Capítulo 12

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Capítulo 12-
Llegamos a la mansión y bajé rápidamente. Entré a la casa después de Damen y para mi sorpresa, todo estaba en silencio.
-Ven.- me cubrió los ojos y me guió hacia la sala.
Cuando paró, retiró sus manos de mi cara. Sentados en la sala se encontraban todos mis hermanos, junto a una niña pequeña y un niño de mi edad.
-Emmy, ellos son Madison y Jacob, son los hijos de Jeremy.
Nos miramos mutuamente. Jacob era castaño, con la piel algo tostada y enormes ojos marrones. Madison era igual a su hermano, sólo que sus ojos eran verdes.
-Osea que, somos primos?-pregunté.
Ellos asintieron.
-Bueno, ya que se conocieron, hay que salir a un restaurante, muero de hambre.-Jace se levantó y salió de ahí.
-Iré a cambaiarme.-dije y subí.
Me quité el uniforme y me puse unos shorts, una polera holgada y unos tenis. Peiné un poco mi cabello y me coloqué una gorra de ala plana.
-Ya estoy lista.
Nos subimos en la camioneta y partimos.
Me senté junto a Jacob y resultó ser muy agradable. Era muy similar a mí. Ambos amábamos los dulces, nos encantaba hacer bromas y nos gustaba mucho usar gorras y beanies de todos los colores. Madison era muy adorable y reía por todo lo que decíamos.
-Cuántos años tiene?-le pregunté a su hermano.
-Tiene 4 años. Va a cumplir 5 en 4 meses.
Cuando llegamos, todos salimos corriendo hacia la entrada del lugar.
-Mesa para 9, por favor.
Nos guiaron a una mesa cerca del área de juegos la ventana. Minutos después nos trajeron las cartas y pedimos la comida.
-Hoy en la clase de deportes, Tyler se clavó una espina en el dedo.-dije.
-Ah sí? Si te iba a preguntar, eh?-se burló de mí Caleb y todos rieron.
Lo fulminé con la mirada.
-Entonces no les contaré lo que pasó después.-dije y luego añadí-Involucra a un chico... lindo.
-QUÉ?!
-Lo que escucharon.
-QUÉ PASÓ CON EL DESGRACIADO?!
-No, pues ahora no les cuento nada.-cerré la boca.
-Habla!-gritaron ellos pero los ignoré.
-No.
-Voy a averiguar quién es el niño y lo castraré.-gruñó Scott.
-Y luego venderé sus órganos a una tribu en Áfri...-continuó Trent.
-Emm, lamento interrumpirlos pero, aquí está su comida.-la mujer lo observaba con miedo.
-Oh, gracias.-Seth le dedicó una sonrisa y ella se marchó.
-Sólo porque ya está la comida no te preguntamos, eh? Pero en casa, comenzará tu interrogatorio.
-Ajá, sí, como digas.-repliqué distraída con mi plato de asado.

Cuando regresamos a la casa, corrí a mi habitación y me puse a hacer tarea para evitar la agotadora sesión de preguntas acerca de Asher.
Estuve pensando en él mientras "hacía" los deberes. Por qué estaba sentado ahí si se suponía que estaba en clase? Por qué me estaba observando? Acaso le gustaba? No, para Emmy, no seas egocéntrica. Seguramente estaba viendo a alguien más, como a Sienna o Alix. Ellas eran mucho más bonitas que yo. Suspiré hondo.
-Emmy?-me llamó Caleb.
-Sí?
-Podrías venir por favor?
-Voy.
Bajé las escaleras en donde estaban todos los chicos.
-Pero qué carajo pasó aquí?!

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-¡Son unos idiotas!-los regañé.

Estábamos todos en el patio mientras yo los enjuagaba con la mangera. Estaban cubiertos de harina, huevos, mantequilla y chocolate.

-¡Fue culpa de Scott!-reclamó Damen.-¡Ese imbécil fue el que...!-lo mandé callar echándole un chorro de agua fría en la cara.-¡Ay! ¡Demonios, Emily!-gimió.

-¡Silencio! ¡No sé que estaban haciendo ni me interesa! ¡Casi le prenden fuego a la casa!-ellos me miraban avergonzados y con culpa.

-Lo sentimos.-se disculparon todos al unísono.

-Los bomberos dijeron que no pasó nada grave pero que tengan más cuidado a la próxima.-Jacob salió de la casa.

Suspiré y me cubrí la cara.

-Ya váyanse a bañar.-les dije y se fueron todos adentro.

En la mañana me despertó la estúpida alarma del estúpido iPhone que el estúpido de Caleb me había comprado.

Estúpidos todos.

Me levanté con los ojos cerrados y caminé hacia el baño. De repente, sentí un dolor agudo que me hizo gritar. Abrí los ojos para mirar abajo.

Demonios, me había cortado con un cuter que había dejado en el suelo.

-¡Seth!-lloriqueé.

Estaba aterrorizada por la sangreque salía y el penetrante ardor que se extendía por mi cuerpo como una corriente eléctrica.

-¡Seth!-repetí, esta vez con el pánico tiñiendo mi voz.

-¿Qué pas...? ¡Santa mierda! ¿¡Qué hiciste!?-entró Trent y me miró horrorizado.

-¡Ayúdame, imbécil!-gemí.

-¡JODER! ¡SETH, EMMY SE LASTIMÓ!

Trent me cargó hasta el baño y sacó alcohol.

-Esto te va a doler, peque.

Mis gritos llenaron la casa mientras él echaba alcohol en mi pie.

-¿¡QUÉ PASA ACÁ!?-todos los chicos entraron y al ver la sangre, se alarmaron.

-¡Hay que llevarla al hospital!-gritó Jace.

Los chicos me cargaron entre todos hacia la sala de estar y envolvieron mi pie con una toalla. Cuando ésta estuvo bien apretada, me cargaron hasta la camioneta y me colocaron en el asiento trasero. 

-¡Espera, espera! ¡Hay que poner una toalla abajo porque si mancha el tapiz de los asientos...!-comenzó a decir Caleb, pero fue interrumpido por un furioso Seth.

-¡Olvídate de eso y vámonos, idiota!-vociferó.

Las ruedas chirriaron al arrancar y dejaron un olor a neumático quemado mientras nos dirigíamos al hospital.

[Ésta es la versión sin editar, así que tiene varios errores. La versión editada y corregida será subida aquí en poco tiempo.]

Mis seis hermanos y yo (Sin editar)® [MSHYY #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora