Perfecta Para Mí!

El Sol Luego De La Tormenta Cap..5

En toda la noche Amanda no pudo dormir pensando en esa mujer que poco a poco le estaba poniendo su mente patas arriba. Una mujer cuyo corazón en ese momento estaba destrozado. Una mujer que cualquier lugar que pisaba lo radiaba de belleza y de dulzura.

Una mujer que al otro lado de la ciudad pensaba en cierta joven cuyo nombre resonaba en su mente.

Amanda.....

Continuación...

Elizabeth era mujer fuerte con episodios débiles. Una mujer cuyo corazón era puro y sincero. Sufrió cuando su esposo le fue infiel y llegó a pensar que tal vez era su culpa por no dedicarle el tiempo que procura un matrimonio. A pesar de los esfuerzos, sabia que no era suficiente. Luego de ese sucesos él le juró que sólo había sido cosa de una noche y sin importancia, además de que estaba totalmente ebrio. La familia siempre fue primero para Elizabeth y aún más su hijo. Ella amaba con locura a su único hijo y fue por él que decidió en ese tiempo darle otra oportunidad a su esposo. Daría la vida por su hijo...

Sin embargo había descubierto que nuevamente su marido la estaba engañando con otra mujer......

Hacia un día, sólo un día que lo había encontrado en pleno acto con su secretaria en su oficina. Ella había ido para verlo y cual fue su sorpresa cuando se encontró con otra cosa. Él rápidamente le pidió perdón, pero lo que los hombres no entienden es que una mujer no soportaría otra traición.....

Flash Back

JUAN- Amor, no es lo que parece...

Ya su secretaria había salido de la oficina huyendole a la mirada amenazante de Elizabeth. La rubia era un amor pero todos sabían que cuando se enoja puede cambiar radicalmente aunque eso no le quita que se siga viendo igual de dulce.

ELIZABETH- ¡¿Crees que soy tonta?!

Ella estalló en cólera. Se lo había dicho mentalmente miles de veces, si un hombre te engaña lo hará de nuevo, pero no, prefirió darle la oportunidad porque su hijo era lo primordial y no quería dejarlo sin padre. A Juan le salían lágrimas de cocodrilo, y mientras intentaba acercarse a su esposa ésta lo recibió con una cachetada.

ELIZABETH- ¡Esto es por ser un hombre tan cobarde y tan asqueante!...