Between Memories, Between Suffering

Disculpas

- No quiero ver más... ¡Quiero salir de aquí!...

Aún estaba sentado en el suelo, sin ganas de levantarme, y gritándole a la nada. ¿Cuándo pensaba llegar Inglaterra a casa? Él era el único que sabía cómo funcionaba esto y el único que podía sacarme. Pero... ¿Y si no sabe que estoy aquí? Parecía que hacía mucho tiempo que no bajaba al sótano. Tal vez ni se da cuenta de que entré en su casa... Dios por qué tuve que entrar. Maldita curiosidad. No quería seguir viendo todo el daño que le hice a Inglaterra, no quería seguir viéndolo sufrir. Pero supongo que no saldré de aquí hasta que vea todas las puertas, o al menos hasta que me encuentre Inglaterra. Tenía fe de que ocurriera lo segundo, pero mientras tendría que entrar en otra puerta para hacer tiempo, aunque no quisiera. Me levanté al final y, después de observar las puertas que quedaban, me dirigí hacia la que parecía ser la más cercana a la actualidad. No era la mejor de todas pero al menos ya me imaginaba lo que podría pasar ahí dentro, y yo no sería el protagonista.

- 1940... Vayamos a la Segunda Guerra Mundial...

Abrí la puerta sin muchas ganas y terminé en la plaza de Trafalgar Square. Observé mi alrededor y todo el mundo corría de un lado para otro, salvando lo que podían de sus casas mientras caían bombas sobre la ciudad. Esta imagen me impactó un poco, viendo que Alemania no se molestó en pensar en las vidas humanas que estaba matando. Sin poder darme cuenta, una bomba cayó cerca de donde estaba y todo tembló de tal forma que caí al suelo, impidiéndome ver algo por el humo. ¿Dónde estaba Inglaterra? Cuando pude ver un poco más comencé a andar hacia algún lado ya que no sabía adónde ir exactamente, pero de alguna forma logré encontrarme con Inglaterra. Estaba ayudando a algunos heridos por los escombros en el centro de la plaza, donde no había edificios cerca que pudieran herirlos. Pero poco después se dirigió corriendo hacia la zona donde acababa de caer la bomba y, junto a otras personas, se puso a buscar bajo los restos a sobrevivientes de la explosión. Toda esta escena me entristecía. Inglaterra tenía que estar sintiéndose horrible, viendo morir a miles y miles de ingleses ante sus ojos. Al ver todo esto siento que lo que me pasó a mí con las Torres Gemelas no fue nada... Tuve suerte de que la guerra solo me llegara en pequeña medida.

- ¡Ayuda! ¡Hay gente atrapada en el sótano!
- ¿Dónde?

Una mujer se acercó a Inglaterra llorando como el resto de personas, mientras él permanecía serio y sereno. Tal vez era para no preocupar más a los demás. Siguió a aquella mujer hasta el edificio casi demolido por los temblores y le indicó dónde se habían quedado atrapados los demás. Sin dudar ni un momento, atravesó la puerta de aquel edificio y bajó las escaleras que daban al sótano. Lo seguía algo preocupado de que pudiera caérsele algo encima ya que las condiciones no eran las mejores. Visualizó a las personas atrapadas por una viga y las ayudó a liberarse de aquello. Se fue asegurando de que saliesen cada uno de ellos, viendo que pudiesen caminar mientras ayudaba a otros. No sabía que había hecho cosas así... Pero de repente mis preocupaciones se hicieron realidad. Cuando se encaminaba para salir, una vez que los demás ya estaban a salvo, se produjo otro temblor que hizo caer al suelo a Inglaterra, y lo peor de todo, que se cayera parte del techo sobre él. Ni siquiera le dio tiempo a reaccionar cuando un pedazo de piedra cayó sobre su pierna y una tubería le atravesó el pecho.

- ¡Ghm!
- ¡Inglaterra!...

Me acerqué a él asustado por su estado mientras este no dejaba de toser sangre y de temblar. Intenté levantar aquel trozo de techo pero solo lo atravesaba, no podía hacer nada. Pero alguien lo encontraría, alguien lo sacaría de aquí... Tenían que hacerlo. Desvié la mirada hacia la salida y estaba completamente tapada, no había por dónde entrar o salir. Esto debía ser una broma.

- J-joder cómo duele...

Volví a centrar mi vista en él y tenía ambas manos en la tubería, intentando sacársela a la fuerza. Quise detenerlo, me dolía verlo así, me dolía todo, pero solo me pude quedar viendo cómo cerraba los ojos con fuerza mientras intentaba sacarse aquel objeto de su pecho. Admiraba lo capaz que era de estar relativamente tranquilo en una situación así. Yo no podría. A los minutos de estar intentándolo se tuvo que rendir al no quedarle fuerzas. Perdió tanta sangre que no entendía cómo era que seguía consciente. Se quedó mirando al techo jadeando y con la respiración muy débil. Era cuestión de segundos que acabara desmayado, pero me sorprendió otro temblor que hubo de repente y lo último que escuché salir de su boca fue mi nombre justo antes de que el edificio terminara de derrumbarse y todo volviera a ponerse en negro. No podía haber pasado, imposible. ¿De verdad se quedó aplastado por un edificio? Pero alguien tuvo que sacarlo de ahí... ¿Y por qué me llamó?...