Capítulo 7

342 4 1
                                    

Me tiré en mi cama suspirando:

-voy a volver a verlo hoy!

De nuevo no iría al colegio para trabajar con Brad.

Estaba apunto de abrir la puerta de mi casa cuando mis padres dijeron de repente:

- Verónica!- se me erizaron los pelos, tenía que pasar algo muy importante como para que ellos me hablaran, tragué saliva y me volteé:

- desean algo?

- tu! venir! ahora! - gritó mi madre a todo pulmón- que has estado haciendo, niña infeliz! Que no has estado yendo al colegio que nos cuesta tanto pagar!

En ese momento solo quería salir huyendo y nunca más volver:

- lo siento - bajé la cabeza

- un lo siento no va a pagar lo que hemos gastado en algo que ni siquiera haces, niña malagradecida! ahora vas a tener que trabajar en la calle para pagarnos y para comprar comida para ti, porque ya estamos hartos de tener que mantenerte, ya estás grande!

En ese momento sonreí sin querer:

- de que tanto te ríes?!

- de nada señora.

- bien, ahora vete a buscar trabajo para que no tenga que seguir viendo esa cara apestosa y fea.

Salí corriendo de la casa y llegué a la calle 15 ( donde iba a trabajar con Brad ), ahí estaba de nuevo, sentado en la acera con una gran mesa llena de juguetes y accesorios dañados.

- Brad! - lo llamé

Volteó la cabeza y sonrió

- Vero!

Comenzamos a hablar, nos la pasamos todo el día charlando y riendo, de hecho, hasta tuvimos algunos clientes, pero.......

EL ÚLTIMO NO NOS GUSTÓ.

Era un señor mayor como de 67 años. Estaba vestido con una chaqueta de plumas de un pájaro en peligro de extinción que ahora no me acuerdo el nombre, tenía unos pantalones de un material muy fino y un sombrero que le tapaba casi toda la cara.

- hola niños- nos dijo con una voz misteriosa- quería comprarles algo a ustedes para..... ayudarlos un poco.

Vimos que sostenía en su mano derecha una gran bolsa negra:

- para que es?- preguntó Brad - digo... la bolsa.

- mmm... a..... es un bolsa para... Pues.... poner las cosas... que voy a ... pues comprar - sonrió muy falsa y nerviosamente.

- esta bien..... entonces..... esto es lo que tenemos... Dígame si le gusta algo - dije al extraño señor

Antes de lo que pudimos darnos tiempo para parpadear el señor metió en la bolsa a Brad.

-ahhhh!!!- grité llorando - Brad!!!!

Pero no pude hacer más nada porque el maldito me noqueó a mi por los hombros de alguna extraña manera, me sentí caer.......

Aprender a vivir sin vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora