Bad Moon Rising ✖️ Avengers

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❝It's difficult to move on
When nothing was right and nothing's wrong
You still can't look me in the eye❞

- I'm a Ruin > Marina and the Diamonds.

Dos pequeñas niñas corriendo en un campo verde, riendo al viento sin ninguna preocupación. En la lejanía sus padres, tomados de las manos, las observaban desde una sabana de pícnic bajo un árbol.

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Dos adolecentes en un ring, una fina capa de sudor cubriendoles el cuerpo, su respiración rápida, agitada. Y en la esquina, una señora hablando ruso.

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Dos mujeres adultas sentadas sobre una cornisa en un edificio, un par de manzanas en cada mano, hablando del pasado y el futuro mientras una suave briza les revolvía el cabello. En uno de los departamentos, tres sujetos susurraban conspiraciones.

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Dos hermanas mirándose a los ojos por una ultima vez, lagrimas inconscientemente suprimidas. La habitación cubierta de sangre y tres cuerpos inmóviles.

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Dos extrañas frente a frente, después de años separadas, una última vez.

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Natasha Romanoff no era una persona que cayera facilmente en shock. Despues de tantos años en su trabajo y viendo las cosas que había visto, habian pocas cosas que la tomaran por sorpresa.

¿Pero esto? Esto se llevaba el premio.

Tendida sobre una mesa de metal frente a ella, yacía el cuerpo frío e inmóvil de su hermana. Una manta la cubría de pies a cabeza pero hacia poco por esconder la verdad. Natal-no, Anya estaba muerta. Por su culpa. Y después de tantos años, después de lo que había hecho, Natasha se había imaginado que estaría feliz cuando este momento llegara, o tal vez un poco... abrumada, perpleja, atónita, quizás incluso que podría sentir alivio de que todo hubiese terminado. Pero nunca esto. Esta sensación de shock; su cuerpo cubierto por una capa de sudor frío, sus ojos demasiados abiertos pero perdidos, temblando levemente.
Y bajo todo eso, culpa. Maldita culpa.

Porque Anya había muerto protegiéndola.

Sin pelea final entre las dos hermanas. Sin insultos. Sin odio en la mirada. Sin satisfacción.
Ella solo... había caído muerta a sus pies. No hubo tiempo ni de preguntarle porqué.
¿Porque la había salvado por segunda vez? ¿Porque había hecho lo que hizo aquella vez? ¿Porque realmente estaba en los Vengadores?

Era demasiado tarde y ahora-

- Natasha - La mano de Nick Fury calló pesadamente sobre su hombro, sacándola de sus pensamientos.

Reflejos de muchos años en servicio tomaron control de su cuerpo y la pelirroja se volteó. Hombros firmes y espalda derecha.

- Creo que es momento de que hablamos. - Siguió el director de SHIELD.

Natasha le dedico una última mirada al bulto sobre la mesa y lo siguió.

Caminaron en silencio por los pasillos del Helicarrier, ignorando los ojos y susurros que los perseguían, hasta llegar a una oficina que la agente conocía bien.

- Toma asiento - Dijo con voz clara el hombre de tez morena mientras él hacía lo mismo. Por unos momentos ninguno de los dos emitió palabra. Natasha estaba demasiado sumida en sus pensamientos, el shock aún no eliminado totalmente de su cuerpo, como para darse cuenta de lo tenso que estaba su director. Con un suspiro, el hombre dejó algo caer en la mesa y sin decir nada, cruzó los brazos sobre su pecho.

Ahora sí la pelirroja se dispuso a prestar más atención, pero cuando sus ojos se posaron sobre lo que había frente a ella, no pudo evitar un sonido de sorpresa.
Tres carpetas de color marrón descansaban tranquilamente sobre la mesa, las palabras "Top Secret" en rojo ocupaban casi toda la tapa. Eran viejas, archivos de ese tipo ya no se usaban con la tecnología de ese momento, pero uno debía admitir que ya nadie se esperaba información importante en papel.
Lo que la había sobresaltado eran los nombres en la esquina.

Luke Ambrosio.

Amelia Strong.

Josh Gullen.

Esos nombres... hacia tanto tiempo que no los veía. Sus amigos, su familia en SHIELD.

- ¿Que es esto? - Gruñó prácticamente la agente.

Nick Fury soltó otro suspiro y, relajando sus hombros, pareció disponerse para una larga conversación. Natasha nunca lo había visto así.

- Hace casi diez años, no mucho después de que tu y tu hermana fueran asignadas a un equipo con estos tres, Natalia escuchó una conversación que...no debía escuchar. - El único ojo del director de SHIELD parecía penetrar hasta el punto mas profundo de su alma, y no importaba cuando quería, Natasha no podía apartar su mirada ni dejar de escuchar. - Esa conversación era entre los agentes Gullen, Ambrosio y Strong. Enseguida, Natalia trajo esa información a mí y una investigación en silencio se comenzó a llevar a cabo.

Una investigación...

- La minima cantidad necesaria de personas estuvo involucradas y en poco tiempo se llegó a una verdad alarmante; SHIELD había sido comprometida, y no por una ni dos personas, sino tres.

Inmediatamente después de que Fury terminó de hablar, ojos verdes se posaron sobre los archivos en la mesa, los puntos comenzando a unirse en su cabeza en contra de su voluntad.

Tres personas... NO.

- Si esto salía a la luz dejaría en evidencia que SHIELD tenía debilidades  y no hubiese pasado mucho tiempo antes de que organizaciones enemigas tomaran acciones de ataque. Fácilmente se podría haber desencadenado un conflicto mundial. - Nick tomó una gran bocanada de aire - Teníamos que tomar una decisión rápidamente y entonces fue ahí cuando tu hermana se ofreció.

Cállate.

- Se debía solucionar silenciosa y rápidamente. Fue en aquella misión en el medio del bosque en Tailandia que Natalia tenía ordenes de... resolver el problema. Lo único que pidió a cambio fue que no se te involucrara.

Cierra la boca.

- En un momento tuyo de distracción, Natalia llevo acabo lo que debía hacer.

- Pero...casi los descabezó... yo los vi... - Balbuceó. Su respiración tan errática como su corazón. 

- Habíamos detectado un chip de alguna clase en el cuerpo. Resultaron estar demasiados...incrustados en el cuello como para sacarlos limpiamente.

Dios mío...

- En todos los años que Natalia no trabajó formalmente para SHIELD ella se infiltró en numerosas agencias enemigas y ayudó a destruirlas, así como también previniendo desastres antes de que ocurran. Su reputación de mercenaria en realidad fue creada por SHIELD con el objetivo de hacerla más conocida y confiable en los ojos de nuestros oponentes. 

Anya...

- Su única condición fue que no te informáramos, tu no debías enterarte de nada. Todo era de llevarse a cabo en las sombras. Supongo que... Natalia no quería que supieras de la traición de personas que considerabas familia.

Lo siento tanto.

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SIN EDUTAR.