Había iniciado un nuevo semestre escolar. La alegría por el triunfo del Torneo de Fútbol Frontera Internacional aún se sentía en el aire; sin embargo, era el momento de seguir adelante, luchando por nuevos retos y esforzándose por continuar siendo los mejores.
Las transferencias en que se solicitaba entrar a la escuela Raimon aumentaron considerablemente; todos los niños de Japón deseaban entrar en aquella escuela donde se habían formado los mejores jugadores. El fútbol había alcanzado un nivel inimaginable, pero entre las demás escuelas del país nacía una envidia que pronto alcanzaría al equipo de fútbol de Raimon.
Tan solo iniciaba el semestre, era el primer día de escuela y los problemas no se harían esperar para aparecer.
Madre de Endo: ¡MAMOROU! ¡LEVÁNTATE!, se te hace tarde para el primer día de escuela. ¡Este niño aún no aprende!
Endo: ¡NOOOOO! Se me hace tarde.
De un solo salto, sale de su cama y presuroso Endo Mamorou se dispone a prepararse para ir a la escuela. Las vacaciones no habían sido nada especial, a excepción de las muchas de personas que ahora le conocían y saludaban por donde pasaba, todos sabían quién era él ¡El Capitán de Inazuma Japón!
Mientras corría, en su mente solo había una cosa en la que podía pensar Endou: ¡Este año volveremos a ganar el torneo nacional!
Cuando llegó a la escuela, sintió esa misma emoción de aquella vez parado frente ella y con el deseo de ingresar al club de fútbol, pero ahora ese sueño era mayor y esa emoción era un sentimiento que se había alojado para vivir siempre en su pecho.
A pesar de su esfuerzo no fue mucho lo que pudo hacer, castigado fuera en el pasillo, Endo esperaba ansioso la hora del entrenamiento.
Someoka: ¡El primer día de escuela y ya estas castigado!
Goenji: ¡Endou no tienes remedio!
Endo: ¡Que bueno volver a verlos después de las vacaciones muchachos!
Someoka: ¡Así es! Ha pasado mucho tiempo desde el último día de clases y tú tampoco te has dejado ver.
Goenji: Imagino que pasaste todas las vacaciones entrenando, después de todo fútbol es en lo único que piensas.
Con una gran sonrisa en forma de respuesta, continuaron las clases por el resto del día hasta la hora del entrenamiento. Este año Goenji, Endo, Someoka, Aki y Kido estaban en el mismo salón, en cuanto al resto del equipo de fútbol habían quedado en salones distintos.
Kurimatsu: ¡CAPITAN! ¡CAPITAN!
Endo: ¿Kurimatsu qué te pasa? ¿Por qué vienes tan agitado?
Kurimatsu: Capitán tenemos un problema, ¡tiene que venir pronto al club de fútbol!
Preocupado, Endo y los demás se apresuran en ir, cuando llegan Kazemaru, Kabeyama, Handa, y el resto del equipo esperaba.
Endo: ¿Qué pasa Kazemaru?
Kazemaru: Endou tenemos un problema, mira eso.
Una gran cantidad de niños se agrupaban alrededor del salón del club de fútbol, eran de
todos los grados y todas las edades, incluso habían niñas ahí.
Endo: ¿Qué pasa con ellos? ¿Por qué están ahí?
Handa: ¡Pues es obvio! todos ellos quieren entrar al club de fútbol.
Someoka: ¡todos ellos! ¡Son demasiados!
Kido: Eso es normal, ya que la mayoría de los jugadores que conformamos la selección de Japón estudiamos aquí, además que Raimon es el actual campeón nacional.
Endo: Yo no creo que eso sea un problema. Si hay más personas que quieren entrar a nuestro club eso significa que el fútbol será mucho más divertido.
Con el optimismo que le caracteriza, nuevos miembros para el club de fútbol no supondrían un inconveniente o por lo menos eso pensaron.
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Inazuma Eleven-Legendary
FanfictionEl último año de escuela de Endo en la secundaria Raimon ha llegado, pero antes de marcharse todavía queda un torneo más de fútbol por disputar. Junto a sus compañeros de equipo y muchas personas nuevas, amigos, rivales y enemigos, el año escolar cu...