[🐕]

6.1K 889 494
                                    

Los perros son amigos, no comida

[9]

🌼

Aquel día de abril Min Suga tuvo una pequeña revelación.

Fue impresionante el caer en cuenta lo mucho que su vida era monótona hasta la llegada de J-Hope, su pequeña esperanza. Antes creía tener una vida perfecta; leche calentita esperando cada mañana por él, tardes de búsqueda por gatas con celo (oh, ¡bendito agosto abridor de piernas!), comida siempre en su plato y buena música sonando en los parlantes.

Pero ahora... notaba que era monótono, aburrido. Todo su pasado lucia así desde que J-Hope entró en su vida, y aunque lo quisiera negar, en una forma un poco más leve, también ChimChim y Kookie.

Con el pasar del tiempo las cosas habían cambiado. Para partir, su dueño ya había conseguido una pareja; si, ese raro veterinario. Eran raros, pues la mitad del tiempo veías a Jin ahogándose (Nam decía que reía, pero Suga no le creía) y a su dueño golpeándole porque dijo algo vergonzoso. La otra mitad los veías como una estúpida pareja melosa.

—Abre la boquita mi chanchito bonito más hermoso del todo el universo existente creado por el tío Diosito —decía amoroso Jin ofreciendo comida al moreno que le veía con seriedad.

—Chancha culia tú.

—Nam...

—¿Para que me dices chancho? —Nam se cruzaba de brazos ignorándole.

Bueno... Usualmente Seokjin era el más empalagoso, pero al parecer estaban bien con eso ambos, porque aunque pelearan siempre terminaban a besos que llevaban a...

Si.

Sexo en exceso.

¡Esos dos follaban por todos lados sin pudor!, y bueno, a veces cuando Hobi y Suga les miraban mucho mientras lo hacían se ponían nerviosos y les sacaban del lugar, pero la mayoría del tiempo estaban muy calientes como para detenerse y los gatos curiosos comentaban su sesión de sexo como si de un documental tratara.

—Uhhh, Hope, mira eso, ¡hace como la perra de la esquina! —maullaba Suga malicioso.

—¡Hahaha...haha...ha... HYUNG LO ESTA MATANDOOOOO!

Esa fue la vez la vez que Hope corrió y atacó a Jin que estaba haciendo chillar a su dueño. Namjoon tardó cinco minutos en hacer que su pequeño gatito soltara a Jin.

—Gato de mie-

La mirada fulminante de Namjoon calló a Jin, este como una madre pato sostenía a su Hope en sus brazos.

—Ow, bebé, ¿te duelen tus garritas?

Y Hobi maullaba haciéndose el lastimado, enterneciendo tanto a Nam.

(Por cierto, Jin odiaba un poquito a Hope, solo un poquito).

Pero no todos los días de verlos follar Hobi atacaba a la pareja.

—Mira Hope, toma nota.

—Wow, nunca vi a hyung doblarse tanto.

—Es el poder del amor, bebé.

Ho asintió, en su carita aquella expresión que decía que estaba aprendiendo cosas importantes.

—¡Yes, yes!

—J-joder, ¡Jesús!

—¡Amén! —reía Hobi cuando veía como Nam y Jin se ponían locos en la cama.

Tu lado animal [YoonSeok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora