Una Nueva Aventura Con... ¿MORAT? |EN EDICIÓN|

De Regreso a México

¡¡Atención!! 

Capítulo Largo

Disfruten

Acompañamos a mis padres al aeropuerto, ellos se irían antes que yo, ya que según palabras de ellos, tienen cosas que hacer, papá y Villa se encontraban un poco alejados de nosotras hablando, mi mamá y yo estábamos tomando un café

Stella: —¿Ya todo está bien entre ustedes dos?

Ailén: —Si, hablamos y tratamos de encontrar una solución

Stella: —Me alegro por ustedes — La vi sonreír con melancolía, recordé la ultima conversación que tuvimos y me sentí culpable

Ailén: —Mamá, sobre lo del otro día

Stella: —Tienes razón

Ailén: —¿Cómo?

Stella: —Tienes razón sobre lo que dijiste, tienes que cambiar por tu bien, no tienes porque sufrir por lo que sufrí yo, y me alegro de que tengas la iniciativa por cambiar las cosas por tu bien, por ti hija, y nada me puede llenar mas de orgullo, no creas que me lastimaste con lo que dijiste, créeme, es preferible lo que tu quieres hacer a vivir lo que yo

Ailén: —Aun así siento que no debí de decirte las cosas de ese modo

Stella: —No te culpes, yo te perdono hija, no te sientas mal por ello — La abracé y sentí como mi piel se puso china, de verdad amo a mis padres, no se que hubiera echo toda mi vida sin ellos

...

Estos últimos días habíamos pasado el tiempo juntos antes de que él regresara a la universidad y yo a México, me ha llevado a diferentes lugares o simplemente nos la pasamos en casa disfrutando de la compañía del otro, y esta no es la excepción

Una de sus manos se encontraba sobre mis dos muñecas y la otra apretaba mi cintura con constancia, su pierna se encontraba entre las mías, podía sentir como mis paredes palpitaban. Mala idea darle su beso de buenos días cuando aun me encuentro en pijama, la tela es tan delgada que estoy segura que si Villamil baja su mano sentirá la tela mojada totalmente

Villamil: —Creo que tenemos algo pendiente ¿No crees? — Dijo con la voz un poco más ronca de lo normal y con su respiración acelerada

Ailén: —Ya te dije que no pienso hacer nada contigo en la casa de tus padres — Traté de sostenerle la mirada aunque por dentro sentía que no podía aguantar un segundo mas con la ropa sobre mi

Villamil: —Si tanto insistes... — Me tomó por la muñeca y me llevó al baño

Ailén: —Estás loco si crees que voy a aceptar hacerlo en el baño

Villamil: —Arréglate, no lo quieres hacer aquí, lo haremos en otro lugar

...

Sin tener ni puta idea de a dónde vamos, estoy aquí en el auto con Villamil, veo muchos árboles alrededor nuestro, he estado insistiendo en saber a donde me está llevando pero simplemente no responde, con el pasar del tiempo veo como pasa su lengua por sus labios constantemente y me dirige esa mirada llena de lascivia. No sé como con una sola mirada me puedo sentir nerviosa

Villa: —No estes nerviosa cariño, ya casi llegamos

Puso su mano sobre mi rodilla y comenzó a hacer círculos que poco a poco fueron subiendo a la parte interna de mi muslo, cerca de mi entrepierna, contengo el aire y trato de exhalar suavemente para no demostrar nerviosismo, pero sus manos solo logran que sienta un caos formarse en mi estómago así como una sensación que recorre todo mi cuerpo, sus dedos se posan sobre mi entrepierna y acaricia de arriba hacia abajo con fuerza, no sé en que momento abrí mis piernas