Frustración

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Si ya se que dije que lo dejaría pausado 
Pero no podía hacerlo sin dejar la parte hard ;v 
Disfrutenlo 
Advertencia: Lemon lea bajo su propio criterio

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PRINCESA VALIENTE CAPITULO VI: FRUSTRACIÓN

PRINCESA VALIENTE CAPITULO VI: FRUSTRACIÓN

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Un ligero movimiento en la cama me hizo despertarme, abrí los ojos pero la luz me lastimaba mucho, trate de moverme pero mi cuerpo se sentía tan liviano y calentito que opte por volverme a acomodar, me removí un poco buscando una posición más cómoda.

— Hmp...— Escuche cerca de mi oído, un pacífico y lento respirar estaba cerca de mi nuca, enseguida trate de darme la vuelta pero unos brazos fuertes apretaron mi cintura atrapándome con firmeza.

— No te muevas, se siente bien tenerte así — Una profunda y somnolienta voz me hablo, enseguida la identifique pero por alguna razón ya no deseaba escapar, ya me había resignado pero no por ello deje de sonrojarme.

Sentía algo duro y cálido rozar entre mis muslos, entonces comprendí que él se había despertado de "muy buen humor" sin evitarlo gemí muy bajo, pero él me escucho gruño y una de sus manos fue a parar a mi boca tapándola evitando que hiciera cualquier sonido y el otro me presiono con más insistencia.

— Tu voz se escucha muy erótica, ¿me estas provocando?— El trato de hacerse lugar entre mis muslos, pero no se lo permití en cualquier momento podrían entrar y encontrarnos en esa situación tan indecorosa, pero él se siguió rozando lentamente haciendo que me pegara mas a él con su brazo, Se sentía muy bien.

— Maldita sea — maldijo en voz baja — Me siento tan frustrado por lo de ayer, Déjame tocarte — Su voz se escuchaba malditamente seductora y persuasiva pero no deje que el ganara, Negué lentamente con la cabeza, restringiendo mis impulsos, definitivamente ya no iba a poder ver a la cara a nadie, recordé lo que había pasado ayer

Flash back

— Maldición me pones tan caliente cuando haces eso — Declaro con su seductora voz ronca de deseo cerca de mi clavícula, se inclinó un poco, debido a su altura el agua le llegaba debajo de sus marcados bíceps, mientras que a mí me llagaba un poco abajo de la clavícula, por lo que levanto mas mi muslo, apretándolo con algo de rudeza, obligándome a rodear su cintura con ambas piernas.

Esta vez la cabeza de su miembro se frotaba despacio y con cuidado entre mis piernas, sin querer me excite con cada roce de su caliente piel sobre el punto sensible entre mis piernas, me sujete a sus brazos y gemí, me callo con su boca, volvió a besarme con hambre, mientras que su otra mano recorría lentamente mi espina dorsal de arriba abajo haciendo que me arqueara por las cosquillas.

— Ayer mencionaste su nombre, en lugar del mío no sabes lo molesto que estoy por eso— se detuvo un momento, mordió mi labio con fuerza pero no la suficiente como para hacerme sangrar.

Se separó un poco de mí y sentí toda la sangre en mi cara mientras le observaba, el vapor del agua caliente hacia que su cabello se le pegara al rostro y que gotas de agua resbalaran por su rostro y sus músculos, se veía tan sexy.


— Si vuelves a mencionar su nombre te ira mal — Me miro con lascivia de arriba abajo y se relamió los labios — Voy a demostrarte quien le perteneces — Aquello me excito a tal punto que tuve la penosa necesidad de volver a sentirle dentro mío, me estaba volviendo una pervertida.

Pero lo que le llamo la atención fue que a causa del calor él tenía un ligero sonrojo en sus mejillas me pareció algo tan lindo que tuve que desviar la mirada para no reírme, un hombre tan masculino, imponente y atractivo como él estaba sonrojado, me parecía gracioso pero al seguramente no.


Me sujeto la mejilla con la palma de su mano, observe los profundos pozos negros de sus ojos y volví a desviar los míos.

— ¿Que sucede?— Pregunto con seriedad pero también con preocupación.

— Tu estas... Es la primer a vez que te veo sonrojado, me parece lindo — Él sonrió con autosuficiencia, levanto mi mentón y su respiración choco con la piel sensible debajo de mi oreja, el que solo respirara cerca de ahí me hizo alzar mis caderas, ambos gemimos cuando nuestros sexos se rozaron, el contra mi entrada y yo contra su miembro.


— Tsk — Hizo un profundo sonido con su garganta y sin aviso, abrazo mi espalda, apretó uno de mis glúteos con su mano, enterró su cabeza en mi cuello y me embistió con tal fuerza que logro hacer el agua chapotear e hizo mi espalda golpearse contra la piedra lisa.

Me aferre a su espalda repentinamente, había sentido un poco de dolor, pero me sentía tan húmeda por dentro que el dolor desapareció en segundos, en vez de ello la sensación de su enorme masculinidad llenándome y friccionando cada terminación nerviosa dentro de mí me hizo jadear por la sorpresa.

Le escuche suspirar de una forma excitante — Recuerda esto....al tocarte y abrazarte de esta manera, Solo lo puedo hacer yo ¿Entendido? — No pude contestar a su pregunta por qué estaba inmersa en las intensas sensaciones que tenia, que él me hacía sentir.


El extrajo toda la longitud de su miembro hasta que solo su glande estaba dentro y volvió a empujar sus caderas con fuerza, inevitablemente gemí se enterraba profundo y duro.

— Ahhh.... eres tan hermosa.... tienes que ser solamente mía — Repitió la misma acción con un poco más de fuerza, que termine rasguñando su espalda buscando soporte, el gruño suavemente, recargue mi frente en su hombro, el agua caliente me estaba relajando demasiado estaba tan sensible y tan desesperada por encontrar aire fresco.

Debería sentirme mal por lo que le estaba dejando hacerme, debería estar asqueada o indignada pero no, simplemente me sentía muy bien con el dentro de mi cuerpo, tratando de abrirse camino con envites más duros, disfrutaba del pecado que estábamos consumando.


Me embistió otra vez pero luego se quedó quieto, me sentí insatisfecha, quería que él se siguiera moviendo.

Con la mano que me tenía abrazada me jalo para que me despegara un poco de él, acaricio mi espalda luego mi hombro y al final mi mejilla, acerco su rostro lo suficiente como para hacer que nuestros labios se rozaran.

— Quiero escucharlo de tu boca, di que eres solamente mía y no de Naruto — Cerré lo
s ojos y negué con la cabeza, él se apartó molesto.

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