Capítulo 21

5.8K 183 13
                                    

"What do you want from me?" – “¿Qué quieres de mi?”





¿Acabo prácticamente de tener sexo con Justin Bieber?



Creo que lo acabo de hacer y no se que hacer conmigo misma.



Tal vez debería de hacer lo que hizo Blair Waldorf en Gossip Girl cuando ella perdió su virginidad con Chuck- visitar a un sacerdote en la iglesia local y confesar mis pecados.



Ahora que lo pienso, no iba a funcionar, porque mis padres conocían a todos en la iglesia y si se enteran de lo que paso entre Justin y yo, estaría jodida durante mucho tiempo. Olvídate de estar castigada, estaría abandonada del mundo y encerrada como un animal, si se dieran cuentan.



Tal vez le podría decir a Carly…



Ja, si, claro. Ella probablemente se mearía en los pantalones y le daría un ataque al corazón, y lo ultimo que necesitaba era llevarla al hospital y tener que explicar la razón por la que ella se había desmayado en primer lugar.



Creo que lo mas seguro es mantener la boca cerrada y tratar de manejar esto con la mayor calma posible.



Hasta el momento, eso no estaba funcionando bien.



Tal vez si me tiran un poco de agua bendita sobre mi, todo va a desaparecer.



…. Veo demasiada televisión para mi propio bien.



El suave rumor de los neumáticos que emitían al chocar con las piedras del camino me trajo de vuelta a la realidad mientras estaba sentada en el coche de Justin con mis piernas juntas y las manos sobre mis muslos.



Justin mantuvo sus ojos en el camino, concentrándose en silbar a su propio ritmo.



¿Cómo puede estar el hijo de pu*ta tan tranquilo al respecto?



Allí estaba yo, casi teniendo una crisis nerviosa, mientras que el estaba actuando como si nada hubiera pasado entre nosotros.



Hombres. Me burlé. Nunca los voy a entender. Incluso si quisiera.



“¿Qué te pasa?” La voz de Justin me sacó de mi tren de pensamientos y giré mi cabeza para mirarlo



¿En serio me pregunta eso ahora? ¿Qué tan tonto podría ser? “Nada.” Murmuré.



Justin se rió sin humor. “Obviamente, te pasa algo ¿por qué no cortas esta mie*rda y acabas por lo sano?” Sacó los ojos de la carretera para mirarme, su mirada me hacía removerme en mi asiento incómoda, eso me recordaba a la primera vez que me senté allí.



“Solo pienso en cosas, supongo.” Me encogí de hombros, mirando por la ventana otra vez. Se que estaba siendo vaga, pero realmente sentía la necesidad de plantar el tema actual que me estaba comiendo por dentro viva. Sentía que si lo hacía, las cosas se iban a poner inmensamente incómodas sobre nosotros y lo ultimo que necesitaba era que el se quedara mudo.



Por otra parte, ahora que lo pienso, no podría ser en realidad tan malo…



“¿Cómo que?” El miraba a la carretera de nuevo. Metiendo la rodilla izquierda en el volante, para dirigirse a su bolsillo mientras hurgaba en el bolsillo de su chaqueta de cuero, sacó un cigarrillo y un encendedor. Encendió el cigarrillo, lo puso sobre sus labios antes de colocar su rodilla debajo y sustituirla por su mano.



Tomando una calada de humo, dio media vuelta y abrió la ventana para que el humo saliera al exterior, y se sintiera el aire fresco.



“No lo se…” murmuré. “En cosas, supongo…” Me encogí de hombros.



Justin arqueó una ceja y me miró durante una fracción de segundo antes de alejarse. “¿Supones?” El negó con la cabeza. “Obviamente, debes de saber en lo que estas pensando.” El tomó otra calada de su cigarrillo, lo sujetó y dejó escapar un anillo perfecto de humo.



Mordí mi labio inferior e inmediatamente cuando lo hice, dejé escapar un gruñido de frustración, recordando la forma en la que terminamos haciendo lo que hicimos en el almacén.



“¿En serio ____?” Justin desvió el coche y provocó una parada brusca. “¿Qué te pasa?” Se volvió mientras miraba a un lado de mi cara, haciendo agujeros en ella con su mirada.





Justin’s POV:



Esta chica va a ser mi muerte.



Ella es tan jodidamente confusa.



Un segundo me esta lanzando insultos, al siguiente esta de buen humor y a continuación, después de que ella sea tranquila y tímida, se pone toda caliente y mojada, y antes de darnos cuenta, estamos haciéndolo.



¿Es eso lo que las chicas hacen ahora? ¿Es una parte de su forma de vida? Porque si es así, yo no quiero ser parte de ella.



Después de lo que paso en el almacén – que reconozco que fue la cosa mas caliente teniendo en cuenta de cómo es ella.



Quiero decir, yo sabía que ella era caliente y muy buena besando, pero en realidad no creí que íbamos a ir tan lejos como lo hicimos.



Bueno, no hasta que ella quisiera.



Esta vez, no era la voz cantante. Era ella.



Por lo general, mier*da como esta me molestaría (o a cualquier tipo en general), pero en esta situación particular, me pareció tan jodidamente sexy.



Especialmente cuando ____ no es como todas las demás chicas.



De todas formas, ella ha estado en calma desde entonces y la pe*rra es cualquier cosa menos tranquila. Incluso cuando me la llevé a casa de la fiesta, ella no se callaba.



Me encontré mirándola, desde la cabeza a los pies. Su pelo estaba muy revuelto y su camiseta arrugada pero aparte de eso… se veía bien.



Cuando terminé de mirarla, me di cuenta de que estaba algo despistada, pero no le presté mucha atención hasta que hizo una especie de sonido, como una burla.



Le pregunté que le pasaba y ella terminó diciéndome que no era nada y que estaba pensando en cosas.



Por lo general no me importaba un bledo en lo que pensaran las chicas, mientras consiguiera lo que quería al final –que era un polvo rápido, posiblemente mas de uno- pero había algo en ella que siempre se me hacía curioso.



No podría soportarlo mas. Me estaba poniendo furioso.



“¿En serio _____?” Desvié el coche para detenerlo bruscamente. “¿Qué te pasa?” Me volví completamente, mirándole el lado de la cara, esperando hasta que ella me miró también.



“Nada.” Ella se encogió de hombros.



Me burlé. “¿En serio? ¿Vamos a hacer esto otra vez?” Luche contra la urgencia de rodar los ojos.



“¿Hacer que?” Escupió ella, volviéndose ahora a mirarme.



“Esto!” Levante mi voz un poco. “Tratar de llevar esto mas allá de lo que sea que te esta molestando. Lo odio.” Hervía, cogí una bocanada de aire.



“¿Por qué no lo puedes dejar ir?” Susurró ella con los dientes apretados.



“No puedo.”



“¿Por qué no?” Me miró con incredulidad.



“Porque se que algo te molesta y estas siendo una pe*rra terca y no me dirás lo que es.”



“¿Así que vamos a volver a hacer esto otra vez?” Ella me imitó con los ojos entrecerrados.



“¿Vamos a volver hacer que?” Me burlé yo.



“Llamarme nombres (Insultar).” Ella cruzó los brazos contra su pecho.



“Tal vez si tu actuaras como una chica normal por una vez, no tendría la tentación de llamarte ‘nombres’.” Puse énfasis en la palabra ‘nombres’ mientras respiraba profundamente.

Ella estaba haciendo que me exaltara por nada.



Ella sacudió la cabeza. “¿Sabes que?” Escupió.



“¿Qué?”



“No tengo tiempo para esto.” Se desabrochó el cinturón de seguridad y se lo quitó de ella antes de abrir la puerta del coche.



“¿Qué estas haciendo?”



“Alejarme de ti.” Ella consiguió salir del coche y golpear la puerta dejándola cerrada.



Esta pe*rra.



Gimiendo, saqué las llaves del coche antes de abrir la puerta cerrándola de golpe, al igual que ella hizo unos segundos antes. “¿Dónde crees que vas?”



“A cualquier lugar, siempre y cuando sea lejos de ti.” Ella disparó hacia mi, mientras que penosamente emprendía su camino a través de la calle.



La seguía furioso tras sus pasos. “¿Qué co*ño te pasa?”



Ella dejó de caminar. “¿A mi?” Se dio la vuelta, el pelo golpeaba con su cara.



“Si, a ti.” Susurré.



Ella fingió una sonrisa. “Creo que la pregunta aquí, amigo, es que co*ño te pasa a ti.”



Me eché a reír. “Estoy perfectamente bien nena. Nunca he estado mejor.”



“¡Uf!” Ella pisó el suelo con el pie. “¿Puedes dejar solo por una vez tomarte todo como una broma?”



“¿Quién dijo que estoy tomando esto como una broma? Estas siendo la pe*rra mas grande del planeta, solo estoy tratando de aliviar tu estado de ánimo en lugar de que te vengas abajo.”



“Eres increíble, ¿lo sabías?” Ella gritó con frustración.



Sonreí. “Lo se, me lo han dicho.” Le envié un guiño seductor.



Ella hizo una mueca. “Me repugnas Bieber.”



“¿En serio? ¿Entonces, por qué te restregaste conmigo en el almacén, nena? Le sonreí con picardía.



Tuve que admitir, que llevarla a su punto máximo fue el punto culminante de mi día.



Ella se quedó allí, su pecho subía y bajaba, la ira que irradiaba de su piel, quemaba y expulsaba combustible en el aire (no literalmente, pero ya sabes a que me refiero). “No me llames así.”



“¿Por qué no?”



“Porque no soy tu ‘nena’, ni lo voy a ser.” Escupió ella, sus ojos se mantenían con fuerza sobre los míos.



Esto me hizo perder.



“Ja, eso es graciosos considerando el hecho de que casi hemos fo*llado en el almacén—“



“¿Puedes dejar de recordar eso?” Ella gritó.



“¿Por qué no? ¿No puedes aceptar la verdad?” Levanté las cejas mirándola.



“Aceptar la verdad de que?” Ella me miró como si tuviera cinco cabezas.



“De lo que hicimos.” Le dije el asunto con la mayor naturalidad.



“Que yo sepa, no he hecho nada.” Susurró ella.



“¿Ah, si? ¿Así que cuando te lanzaste sobre mi, no fue nada?” La miré largo y tendido. Ella no tenía nada que decir. “Exactamente. Ahora bien, ¿por qué no saltamos esta farsa y volvemos al coche ya? Me muero de hambre.”



“Bueno, eso apesta para ti, ¿no? Porque yo no voy a ningún parte contigo.”



“¿Qué co*ño quieres decir con que no vas a ninguna parte conmigo? ¿Dónde podrías ir?” Lancé mis manos al aire.



“A algún lugar donde tu no.” Ella me miró una vez mas antes de girar y empezar a caminar.



Vi como ella comenzó a caminar por el sendero en el bosque. Yo gemía internamente. Ella iba a hacer que la mataran.



Suspiré. “¡Espera!”



“¿Qué?” Ella grito, con la cara roja de toda la ira acumulada en su interior.



“No te vayas.” Murmuré.



Ella frunció las cejas de confusión. “¿Qué?”



“Te dije que no te vayas.”



Su rostro se ensombreció. ¿Por qué no?”



Aferré mis dientes a mi labio inferior, rascándome la parte de atrás de mi cuello. “No se…” dije, mirando a otro lado.



Ella se burlaba de esto. “¿Lo ves? Esto es lo que quiero decir!” Ella hecho los brazos al aire al igual que lo había hecho yo antes.



Solo la miré fijamente, preguntándome a que se estaba refiriendo ahora.



“Te comportas como un idi*ota de mi*erda un segundo, entonces a la próxima vez eres todo…. Agradable.” Ella sacudió la cabeza. “No te comprendo.”



“¿Qué tienes que comprender de todos modos?”



“Mucho”.



Dejé escapar un profundo suspiro. “Solo ven y podemos ir a buscar algo para comer… ¿vale?”



“No”, respondió ella casi de inmediato.



Eso es todo. Ya he tenido suficiente. “Esta bien, ¿Quieres quedarte aquí? Adelante. No te voy a detener. Por una vez, estaba tratando de hacer lo noble y de hecho salvar tu cu*lo de nuevo, pero si quieres caminar sola en el bosque y hacer que alguien te mate, entonces que así sea.” Comencé a caminar hacia atrás. “No lo intentaré mas.” En cuanto comencé a hacer mi camino hacia mi coche escuché un murmullo detrás de mi.



Después de unos segundos, el silencio se rompió y la voz de ____ tomó la palabra una vez mas. “¿Qué quieres de mi?”



Caminé hasta detenerme, pero decidí no darme la vuelta mientras esperaba a que ella diera mas detalles sobre eso.



“¿Qué es lo que quieres, Justin?” La desesperación salía de cada una de sus palabras.



Me di la vuelta. “¿De que estas hablando?”



“Sabes muy bien de lo que estoy hablando.” Ella comenzó a caminar hacia mi. “Un segundo, me quieres matar, la próxima vez me salvas, luego peleamos, me insultas, a continuación, actúas como si nada hubiera pasado, te disculpas y luego el ciclo se repite y ahora quieres que me vaya contigo después de lo que acaba de suceder?” Ella sacudió la cabeza. “Simplemente no lo entiendo. Parece que hay algo que simplemente no esta bien contigo. ¿Qué es lo que quieres de mi? ¿Qué te hace feliz? ¿Eh?” Ella estaba de pie delante de mi. “¿Quieres que me vaya? ¿Es eso lo que quieres? ¿Quieres que te deje en paz?”



La miré con los ojos muy abiertos, recibiendo todo lo que me había dicho. Sentí mi estómago revolverse dolorosamente mientras miraba a sus ojos azules. “No” susurré.



“Entonces, ¿qué quieres?” Ella asumió. “¿Quieres que me quede?”



Me lamí los labios sin quitar mis ojos de ella. Después de unos segundos, sacudí la cabeza. “No.”



Su rostro frunció un ceño. “¿Entonces que?”



A pesar de la atracción en mi interior no pude evitarlo. Mi cabeza decía una cosa –que no lo hiciera. Dejarla ir y olvidar lo que paso entre nosotros –pero mi (tan cursi como era) corazón me decía que se quedara.



“¿Quieres saber lo que quiero?” Hablé en voz alta. Por ultimo dejé ir a mi orgullo mientras la verdad se hundía sobre mi.



Ella guardó silencio mientras sus ojos buscaban los míos.



Pasé un brazo alrededor de su cintura. “Te quiero a ti”. Susurré antes de chocar mis labios contra los suyos.



Al principio ella luchó en contra, pero en cuestión de segundos, ella cedió, envolviendo sus brazos alrededor de mi cuello mientras me acercaba mas. Las cosas se pusieron un poco calientes a medida que pasaba el tiempo, mi lengua luchaba con la suya por el dominio hasta que se alejó, nuestros pechos subían y bajaban rápidamente, nuestras respiraciones eran irregulares.



Al presionar mi frente en contra de la de ella, pasé la lengua por mis labios, saboreando su gusto. Mirando a sus ojos lo que pareció una eternidad, me di cuenta de que el dolor en mi estómago había desaparecido y mi cuerpo se sentía a gusto. Yo no podía dejar de reír.



“¿Qué es tan gracioso?” Ella me miró, sus manos estaban sobre mis hombros.



Negué con mi cabeza, miré hacia el cielo antes de volver mis ojos de nuevo hacia ella. “John tenía razón.”



Ella frunció las cejas juntas. “¿John?”



“Si, John. El es uno de los chicos.”



Ella asintió con la cabeza comprendiendo. “¿Qué dijo?” Me miro con curiosidad.



Yo sonreí. “Que me gustas.”



Sus ojos se abrieron un poco, sus dientes mordiendo su labio inferior. ¿Y?” ella me miró hacia a mi, con los ojos esperanzados.



Le sonreí. “Estaba en lo cierto.”

Danger - Justin BieberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora