Reconciliación?

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Se armó un silencio incómodo entre nosotros, yo seguía acostada en el sofá mientras que Villamil estaba sentado en el otro viéndome fijamente

Villa: —Sólo necesito que me escuches, fui un idiota, lo sé, estoy acostumbrado a que las cosas sean tal y como yo quiero y no me pongo a pensar en lo que sienten los demás, me concentro demasiado en mí mismo, y sé que eso no está bien, y estoy intentarlo cambiarlo, discúlpame por haber actuado así contigo, no sabes lo mal que me siento

Ailén: —¿Tu crees que es suficiente con sentirte mal?

Villa: —No

Ailén: —¿Entonces? ¿Cómo puedo estar segura de que algo así no va a volver a pasar otra vez? Las palabras no son suficientes

Villa: —Entonces déjame darte acciones — Dijo acercándose hacia a mi quedando en el mismo sofá

Ailén: —¿Y si te vuelves a equivocar?

Villa: —Me lo dirás y trataré de componer esas actitudes con tal de no tengamos otro problema

Ailén: —No voy a estar aguantando cagada tras cagada tuya

Villa: —Entonces la decisión quedará en ti, yo no te voy a obligar a nada — Tomó mi mano y con la otra acarició mi mejilla —¿Si le darías otra oportunidad a este idiota que tanto te gusta? — Esta vez susurró sobre mis labios, estaba jugando conmigo físicamente y ahora todo el control que estaba tratando de tener se está desmoronando ¿Cómo controlarse cuando él está haciendo esto? —Dime que si bonita, vas a ver que voy a remediar esto... con acciones como lo pides tu — Esta vez mordió su labio inferior provocando que yo hiciera lo mismo, no podía evitar ver sus labios y después a sus ojos que estaban entrecerrados, esperando a que yo le correspondiera a su sucio juego

Su paciencia se acabó ya que sus labios se posaron sobre los míos, olvidándome completamente de todo, y correspondí a su beso, colocó sus manos sobre mi cuello, con una acariciaba mi mandíbula con su dedo de en medio y su otra mano se mantenía firme sobre mi nuca, jugando con mi cabello, haciéndome sentir un choque eléctrico en todo mi cuerpo. Puse mis manos sobre sus brazos y seguimos así un rato entre beso y beso

Podía sentir su rodilla sumamente cerca de mi parte así como su espalda que se encontraba cubierta por su camisa, sin poder evitarlo me removía cada que sentía una de sus manos acariciar mi cuerpo, pasando de mis hombros hacia mis curvas, sintiendo mi cintura y bajaba hacia mis muslos y hacía el mismo recorrido hacia arriba, cada vez gemía más en el beso provocando que el gruña y muerda mis labios, para este punto yo ya me encontraba increíblemente húmeda y podía sentir mi parte palpitar una y otra vez

Comencé a desabrochar los botones de la camisa de Villamil, encontrándome con su pecho, lo vi hincarse y se quitó la camisa frente a mí, fue inevitable no morder mis labios, se dirigió nuevamente a mis labios y sus besos bajaron hacia mi cuello, hice mi cabeza hacia atrás dándole mas espacio para besar, ahora mis piernas estaban a cada lado de sus caderas y sentí sus estocadas contra mí, aun con ropa podía sentir su erección contra mi

En serio extrañaba sentir esto

Alex: —Espero que no hayas hecho una pendejada con mi amiga Villa... ¡MIERDA CHICOS! —Villamil y yo nos separamos rápidamente quedando cada uno en la orilla del sofá, separados

Ailén: —Hagan mas ruido cuando vayan a entrar

Alex: —No, a mi no me vas a reclamar, ustedes deberían de ser mas considerados para hacer sus cochinadas, demonios, no puedo dejarte un instante sola con este pendejo porque caes directo en su labia de hombre

Villa: —Yo también te quiero mucho Alex

Alex: —Tu cállate y calma a esa cosa fea que hay entre tus piernas — Villamil se puso rojo y se cubrió con una almohada —Ustedes tienen la culpa por haberme llevado con ustedes a la fuerza — Se dirigió hacia los cuatro restantes

Isaza: —Esta no era nuestra intención, ellos deberían de controlarse, son capaces de hacerlo en cualquier lugar

Alex: —No sabes nada, estos dos se olvidan de que hay una tercera persona en la casa

Isaza: —No quiero imaginarme los gritos de Ailén

Martín: —Pero de horror al ver a Villamil — Todos echamos una carcajada menos mi novio

Simón: —¿No les parece algo incómodo hablar sobre la vida sexual de estos dos?

Ailén: —Si a mí si, mejor cambiemos de tema

Alex: —¿Oigan qué pasa si comparto lo que han estado grabando estas últimas horas? — Dijo con el celular en la mano

—No —Gritaron todos y Martín le quitó su celular por lo que Alex comenzó a perseguirlo

Alex: —¡Martín dame mi celular!

Martín: —¡NO! – Saltó sobre nosotros y el sillón

Alex: —Vargas te voy a atrapar

Martín: —Lo dudo

Alex: —Dame mi celular

Martín: —¡Nunca! — Chocó contra la pared y se cayó —¡Auh! — Todos reímos

Simón: —Se ha caído el minion — Dijo riendo y Martín lo fulminó con la mirada

Isaza: —Jajaja esto va para Instagram

Ailén: —¿Cómo es que tienen cuerpo de chicos de 20 años pero tienen mentalidad de niños de 5 años?

Villa: —Es costumbre, ya deberías saberlo

...

Regresé a casa de Villamil, sus padres me recibieron con mucho gusto, se alegraron de saber que Villamil y yo arreglamos nuestros problemas al igual que mis padres, regresamos de verlos y ahora estamos aquí, acostados sobre su cama

Villa: —Bonita, quiero hablar contigo — Dijo mientras jugaba con mi cabello

Ailén: —¿Es algo malo?

Villa: —No, al contrario, espero que te alegres por mi — Me acomodé sobre la cama para poderlo ver con mayor atención —Los chicos y yo queremos dedicarle un poco más de tiempo a nuestra carrera, junto a Pedro logramos encontrar una organización para que podamos estar más tiempo estudiando, nos urge terminar ya

Ailén: —Eso quiere decir que...

Villa: —No regresaré contigo a México, me quedaré aquí yendo por un tiempo a la uni

Ailén: —Oh... nos veremos menos

Villa: —Discúlpame mucho por eso, pero esto es lo que quiero, aunque nos afecte será solo por un tiempo y —Lo interrumpí

Ailén: —No tienes porqué darme explicaciones, te entiendo, comprendo la situación, sé que no estaremos juntos pero no importa, porque sé que ese tiempo lo dedicarás a tu carrera — Dije acariciando su mejilla

Villa: —Gracias por comprender bonita

Ailén: —No tienes nada que agradecer, futuro ingeniero



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Una Nueva Aventura Con... ¿MORAT? |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora