Mery
Había pasado una semana dese que había contratado a Liam, era bastante eficiente debo de admitir, siempre cuando llegaba a mi oficina mi café y todos los informes ya estaban sobre mi escritorio, al igual que lograba mantener a raya mi agenda, estaba satisfecha por su trabajo, pero su aspecto seguía siendo el problema, en verdad odiaba esos patéticos lentes que traía, o esa ropa de anciano que usaba todos los días y ese peinado tan soso, la verdad a veces me daba pena salir con él a mis reuniones, me estaba comportando como la peor persona, pero es que nuestra empresa era de las mejores como para que él no le tomara atención a verse como un miembro más de esta , sabía que me estaba comportando demasiado engreída con él, pero no podía seguir permitiendo que se vistiera de aquella manera
Llegue a la oficina mas temprano que de costumbre, ya que este fin de semana tendría un evento para recaudar fondos para los orfanatos, esa era la razón por la cual tenía muchos papeles que arreglar por las pinturas que donaría y un auto para que sería subastado, había terminado por llamar a Jared para que me ayudara un poco con mi estrés como solo él sabía hacerlo
A esa cena asistirían personas muy importantes, por lo tanto me la pasaría haciendo negocios con algunos de ellos, era por eso que Liam tenia que ir conmigo, pero no sin antes obligarlo a que cambiara su forma de vestir y peinar, me reusaba dejar que fuera a una gala conmigo si se veía de esa manera
Trabaje un rato en mi computador hasta que llego Jared con quien solo tenía sexo ocasional, necesitaba un desestresarme y que mejor que un polvo para lograr aquello
Sin esperar más se acercó a mí y me devoro la boca, podía sentir como sus manos vagaban por encima de mi ropa excitando con cada uno de ellos
—Jared cerraste la puerta — hable con la voz ronca
—Si nena — aseguro
Logro desabotonar mi blusa, tomo mis pechos entre sus manos y los apretó un poco fuerte, un gemido broto de mis labios, necesitaba más que esto, mucho más para poder apagar las enormes ganas que sentía en este momento. Yo por mi parte desabroche su pantalón y baje sus boxers tome su miembro entre mis manos y comencé a masturbarlo. Los besos en mi cuello y su mano vagando entre mis piernas solo lograban calentarme más, lograba sentir como su lengua vagaba entre mis pechos dejando su saliva
—Ya no aguanto más — susurro Jared contra mi oído
Me bajo del escritorio y me coloco de espaldas a él, sentí como rompió mi ropa interior para luego adentrarse en mí de una sola estocada, sentía sus movimientos y también como cada vez que me penetraba sus manos oprimían mis pechos causando un poco de dolor más que excitación
—Jared más fuerte — pedí entre gemidos — más rápido
Obedeció a mi petición, comenzó a penetrarme mucho mas fuerte y con mayor velocidad
—Me encanta estar dentro de ti, me aprietas tan bien
Seguí disfrutando del sexo hasta que la puerta de mi oficina se abrió, Liam me miro con los ojos muy abiertos mientras todos los papeles que había en sus manos se regaban por toda la oficina
—Sal de aquí ¡AHORA! — exigí molesta
Jared no había parado en ningún momento y por un lado lo agradecía, no quería quedarme con las ganas, sus movimientos se volvieron mas certeros hasta que por fin el orgasmo llego a los dos, me recargue por completo en el escritorio y respire hondo, para poder recuperar el aliento, cuando salió de dentro de mí, camine hacia el baño para limpiarme y arreglar mi ropa.
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Enamorándome de mi Secretario
Short StoryMery La mujer más deseada y temida entre los empresarios, audaz y sin corazón asiera como todos la describían, la Bruja muchos le llamaban así por la fama que le precedía, no le importaba pasar sobre de quien fuera para obtener todo lo que ella des...