Capítulo 14

36 2 0
                                    

POV Mell

No puedo creer que esté a punto de hacer esto. Miro hacia mi derecha una vez más y me vuelvo a preguntar si está bien hacer esto. ¿Realmente vale la pena? Bueno, ya no puedo simplemente echarme para atrás.

Sigo en dirección derecha sin voltearme ni una vez. Es la primera vez que falto al instituto sin permiso de mi padre. ¿Y todo por qué? ¿Por una maldita cita? Si. Lo peor de todo es que esta mañana tuve que recurrir a Alisson para vestirme. ALISSON. Mi hermana media putigolfa. No puedo creer que esto lo esté haciendo yo. Elizabeth.

Siento que mi padre estaría muy decepcionado de mi. Siento que hasta mi madre estaría decepcionada de mi. Cold inclusive. Pero ya no pienso eso y sigo rumbo al lugar de encuentro.

Cada calle se me hace aún más larga que la anterior. ¿Esto se siente hacer algo "malo" por primera vez? Espero que el resto del mundo lo sienta igual, si no, sería más rarita de lo que ya soy.

Estoy a punto de llegar y mi celular suena. "¿Ya estás por llegar?". Es suyo. "Siempre tan impaciente" le envío y abro la puerta del lugar. Distingo su paradero al instante y me acerco.

- Hola - le susurro un poco nerviosa.

- Hola bonita - me responde y se acerca a depositar un beso en mi mejilla.

Tomo asiento a su lado y nos miramos hasta que alguien se acerca.

- Hola, bienvenidas a Mike's, hoy voy a ser su mesero, mi nombre es - se corta a si mismo y me mira - ¿Ya no saludas? - me pregunta dejándome sorprendida.

- ¿Lo conoces? - pregunta mi acompañante.

- No que yo recuerde - aviso.

- ¿Ya no me conoces Ali? - enarca una ceja algo ofendido - estas como distinta. Tu pelo creo yo, como hablas - dice pensador.

- Es porque no soy Alisson niño - admito riendo - ¿No te habló de mi? Mell, su gemela - queda algo sorprendido y luego habla.

- ¿Es chiste, verdad? - dice más para él mismo que para mi.

Saco de mi bolsillo mi celular y busco una foto de cuando éramos más niñas, la guardo desde siempre, al encontrarla se la muestro. Él queda un momento algo plasmado y vuelve a mirarme a mi y a la foto, y así consecutivamente hasta que alguien interrumpe su proceso.

- ¿Ya nos vas a tomar la orden o qué? - dijo algo enojada.

- S-si yo... yo lo siento - dice y luego se va. Nos miramos plasmadas y luego comenzamos a reír. Varios minutos después vino una chica a atendernos.

Ordenamos lo que cada una tomaría y luego nos dispusimos a hablar.

- Es raro... estar así, aquí, contigo - digo un poco avergonzada de mis palabras -

- Si lo se... me pasa igual - responde en un susurro - pero... de igual forma me gusta estar así, aquí y contigo - me sonríe y toma mi mano por sobre la mesa.

- A mi también me gusta - admito.

Este último tiempo para mi a sido una montaña rusa totalmente. Cosas que no creí que me pasaría o que sentiría en mi vida, que en este mismo instante estoy viviendo, sintiendo, palpando... es una sensación inexplicable, de paz, de felicidad. Conocer a Melanie a sido de lo mejor. Fue gracioso como nos encontramos de forma cliché. Ella chocando con mis libros y luego me ayuda a levantarlos, nuestras manos se rozan y nuestras miradas se entrelazan. Desde allí hemos formado una muy bonita amistad. Ella venía a casa y yo iba a su casa. Todo espectacular. Hasta el momento en que decidió juntar sus labios con los míos. Estábamos de el patio trasero de su hogar, nos habíamos sentado una al lado de la otra. Las piernas cruzadas y mirando las estrellas, y ella preguntó:

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 14, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Mi verdadero yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora