UN NUEVO HOGAR (Naruto en Fairy Tail)

Capítulo 27

Una semana desde que Naruto Uzumaki no ha vuelto a Fairy Tail, y no era porque él no lo deseaba más bien era porque alguien consejo mágico no lo permitía, cada vez que terminaba un trabajo otro se le presentaba de la nada y eso le estaba molesto mucho. Deseaba ir a su gremio y descansar unos cuantos días, ya que aguantar a los consejeros durante una semana ya era suficiente para tenerle en la lista de dementes, una parte del entendía perfectamente porque los magos más fuerte de cada miembros se negaban a trabajar con ellos. Pero el rubio no tenía opción, el consejo mágico odiaba a Fairy Tail por hacer lo que querían, y aunque ellos hacían muy bien su trabajo el consejo mágico siempre encontraba alguna falla para desmerirarlos, entre otras estupideces más para que nadie piense que el consejo no puede controlar a los gremios. 

Patético – Dijo Naruto regalando esa mirada fría con sus ojos rojos al cuerpo sin vida de otro gremio oscuro que fue azotado por el Jinchuriki, el nombre clave que Naruto usaba cada vez que hacía esto tipo de trabajo, para que el consejo mágico no los toquen la pelota – el imperio Álvarez...- los ojos del rubio posaron en el escudo que poseía uno de los sujetos que mató o más bien el que descuartizo ya que las extremidades de este no se encontraban por ningún lado – solo es un mensajero... 

Naruto observo atentamente el escudo, no iba a hablar de esto con el consejo ya que no hacía falta mencionar algunas cosas, después de todo ya estaban muertos y sus almas capturadas como los anteriores. El rubio decidió salir del gremio oscuro, para poder destruirlo desde afuera para que no quedara nada, pero algo llamo su atención, era como si alguien estaba llorando, por lo que fue hacia donde el llanto lo llevaba. Mientras más caminaba el llanto que parecía de un bebé se escuchaba cada vez más fuerte y en uno de las pocas habitaciones se encontraba un bebé con extrañas marcas en ellas, que solamente llamaron la atención del rubio. 

Un sacrificio – Pensó Naruto observando al pequeño niño que lloraba por el dolor que le provocaba los símbolos que fueron tatuados por los magos de dicho gremio, con un fin que para el rubio era desconocido – como pueden hacerle esto a un bebé – Naruto suavemente colocó uno de sus dedos en el pecho del pequeño que dejó de llorar ya que agarró el dedo del rubio y comenzó a jugar con el como si fuera un peluche – lo siento...no puedo ayudarte

Naruto levantó nuevamente su dedo pero esta vez el pequeño que estaba en su cuna ya no volvió a llorar, y Naruto salió de la habitación con una mirada triste que si alguien que conocía la faceta despida de Naruto nunca iba a creérselo. El Jinchuriki el mago más despiadado de todos mostrando una mirada de tristeza sin duda era que los consejeros pagarán millones para ver en su patética existencia. Pero en estos momentos a Naruto no le importaba, tuvo que quitar la vida a un pequeño niño que iba ser el sacrificio para revivir a algún juguete de Zeref o a quién sabe qué cosa. El rubio odiaba a los gremios oscuros más que a cualquier cosa, por lo que si tenía que mancharse las manos de sangre solamente para proteger a su familia este lo haría incluso si terminan odiándolo.

Es la segunda vez que te veo esta semana...acaso estás enamorándote de mí – Pregunto Naruto a cierto mago misterioso que se encontraba a las afueras del gremio oscuro que fue devastado por el rubio, que con tan solo pisar un pie afuera de dicho gremio, este comenzó a incendiarse – y bien Mystogan...cual será tu respuesta...o quieres que te mate porque si es eso con gusto te complacere

Acaso no puedes dejar de verme como Jellal – Pregunto Mystogan que solamente recibió la negación del rubio que solo quito un suspiro ante la actitud de su rubio compañero que aunque eso fueran, cada vez que el rubio se encontraban con él, siempre le preguntaba si podía golpearlo hasta matarlo o romperle algunos huevos – cuando me dejaras ver como Jellal...

Tiene su cara...la misma voz...el mismo tatuaje...matarte se sentirá como matarlo a el – Respondió Naruto preocupando a Mystogan que en realidad no quería morir, pero tenía que aguantar las palabras del rubio ya que era muy bien sabido por los magos de los diferentes gremios que Naruto quería matar a el concejal por parecerse a Jellal Fernández o mejor dicho porque es Jellal - para que viniste hasta este lugar... no creo que sea para pelear o para ver que hacia

Quiero creer que estas muertes son envueltas en la luz sagrada – Dijo Mystogan que solo recibió como después una ligera palmada en los hombros de parte del rubio, que sorprendió al mago que no esperaba dicha acción del rubio – no entiendo como sigues aceptando estos tipos de trabajo... sé que quieres proteger al gremio del consejo...pero no hace falta llegar a estos extremos – el rubio no decía nada, en cierta medida era cierto pero también implicaba mucho trabajo para el maestro que ya no estaba en la edad requerida para aguantar las estupideces del consejo – no te gusta matar...y lo sabes

Soy un ninja...los ninjas somos mercenarios que lo único que hacen es trabajar para el mejor postor...matar esta en mi sangre – Respondió Naruto sin ni siquiera dirigirla la mirada al mago Mystogan que se quedó mirando al rubio, los dos venían de dimensiones distintas, pero el de Naruto era completamente distinta a la que Mystogan conocía – yo solo soy un inquilino en este mundo, quizás nunca me gusto matar, pero aprendí con el tiempo que si es enserio matar...lo haré sin dudarlo– el rubio comenzó a caminar alejándose de Mystogan que solamente dio media vuelta para ver como el fuego que Naruto había creado incendiaba el gremio oscuro o lo que quedaba de este gremio ya que el fuego que lo rodeaba no era el que él conocía, pero mientras el miraba el fuego, Naruto tenía algunos pensamientos en su cabeza – sé que cuando se entenderán...entenderán que en realidad soy un monstruo 

Fin Del Capitulo

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