llévame contigo - larry

3. verse después

...

Louis prometió contarle a su madre acerca de cómo se sentía. El doctor le había recomendado que si últimamente se sentía mal no debía pasarlo a la ligera porque algo malo podría pasarle. A Louis le enojaba bastante que la gente le dijese que avisara si llegaba a sentirse mal, ya que Louis no quería ser tratado como una persona con cáncer. Él quería ser una jodida persona de 19 años normal. Joder, sólo tenía un problema con el aumento de glóbulos blancos, sólo era un poco de cáncer, ¿acaso nadie podría tratarlo como un joven normal?

"No eres una persona normal, Louis. Tienes cáncer, debes aceptarlo" fue lo último que escuchó que el doctor le diga, estaba harto y no tenía qué decir, así que simplemente salió de la habitación.

...

-Bueno, Harry, igual Louis no debe tardar en venir, me voy. -Niall se puso de pie apresuradamente.

-Bien, nos vemos Niall. -el rizado se despidió con la mano.

Observó a aquél rubio caminar hasta el pasillo siguiente y vio como dobló en la esquina, perdiéndolo de vista.

Su mirada fija fue interrumpida por una enfermera que se le acercó y dijo:

-¿Señor Styles? -con un tono un tanto amable.

-Joven -le corrigió un poco disgustado por el término que había usado. -Sí, soy yo.

-El joven Tomlinson ha terminado. Su turno. -dicho esto la señorita comenzó a alejarse.

Se quedó pensativo durante un momento.

Louis pasó al lado suyo con una enorme sonrisa en el rostro. Tomó asiento justo en donde Niall había estado.

-¡Enfermera! -Harry se puso rápido de pie. -Cancele la cita, me siento muchísimo mejor ahora.

La enfermera se quedó un poco desconcertada pero se retiró a cancelarla.

Harry volvió al asiento junto Louis.

-¿Qué tal estuvo? -tenía una sonrisa que podría cubrirle toda la cara, dejaba sus hoyuelos fuertemente marcados y además, un par de hermosas hileras de blancos y perfectos dientes.

Louis se acomodó un poco el cabello y se giró para ver bien a Harry.

-Todo de maravilla, ¿qué podría estar mal? Un poco de cáncer no da nada para preocuparse. -forzó una risa, pero fue tan buen actor que Harry ni siquiera sospechó.

-Bien. -respondió Harry sonriendo.

Hubo unos segundos de silencio.

-¿Tienes algo que hacer? -preguntó Louis levantando las cejas, con una pícara sonrisa.

-De hecho, tendría que ir a casa, ¿y tú?

Louis rió recordando que él tendría que hacer lo mismo.

-También. -le dijo.

-Andando, te llevo. -le incitó Harry. Sin dudarlo un segundo, Louis aceptó aquella invitación.

~

Iban saliendo por las puertas principales del hospital.

Louis se detuvo por un instante y corrió a ver a Carmela. Se le acercó y le dio un caluroso abrazo.

Carmela sabía que cuando Louis estaba un poco más cariñoso, era porque algo no andaba bien. Sin embargo no preguntaba nunca, prefería que él le contara si tenía ganas, o si no, ella averiguaba qué pasaba con el ojiazul.

Está vez Louis dejó que las lágrimas salieran de sus ojos. Se permitió llorar un poco, pero no tanto como en realidad merecía.

-¿Tan malo? -le preguntó.