Deberes de la realeza Zutara

3- El Príncipe Dagón

Los siguiente días pasaron tan rápido que ni siquiera puede ver a mi maestro fuego. Y realmente lo extrañaba pero comprendía de sobra que ahora debía atender a sus nuevos deberes. 

Sin embargo finalmente era el gran día en el que el Príncipe Zuko iba a ascender al trono y muchas cosas cambiarían sin embargo jamás imaginaria cuanto. 

Mientras tanto el General Iroh se había encargado personalmente de mi arreglo y su tuvo la delicadeza de buscar colores de mi tribu, un azul hermoso. 

-Lady Katara se ve más que linda, será la envidia de más de una noble y el centro de atención de varios caballeros -Rio jocosamente- 

-General Iroh, creo que exagera -Sonriendo gentilmente- 

-Acá Acá  -Negando con la cabeza- Te dije que me llamaras Tío Iroh 

-Es que me da pena, yo solo soy una..

-Una heroína y sería un honor ser tu tío -Sonriendo ampliamente- 

-Esta bien, Tío Iroh -Devolviendo la sonrisa-  Por cierto ¿Donde esta Zuko?

-Fue a recibir a los valientes guerreros de las Tribus hermanas .

-Y no me dijo!? -Exclame sorprendida- 

-De hecho eso es culpa mía, le pedí que fuera con el joven Sokka. Porque aun te necesito a mi lado -Tomando del hombro a la joven maestra agua- 

-A mi? Para qué Tío Iroh -Obteniendo una enorme sonrisa del General- 

-Lo ve Lady Katara, eso suena mejor, pues necesito que se pruebe un par de vestidos para esta tarde.. 

-Yo.. 

-De nada querida, vamos a tu alcoba ahi te estan esperando algunas cjicas del servicio para apoyarte con lo necesario.. -Tomando del brazo a la maestra agua y guiandola por el pasillo-  Estoy seguro que serás la más linda de todas 

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La noche pasó tan rápido que me fue imposible dormir, aunque al ser maestro fuego debería poder descansar, no fue el caso.

Mi día comenzó temprano y para  colmo, tenía que ir por el dichoso Príncipe del Polo Norte. 

Creí que al menos de camino al muelle podría ir con Katara, pero mi Tío me envió en su lugar al ocurrente Sokka, debía confesar que esta irritado y como no estarlo si no me fue posible descansar. 

-Zuko? Me estas oyendo! -Reprocho el joven guerrero y sacó de sus pensamientos al futuro soberano- 

-Lo siento, que decias Sokka?..  -Respondi sin emoción- 

-Vaya que debes estar emocionado Zuko, por eso de tu coronación, ya que estas ignorando a tu mejor amigo ..

-Algo así..   -Respondí intentando disimular mi mal humor-

-Te decia que debes estar emocionado por tu coronación y quizá ansioso porque según me dijeron por costumbre debes elegir una esposa ¿Cierto?

-En efecto, lo es. Pero para ser honesto, es una tradición que no pienso perpetuar, aunque tengo a una hermosa mujer en mente  -Intentando disimular mi emoción- 

-Mai! -Respondió el ojiazul provocando una confusión total en el maestro fuego- 

-Mai? Porque la mencionas...  -Con un pequeño gesto de desagrado-