A Jennie le duele ver como Jisoo se burla y hace muecas de asco hacia las parejas del mismo sexo, y no solo eso, sino también cuando la veía a ella luego de saber sus sentimientos.
[ Jennie Kim + Kim Jisoo ]
Menciones de otras parejas
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Ojeras, ojos rojos, labios secos, mirada vacía.
Jennie observaba la figura de la mayor con preocupación mientras cada vez se acercaba. Esa faceta de la mayor, era una que jamás se imaginó conocer y no le gustaba para nada ver de esa manera a la persona que amaba.
¿Por qué la mayor se encontraba en tal estado?
¿Habría estado llorando?
Dudaba en acercarse o no, para preguntar a la mayor por su salud. ¿Estaría enferma? No quería que le pudiese suceder algo malo que dañase su salud.
Además, había algo que no cuadraba.
Era extraño que el chico de su novio no estuviese allí con ella para consolar su tristeza, como se supone que tendría que hacer.
Por lo general casi, realmente CASI siempre estaban juntos o supervisando la escuela. Con sus manos tomadas, dándose besos, era cómo la mayor parte de veces se les podía apreciar.
La castaña dejo de dudar en acercarse o no. Debía actuar, Jennie apretó los puños y avanzó hacía la chica de cabellos negros.
La mirada perdida de la mayor, mientras avanzaba hacía ningún lugar, lejos de quien la pudiera ver, simplemente quería llegar hacía lo más recondito de la universidad y llorar hasta que se quedará sin ellas.
La pelinegra frenó en seco a oír unos cuantos pasos seguirla, así que se dio la vuelta para encarar a aquella persona que venía detrás suyo.
─Sabía que eras tú.
Jennie la observaba en silencio, mordiéndose él labio inferior con nerviosismo porque había sido descubierta.
─¿Qué haces aquí?
Jisoo miró a la chica que se acercaba a ella, dudo en avanzar o no para alejarse de la morocha, pero sus piernas no respondían, estaba cansada, frustrada y triste, no tenía ganas de hacer otra cosa simplemente llorar para desahogarse.
─Jisoo ─Sin decir más palabras, Jennie abrazó al amor de su vida con fuerzas.
Al sentir algo de apoyo, Jisoo comenzó a llorar en el hombro de Jennie, mojando su camisa de la escuela con sus lágrimas, dejando salir todo lo que guardaba y cargaba su corazón para sí mismo.
Jisoo estaba dejando salir a flote todo lo que su corazón había guardado por tantos problemas, emociones ocultas, entre más.
Jennie acarició los cabellos de la mayor, sonriendo para tratar de renconfortar a la chica que ahora estaba sufriendo en sus brazos.
─Te amo Jisoo, estoy aquí contigo ─Le susurraba Jennie con ternura y amor en sus palabras, Jisoo solamente correspondió aún más al abrazó mientras seguía llorando ─. No me iré, tranquila, llora. Desahogate, te sentirás mejor si lo haces.
Jisoo pensó en ¿Cómo podía existir alguien cómo Kim Jennie?
─Tonta Jennie ─susurró Jisoo en el cuello de la chica, las lágrimas bajaban por las mejillas de la chica de piel pálida.
─Tonta por ti sí.
─Muchas gracias ─Musitó casi inaudible ─. Necesitaba alguien a mi lado en estos momentos.
Jennie cerró sus ojos, disfrutando de aquella muestra de afecto de la mayor. Tal vez no todo estaba perdido.
