Capítulo 18

199 50 8
                                    

Narra Logan

Estos días en los que me expulsaron, mi padre ha aprovechado para sumergirme de lleno en el negocio familiar. No sé cuantas veces le tendré que decir que no quiero heredar el negocio por el que estamos de mierda hasta el cuello, y menos después de que mi madre muriera... En gran parte por su culpa. La verdad, se merece que le rompa la cara por eso y por lo otro... ¿Cómo podía tener un padre tan hijo de puta? Estaba absorto en mis pensamientos, mientras tomaba tequila en el Garum, un local donde suele reunirse mi pandilla. Últimamente he estado de un humor pésimo, lo reconozco. Todos estos, mis amigos, con los que estoy aquí, van con pies de plomo conmigo porque ya le he roto la cara a Chris. Pedí un tequila, y me senté en la barra a esperar a que ocurriera algo entretenido que me animara la tarde.

Narra Ashley

No sabía si lo que estaba haciendo era buena idea o no, pero le debía una a Logan, y si estaba en este local, podría agradecerle lo que hizo y me quedaría tranquila, porque en cierto modo, me siento culpable de que lo expulsaran.

En cuanto llegué a ese bar me arrepentí de inmediato. Nada más entrar por la puerta, me convertí en el centro de atención. Todos me miraban y se echaban unas risas entre ellos.

En una de las mesas que estaban cerca de la entrada, vi a Carl, y me acerqué para preguntarle por Logan.

—Eh Carl—Carl se volvió de inmediato, y me miró de arriba abajo con una sonrisa en la cara—¿Has visto a Logan?

No le dio tiempo de responder ya que varios chicos empezaron a vociferar.

—Otra que busca a Logan...

—Se las lleva a todas el cabrón.

—Dime bonita ¿Logan ya logró meterse entre tus piernas y te abandonó?

—Como a todas Stefano—gritó otro.

—Yo no soy ninguna de sus putas imbéciles— ¡plaf! mi mano voló hacia la cara de Stefano.

—Vaya, vaya por lo que veo ya conocéis a la enana—dijo Logan a mis espaldas—Ya te has aburrido de niños chicos—dijo señalando hacia fuera del local, donde estaban Nick y los demás—Y vienes a jugar con los mayores—dijo Logan elevándome la barbilla.

—Imbécil— le aparté la mano de un manotazo.

—Menudo genio tiene la chica hermano—Todos se rieron menos Stefano el cual me despedazaba con la mirada. Venir aquí había sido una mala idea, así que decidí irme de ese lugar lo antes posible, porque no soportaba estar rodeada de esta gente, y menos si no me quitaban la vista de encima.

—¿Ya te vas?—dijo Logan agarrándome del brazo nuevamente.

—Sí—dije intentando zafarme de su agarre para salir de ahí.

—No tan rápido enana—dijo acercándose a mí para susurrarme en el oído—Tú me debes una si no recuerdo mal.

—Yo a ti no te debo nada.

—Ah ¿no? Dijo acercándose—pues gracias a mi te libraste de Fred ¿No te acuerdas?

—Ya claro ¿Cómo si yo te hubiera obligado a que le dieras esa paliza no?

—Bueno míralo como quieras, pero si no hubiera sido por mí, habrías acabado mal. Y por lo que sé, si yo te ayudo, tú me ayudas.

—Paso de ti, y de tus refranes, y no te pienso ayudar en nada ¡adiós!

—Solo tienes que venir a mi fiesta el viernes y no te molestaré más. Si es lo que quieres.

—Te he dicho que no te debo nada, así que no pienso ir a tu fiesta—me di media vuelta y salí de aquel local. Por suerte, Logan no me seguía, así que me fui con mis amigos que me estaban esperando a la salida del parque.

Al llegar, le dije a Madison que me dolía la cabeza y no me podía quedar en su casa. Liam se ofreció para llevar a los chicos a sus casas, y así Nick y yo no teníamos que desviarnos, para llegar a la nuestra.
A Madison, no le agradó la idea de que le hubiese dado plantón, pero sinceramente no me apetecía dormir en un lugar que no fuese mi casa, y menos después de hablar con Logan. La verdad, quería estar tranquila y pensar por qué alguien como Logan se comporta de un modo tan confuso conmigo. Sé que al final no le agradecí lo que hizo por mí, pero no lo soporto. No soporto su arrogancia, su chulería, siempre creyéndose superior a los demás... Madison tenía razón, no debo acercarme mucho a su grupito porque ya han demostrado que todos son iguales.

Intente despejarme mirando un poco las redes sociales, pero cuando cogí el móvil, vi que tenía un mensaje de un número desconocido:

Número desconocido:

Espero que te hayas pensado lo de la fiesta, porque no espero un no por respuesta.

¿Cómo había conseguido Logan mi número? Me dispuse a contestarte haciendo como si no supiera que era él, solo para ver que me decía.

Ashley:

—¿Se puede saber quién eres y quién te ha dado mi número?

Número desconocido:

—Mira que eres torpe enana ¿Alguien más te ha ivitado a una fiesta hoy?

Ashley:

—Mira Logan, respondiendo a tu pregunta, no pienso ir a tu fiesta. Aunque tenga que agradecerte lo que hiciste por mí el otro día no pienso ir contigo a ningún lado.

Número desconocido:

—Ya te he dicho que no acepto un no por respuesta. No pienso parar hasta que aceptes venir a mi fiesta.

Logan está loco si piensa que aceptaré a ir a su fiesta, y más después de cómo terminó la anterior fiesta a la que fui. Iba a apagar la luz para acostarme pero mi móvil no paraba de vibrar debido a los constantes mensajes que me estaba mandando Logan.

Ashley:

—¿Quieres dejarme en paz?

Número desconocido:

—¿Ya te vas a dormir? ¿Es que acaso tus padres te castigan si te quedas despierta hasta tarde? Asómate por la ventana anda.

Espera un momento ¿Qué me asome por la ventana? Salté de mi cama y fui rápidamente a la ventana, cuando mire hacia abajo, Logan estaba mirándome con una sonrisa en la cara.

—¡Buenas noches!

—¿Qué estás haciendo aquí Logan?

—¿No me invitas a pasar?

—Vete de aquí.

—¿Qué suba has dicho?- dijo levantando la voz. Lo que me faltaba ahora es que mi madre lo oiga.

—Baja la voz—dije notablemente enfadada.

—¡¿Qué?! No te escucho.

—Logan por favor ¿Qué quieres?

—Que te vengas a mi fiesta. No tienes excusa, además es viernes.

—No te iba a dar ninguna excusa, simplemente no quiero ir a ninguna fiesta contigo.

—¿Ah no? Pues yo tampoco me quiero ir de aquí. Así que invítame a pasar ¿no?

—Logan no seas más pesado, vete. Además no se qué ganas con que vaya a tu fiesta, según tú soy una estirada.

—Solo quiero que vengas, ya está, tampoco es tan difícil. Si aceptas te dejaré en paz, de lo contrario tendré que subir porque aquí abajo empieza a hacer frío.

Sabía que Logan no iba a darse por vencido, y que no se iría de mi casa a menos que aceptara ir a esa fiesta, y no podía dejar que mi madre o Nick lo vieran aquí.

—No te vas a ir hasta que acepte ¿verdad?

—Exacto.

—Mira haremos esto. Yo voy a tu fiesta, y a ti no se te vuelve a ocurrir venir a mi casa ¿Está claro?

—Está bien, no vendré a menos que me lo pidas.

—Sigue soñando—dije cerrando la ventana, no sin antes escuchar un ¡Buenas noches enana!

Mi mundo patas arriba #PGP2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora