Capítulo 40

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- Sí, si. Gracias. Solo que me acordé de una cosa..
- Es ist in ordnung.

JAZMÍN
Sonreí y volví a darme vuelta. Terminada la cosa de los saludos, los dos equipos armamos las típicas rondas en la cancha antes de que empiece el primer cuarto.

FLOR
Acompañé a Fede en la ronda, era como una entrenadora más.
- Chicas, no se olviden la táctica de hoy que les expliqué. Traten de marcar y defender lo más que puedan. Vamos, dale! - dijo Fede -

- Donde pisa un león no deja su huella un simple gatito, acuérdense. Las amo, dale dale meta huevo!

Alenté y aplaudí antes de que el árbitro toque el silbato y nos tengamos que separar. Las chicas salieron corriendo con sus respectivos palos a los lugares anteriormente asignados y Fede y yo volvimos a tomar asiento al costado de la cancha. Fede me llamó.
- Che boluda.. esa no es Jazmín?
- Ay Fede mirá que va a estar ella acá. Lo que menos hizo es venirse para jugar al hockey.
- Pero ay Florencia, mirala bien. - la señaló acercándose a mí - Es esa, la ves?
- No veo un pito Fede, me está encandilando el sol. - expliqué haciendome sombrita con la mano y traté de forzar la vista para ver mejor -
- Ahí! Ahí se puso más cerquita. No te hagas y decime que la viste. Sigue pelirroja asique es fácil de distinguir.

Y finalmente logré verla. Estaba  de costado, corriendo con la bocha mientras Azul trataba de sacársela. Tenía una media cola y el uniforme verde del equipo alemán, una musculosa y la pollera. También llevaba los aparatos para proteger su dentadura de los bochazos y palazos. Así de simple se veía hermosa, como siempre.
- Eu me estás escuchando? Hola, hola. Estamos en Berlín, no en la luna de Valencia euu

Mi amigo me sacó de los pensamientos, hasta me pasó la mano por la cara.
- Eh.. sí, si.
- No, no me escuchaste. Te decía que le armaron la remera con su apellido, fijate, ahora que se cambió de posición y está de espaldas. Cómo le remarca el Del Río, que hija de su madre, me dieron ganas de que vuelva con nosotros.
- Qué cola. Perdón, perdón.
- Ehhhh eso era corto! Era corto, loco! Lo viste Flor? - exclamó el entrenador de pie y furioso - Detesto a los árbitros de Hockey. Ninguno hace nada bien, tendrían que haber puesto a una mujer.
- Que pasó? No, hm. No ví.
- Le pegaron alto palazo a Jazmín en el ojo, creo que fue Ori y le cortó la ceja, pobre. Mirala, se está manchando toda.

La observé. Ori le pedía disculpas y le decía que había sido sin querer. Jazmín, mientras se tapaba el corte con la mano supongo que para que no siga saliendo más sangre y deje de mancharse. Los médicos le pusieron una venda y la sacaron del partido. Se sentó en el plantel del equipo alemán.
- Seguro le dijeron que le puede afectar la vista o puede marearse. - saltó Virginia de atrás.
- Cómo sabes tanto vos?
- Acaso te olvidaste de que mi padre es oftamólogo, Florencia Estrella?
- Ay, cierto. Bueno, no me acordaba.

JAZMÍN
- Estás mejor? Por ahí si consulto te dejan jugar.
- Sí George, gracias. Sigo un poco mareada, puedo esperar un poco más.
- Bueno. - sonrió - Igual se te veía un poco como fuera de juego, quiero decir.. desconcentrada. Porque tenías tiempo de correr la cabeza para que no te la den tan fuerte.

"Será por Florencia." Pensé.
- Perdón, tenés razón. Se notó mucho? - lo miré preocupada -
- Casi nada, pero yo me doy cuenta solo de las cosas.
- Lo siento. Prometo estar más con los pies en la tierra y la mirada en el hockey.
- Sí, con los pies en la tierra y la mirada en el hockey. - repitió el entrenador alegre -

Casualidades {flozmin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora