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Patricia

I don't wanna Miss a thing sonaba en mis audífonos mientras miraba por la pequeña ventana del jet, la última escena que he visto me ha descolocado, no creí que en menos de un año el me olvidaría, no aún cuando yo no lo hago, pero era de esperarse con Klaus nada era seguro.

Decidí olvidarme de todo, del asesinato, de mi visita al cementerio, de mi corazón roto. Cuando llegue a casa me metí bajo la ducha durante un buen tiempo, lloré como nunca lo hice, el hombre que pensé que me amaba me ha olvidado y eso duele como el infierno mismo.

Al salir de la ducha tome una botella de vodka y una copa de sangre fresca, los ligue y ese era el trago perfecto y brinde, brinde por mí, por ser un mounstro, por el olvido y por todas las cosas que me había lamentado no hacer.

No sé en qué momento me quedé dormida, ni quién me trajo a la cama, solo sé que tengo un dolor de cabeza horrible y que me siento débil, necesito sangre. Me dirijo a mí congelador y saco dos bolsas de sangre, me las tomo como agua y de inmediato comienzo a sentirme mejor.

Hoy tengo una cita de negocios con Víctor, iremos a un restaurante aquí en Japón muy  conocido, solo la gente importante va ahí. Al llegar divisó a Víctor y a uno de sus estúpidos socios en una mesa alejada del resto, llego y me acomodo en la silla, observo a Víctor sin un astibo de emoción.

- Que quieres Víctor. - le digo cortante ya que el me irrita.

- & los modales Patricia!, Solo quiero avisarte que debemos volver a Savannah.

-Que! Porque?

- Tengo problemas con mis negocios allá y tenemos que regresar, tú y Karl son los mejores en lo que hacen así que los necesitaré.

-Sabes que no puedo volver a allá, mi familia vive allá, me pueden ver.

-Ese es el plan, volverás con tu familia, tienes que regresar como  si fueras una muerta viviente.

-Estas loco Victor, no creas que haré eso, dame una razón!

- No tengo porque darte explicaciones, harás lo que te diga y seguirás mis indicaciones, mejor ve a prepararte y empieza a empacar tu arsenal, nos vamos en 2 días.

Me quedo tensa en el lugar, la mirada que Víctor recibe lo deja frío en su puesto, me levanto de la mesa con elegancia, no dejaré que sus palabras me afecten, salgo del local y me subo a un BMW negro, arranco a toda velocidad del lugar, tengo que sacarme toda esta frustración que cargo encima... Necesito sexo y se quien me lo puede dar.

Llego a un lujoso edificio a las afueras de la ciudad, le muestro mi carnet al vigilante y este me deja pasar, subo al último piso, es el departamento que comparto con Karl, cuando llegó el piso parece estar desolado pero veo una pequeña luz en la habitación de Karl, Abro la puerta y lo veo mirar por el gran ventanal de esta, cuando siente mi presencia se voltea, sus ojos muestran lo mismo que los míos.

Rápidamente dejo caer mi vestido y me acuesto en su cama, el se dirige hacia mí y cuando por fin llega, comienza a tocar mi cuerpo y besarme desenfrenada mente, toma mis piernas y las abre, arranca mi ropa interior y sin aviso alguno me penetra, siento su miembro cuando entra y sale, repite este movimiento hasta que llegamos al orgasmo juntos y el se desploma encima mío y nuestras respiraciones se vuelven pesadas, sin previo aviso nos quedamos dormidos y la habitación se hunde en una penumbra cálida.

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Recuerden Chichos, nada es lo que parece.
xoxo❤✨

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