Desperté, me hallaba en una camilla de hospital, Brais dormía en una esquina de la cama.
Miré al rededor, y confirmé lo que pensaba, me encontraba en un sanatorio.
Parecía ser una casa muy antigua y grande. Separaban a cada paciente con unas cortinas blancas, desde aquí podía ver a muchos otras personas heridas, enfermas o quién sabe qué.
–Brais, pssst, oye Brais despierta– le hablé sacudiendole su brazo.
–¡Soy inocente!–dijo sobresaltándose, me sacó una sonrisa–Oh, Elián, despertaste, qué alivio–me abrazó con cariño.
–Ya, ya, que hago aquí?–le pregunté separándome de él.–Estoy muy preocupado, no recuerdo nada.
–Tranquilo, te contaré lo que pasó. Ayer cuando tú y Nerissa aprendían a volar te desmayaste en pleno vuelo, caíste de una gran altura amigo. Por suerte no te pasó nada grave, solo te fracturaste una ala y no podrás volar durante mucho tiempo–miré a mi derecha, era verdad, la tenía vendada hasta la mitad.
–¿Y Nerissa dónde está?–le dije, no la había visto hasta ahora.
–Ah, se fue con ese tal Yoni.
–¿Yoni?– le pregunté, será que ahora tiene otro pretendiente más.
–Ese gato rubio, el de ojos color moco.
–Ah, ya entendí, es Yannick, no "Yoni"–le corregí.
Me blanqueó los ojos, también lo odia.
–Bueno, lo que importa aquí es que estás bien, en un rato vendrá el doctor a verte y te darán el alta.
Bajé la vista, me di cuenta que estaba usando la ropa del hospital, que incómoda es.
–Brais, pásame mi ropa por favor–le pedí.
–Lo siento, la llevé a la lavandería, estaba sucia, al parecer caiste sobre un charco de lodo–mierda –De igual manera no te alteres, mira, aquí viene el doctor.
–¿Elián Slime?–preguntó el doctor con una libreta en su mano, ¿Slime?
–Sí–respondí confundido.
Podía escuchar a Brais que se aguantaba la risa.
–Bien, ¿Cómo te sientes?–cuestionó
–Bien, muy bien de hecho.
–¿Tienes náuseas, te duele la cabeza...?–
–No, nada de eso, solo me duele la herida en mi ala–dije.
–Entonces, solo tuviste un ataque de ansiedad. No es nada grave, solo procura hacer reposo por esa herida–firmó algo en su libreta– toma, te doy el alta–me entregó el papel y se fue.
Clavé mis ojos en Brais.
–Quiero, necesito y exijo una explicación de por qué mi apellido es Slime.
–No hay porqué–me respondió.
–Vamos, ya deja esos juegos Brais.
–Discúlpeme señor mayorcito, olvidé que usted es todo un hombre maduro.
Este Brais parece un personaje sacado de una historieta de chistes.
–Ahora sí dime la verdad.
–Oye, no se que querías que haga, no me sé tu apellido y de alguna forma tenían que registrarte en el hospital, no tienes idea del hermoso cuento que le inventé a la enfermera para que no sospechara que eres un controlador de sueños.
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Caught: Sólo en mi mente
AcakElián Edevane, un chico de 13 años, cuya vida es desagradable y no se la desea a nadie en el mundo. Tiene la extraordinaria habilidad de controlar sus sueños mientras duerme. Pero un día, su historia toma un rumbo totalmente distinto cuando se queda...