Ahí para ti © || El Comienzo || 1er Libro [LINK Y TÚ] COMPLETA *EN REVISIÓN*

CAPÍTULO 6

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Seguía acurrucada en su pecho y él con sus manos rodeando mi espalda. Temía que mi hermana llegara antes de lo previsto. Vi mi celular y tenía ganas de tomarlo y mandarle un mensaje, pero a la vez no quería dejar ir a Link ya que prometí no dejarlo solo. Suspiré y pude notar la hora, ya eran aproximadamente las cinco y media, supuse que mi hermana llegaría como mínimo a las siete u ocho. Intenté soltarme de Link para tomarlo; pero él cada vez me abrazaba más.

—Piensa en una excusa para que Link te suelte... piensa, piensa...— pensé mirando mi cuarto desesperada; suspiré cuando pensé en una idea —Link... tengo que ir al baño.

—No _______, no te voy a soltar— reí fingiendo que su comentario me había causado gracia, por lo previsto intenté soltarme moviéndome a ambos lados para que me dejara —_______ no lo intentes, no te irás.

Me empecé a alejar retrocediendo un poco y sus manos poco a poco me soltaban de la espalda. Lo cual causó que cayera de la cama frente a Link. Mi espalda aterrizó primero y luego mi trasero golpeó fuertemente el suelo. Link tardó un poco en reaccionar, pero la verdad me valió.

—¿Estás bien ______? No vi cuando caíste— lo miré con el rostro hecho una furia, me puse de pie y lo miré mirarme con una sonrisa burlona —en serio no me di cuenta, ¿estás bien ________? Perdón, me dio risa.

—Cállate Link— crucé los brazos y él no dejaba de reírse frente a mi cara —ahora vuelvo.

Link no podía retener las risas que lo invadían, como siempre, rodeé los ojos y me dirigí al baño para que me creyera. Antes de entrar al baño, tomé mi celular que se encontraba en mi pequeña mesa de noche; luego entré a este y cerré la puerta.

Ya adentro, me sobé mi trasero ya que en verdad me había dolido la caída. Prendí mi celular y me adentré en mensajes y tenía uno de mi hermana que me envió hace media hora.

—Ay no, regresará pronto. Debo hacer algo con Link... es cierto, ¡Link!— salí del baño deprisa y lo vi en la cama aún con los ojos cerrados, suspiré sabiendo que despertaría su bella cara de angelito. Me acerqué a la cama y desgraciadamente se había despertado desde que había salido del baño. Nuevamente sentí su mirada en mi como siempre, y como suele ser, me sonrojé.

—¿_______, ahora dormirás conmigo, verdad?— negué con la cabeza sin mirarlo, me sentí mal, pero de pronto él se levantó de la cama y me hizo mirarlo —¿por qué, qué ocurre? ¿te da pena?

Volví a negar ya esta vez mirándolo a los ojos. Sentí que mis lágrimas iban a salir disparadas por mis ojos; Link pasó su pulgar por mis mejillas secando las que apenas iban cayendo por ellas. Moví su mano para que no lo intentara, ya que si mi hermana lo ve, me iba a ir mal... o es lo que yo pensé.

—Link, mi hermana llega en menos de quince minutos, creo que será mejor que te vayas...— dejé un silencio incómodo esperando su respuesta. Lo miré y suspiró dejándome más confundida. Retrocedí un poco pero él tomó mi mano.

—No voy a dejarte _______. No sé porqué estoy aquí, pero sea buena o mala la razón... no te dejaré, jamás— mis lágrimas dejaron de caer y lo vi acercarse a mi preocupado. Me abrazó rodeando mi espalda con sus brazos como lo hizo antes. Correspondí y me ataqué a llorar en su pecho.

—Link, en serio no deberías cuidar de mi, soy muy torpe como para que me protejas de cualquiera— me separé muy poca distancia de su pecho y colocó una de sus manos en mi mejilla para que mis ojos miraran sus bellos ojos azules.

—________, te protegeré siempre. Estaré contigo en las buenas y en las malas. Estoy aquí para ti...— me sobresalté al oír su confesión. Ambos nos sonrojamos un poco, pero yo principalmente parecía tomate —ya no llores ________, me siento mal si te veo así, en serio.

Me separé de él y lo miré con una sonrisa secándome las pocas lágrimas sobrantes. Reí un poco al ver su sonrojo, mi risa le provocó que retirará la mirada de mis ojos. De pronto escuché la puerta de mi casa abrirse. Mi hermana ya había llegado.

—¿Andrea? Fueron menos de quince minutos, Link será mejor que... ¡Link!— en ese instante noté como Link salía por la puerta de mi habitación dejándome hablando sola —Link detente no quiero que mi hermana te... ¡Andrea!

—¿Quién es él?... alto, no será... ¿Link?— miré a Link por unos momentos y murmuré en su oído rogándole que no asintiera. Mi mirada se pegó con la de Andrea y Link asintió con una leve sonrisa —¿no es uno de tus amigos haciéndote una broma, _______?

—¿En serio crees que se molestarían en hacerme una broma? No...— crucé los brazos y la escuché reír. Rodeé los ojos y vi como Link bajaba las escaleras a su dirección. Alcancé a tomar su brazo para detenerlo, pero él lo jaló con fuerza y me capturó con él.

—Link por favor, deja de hacer esto— estaba roja de las mejillas al sentir más cerca a Link y más aún frente a mi hermana. Volteé la mirada y vi a mi hermana sonreír, pensé que era falsa, pero es buena para engañar.

—_______ y yo somos amigos. Espero que no te moleste que diga esto de ________.— lo miré extremadamente confundida, arqueé una ceja y vi a mi hermana mirarlo con atención —es muy guapa.

En ese instante mi hermana se rió a carcajadas y yo logré soltarme de su agarre. La miré amenazante y noté que eso le causó más gracia. —¿En serio crees que _______ es guapa? la guapa de la familia soy yo, _______ de dónde— balbuceó molesta y miré a Link para ver su reacción; pero eso sí lo admito, mi hermana es muy guapa.

—Bueno, sí eres guapa, pero ________ se me parece más atractiva, para ser sincero— escuché nuevamente a Link confesar algo que me sonrojaría como todo lo que dice o hace —bueno Andrea, fue un placer el haberte conocido, ahora ________ y yo iremos arriba. Espero que no te moleste o incomode.

Miré a mi hermana boquiabierta, con el ceño fruncido y los puños fuertemente apretados a sus costados. Me tomó de la mano y me llevó a mi habitación con un silencio bastante incómodo. Al llegar a ésta, me solté y pude perder el control; ya que no quería que mi hermana lo notara al inicio del drama.

—¡¿Es en serio Link?!, cómo puedes decir eso si ni siquiera me conoces— lo vi asentir dejándome nuevamente inmóvil como lo suele hacer. Me dirigí a mi cama y me senté en el borde, este día fue bastante agotador, primero me hacen burla y queman mi dibujo; segunda, me patean el estómago dejándome sin aire y echan café en mi cabello; tercera, llego a mi casa y aparece mágicamente Link en mi habitación, y por última Link confiesa que me quiere frente a mi hermana... que falta ahora.

—Oye, ahora sí ya es tarde. ¿Te parece si dormimos de nuevo juntos?— lo miré sonreírme de manera tierna, suspiré y asentí deseando que este día acabara de una vez por todas. Me acomodé en mi cama y Link se colocó a mi lado, empecé a cerrar mis ojos y sólo sentí la mano de Link rodear mi abdomen como antes lo hizo.

—Buenas noches ________— me susurró al oído provocando una diminuta sonrisa dibujarse en mi rostro. Correspondí y coloqué mi mano encima de la suya, cayendo ambos en un sueño.