por qué tienes que meter a Dahyun en todos mis cambios de humor?-

-Porque Chanwoo es el único tonto que no se a dado cuenta lo que está pasando entre tu y su hermana-

Me giré  observandolo detenidamente ¿Estaba hablando enserio?

-Y no lo niegues. Últimamente han estado muy juntos y tu cambio de humor depende de Dahyun-

- Te respondería y te daría explicaciones pero estoy muy cabreado como para desquitarme contigo-

Junhoe se había dado cuenta de mi fulminante mirada  a Ten.

-¿Sabes qué? Iré por mis audífonos, no estoy de humor para soportar comentarios sobre este tipo-

De todas las sorpresas que pude encontrarme jamás me espere ver a los amigos de Ten, no me habían prestado atención y no les di importancia, pude haber entrado y salido pero siendo amigos de quienes soy me vi obligado a quedarme, escucharlos hablar era una pérdida de tiempo o eso creía pero mis sangre comenzó a hervir al mencionar a Ten y Dahyun, traté de mantener la calma y salir disparado de ese lugar pero "Que bueno que Ten le rompió el corazón a Dahyun se merece a alguien mejor"

Salí disparado llamando su atención, unas simples palabras habían logrado sacarme de mi balance de paz. Junhoe me observó y al ver hacía donde iba y con que intenciones se alteró.

Solté mi puño sobre el rostro de Ten y de un momento a otro había una pelea entre el y yo, no me importó recibí golpes por su parte, no me importó mi historial académico, no me importó nada, estaba molesto y seguía golpeando a ese chico llamando la atención de todos. 

-¡Hanbin para!- Oía una y otra vez pero fue hasta que Junhoe me detuvó separándome de Ten.

Observé a Ten, a sus amigos y a Dahyun que me miraban con horror.

-Hanbin ¿qué hiciste?-

Me di cuenta, ya tarde de todo lo que había pasado, mis nudillos sangraba y Ten tocaba su nariz, no estaba muy seguro si esa sangre en mi nudillos era mía o de el o de ambos pero lo que no podía sacar de mi cabeza era el rostro de Dahyun.

Una mezcla de odio, decepción y preocupación, no sabía como tomar eso al respecto porque se lo había prometido, había prometido no hacerle nada a Ten y ahora... Jodí todo.

Tomé mi mochila que había caído por el escándalo y salí disparado, quizás en otro momento enfrente el castigo pero nmahora ni yo mismo me aguantaba.

Todo ese día huí de todos y de todo, quería estar solo, necesitaba saber que estaba pasando por mi cabeza y porque me comportaba de esa forma, pero no me importó, me preocupé más por arreglar las cosas con Dahyun y con todo el mundo, pedirle una disculpa a Ten y a todos...

No estaba muy seguro si Dahyun estuviese molesta conmigo, bueno... si sabía, No me contestaba el teléfono y mis mensajes los dejaba en palomita azul, ya era tarde para llegar a su casa y no quería soltar una estúpida excusa para verla. Y como todo chicle de película romántica barata, subí por su ventana, me lastimé, lo admito, no es fácil subir esas cosas pero ya estando en su ventana la abrí.

-¡Qué mierda!-

Gritó y tape su boca, no quería ser descubierto.

-¿Qué haces aquí?- Susurró un tanto sorprendida y espantada.

-Quería hablar contigo-

-¿Por qué no tocaste?-

- Porque soy una persona dramática que viene a buscar un perdón tuyo-

Cruzó los brazos, estaba sorprendida y molesta al mismo tiempo, la entiendo, corrompí su privacidad.

-Lo siento Dahyun, no era mi intención golpear a Ten pero habló mal de ti y estaba muy enojado-

Mientras hablaba ella me miraba sin ninguna expresión en su rostro y eso me asustaba

-Lo siento-

-Tu historial se verá afectado Hanbin-

Realmente no sabía si estaba enojado porque le di una paliza a su ex novio o por otra cosa

-¿Por qué estas enojada?-

Ella me sonrió, me estaba sonriendo mientras se acercaba a mi y me daba un abrazo.

- Me preocupa tu futuro Hanbin, me preocupas tú y será siempre así-

-¿Estas molesta porque me van a castigar?-

-Puedes golpear a Ten las veces que tu quieras, sólo no quiero que te castiguen por una estupidez-

Me separé de ella observandola a los ojos.

-Siempre voy a cuidar de ti Dahyun, Siempre he cuidado de ti-

Era tan cierto, desde pequeños yo cuidaba a Dahyun como si fuera mi segunda hermana, la cuidaba porque me importaba. Cuando éramos pequeños daba cosas para que ella pudiera sonreír Y hoy me daba cuenta que Dahyun significa tanto en mi vida.

- Me toca cuidar de ti ¿No crees?-

La miré y sentí como mi corazón se estremecia, era tan hermosa, Me gustaba su mirada inocente y juguetona, no sabía como sentirme pero me gustaba abrazarla.

-Creo que tengo que irme- Susurré.

Pero lejos de alejarme se aferró más a mi.

- No-

Creí que era una broma pero sus brazos no soltaban mi torso ¿Cómo tomaría todo esto?

-Recuerdas cuando te quedaste en mi habitación-

-Fue cuando teníamos 8 años y tu habitación era muy diferente- observé las paredes, ya no eran de aquel color rosa intenso y flores en las paredes ahora era blanco con decoraciones vintage.

-¿Te vas a quedar?-

-Ni creas que dormiré en el piso, Me puedo enfermar y no estoy para pescar un resfriado mi querida Dahyun- Hablé con juego mientras me dejaba caer en su cama.

-Eres un tonto B.i-

-Un tonto que quieres-

-Demasiado.-

Había susurrando, ella había creído que no la había escuchado pero lo hice y me sentí terriblemente mal ¿Por qué? Porque cada día que pasa me hundo más y cada día me doy cuenta que no podré salir tan fácil...