Mar del Norte, Año 1599.
Era un verano agitado en las aguas de un pacífico mar, hace días que no daba con el rumbo de su nave y ___ estaba murmurando para si maldiciones a aquella tormenta que los había emboscado la noche de hace dos días, había empapado todo, herido a unos cuantos de sus tipulantes y lo peor la había sacado de su trayectoria llevándola así a "naufragar" en aguas misteriosas, aguas que nunca había navegado. A pesar de los inconvenientes y el mal humor que empezaba a surgir, ___ se mantenía firme, alentando a su tripulación y asegurando que esto no era motivo para abrumarse, si no mas bien para alegrarse pues el mar los había llevado a su próxima aventura. Aunque ella no lo supiera de momento, estaba en lo correcto.
Palabras semejantes decía fuertemente el Capitán del navío "Susurro Mortal". Un apuesto hombre llamado Harry era el navegante del gran barco que estaba a punto de desembarcar en una pequeña isla nombrada por él "La cuna de la luna" ya que cuando la había encontrado, hace ya varios años atras, lo primero que atrajo su vista fue aquella gran montaña, en el centro de la pequeña isla, que tenía en su pico una curva muy marcada que acunaba a la una luna, con forma de casi perfecta circunferencia para aquel entonces; desde esa primera vista la isla lo llamaba, el encanto que desprendía lo atraía de una manera tan grande que decidió convertirla en su hogar y en la de su tripulación.
- Después de ya casi dos años en el mar está aventura a concluido, y gracias a todos nuestros esfuerzos hemos ganado la victoria y una gran fortuna - decía Harry, con desbordante orgullo desde lo alto de la cubierta principal a su tripulación, mientras está última gritaba y silbaba por la alegría y satisfacción de haber logrado todo y por fin poder ir a tierra firme a celebrar con borracheras y unas cuantas mujeres.Luego de que la mayoría de su tripulación ya había dejado la nave y llegado a la costa Harry aseguro una cuantas cosas en el barco, luego de ciertos ajustes y quedar satisfecho decidió por fin bajar para ir a su tan amada isla. En la costa se detuvo para mirar una vez más su barco y ver como el sol se iba apagando mientras se escondia en el horizonte, con un suspiro emprendió la marcha por el sendero para llegar al centro del bosque dónde estába una gran fortaleza a la que a él le gustaba llamar casa cuando estaba en la isla; pisando la entrada de la fortaleza escuchaba los gritos y alaridos de tripulación que se encontraba en el pueblo aún mas adentro en la isla, sonrío, él también estaba contento y satisfecho por haber regresado a casa; bajó la vista unos segundos para quitarse el sombrero y antes de poder lograr su objetivo su cuerpo quedo rígido al sentir el filo de de una espada tocando uno de sus hombros, su mano fue instintivamente a la empuñadura de su espada colgada en su pierna izquierda, pero cuando no la sintió relajo el cuerpo y lanzó una estrepitosa carcajada al aire, volteó y alzó en sus brazos a una muchacha de unos cuantos años menos que él, era su viva imagen, la chica metió la espada en el forro en la pierna de su hermano y empezó a quejarse mientras él la cargaba en su hombro hasta el inicio de la casa.
-Has aprendido bien pequeña sabandija- dijo él bajandola y colocándole en el suelo.
Ella sonrió -he aprendido del mejor- lo abrazo -¿qué tal te ha ido hermano mío?, por lo que veo el mar no se dio cuenta de que un loco entraba en su territorio- dijo ella burlona.
Después de una sonora carcajada Harry respondió a la burla de su hermana:
-Se dio cuenta que Bella Cox se había quedado en la isla y no tuvo de que preocuparse- ambos rieron y abrazados por los hombros se adentraron mas en la casa.
Aún en el mar el barco de la Capitana ___ seguía sin rumbo, sin que su tripulación lo supiera ella paso hora tras hora pensando en <¿qué harían?>, era hora de encontrar una isla, tomar un descanso, renovar fuerzas y conseguir insumos que ya hace unos meses habían empezado a agotarse, salió de su camarote resignada a la idea de que pasarían días antes de llegar a ver tierra firme, pero cuando levanto la vista se llevó una gran sorpresa al ver que ante ella se encontraba una pequeña isla, no se percato de la precencia del navío que yacía anclado al otro lado de la isla, pues sus ojos no se podían apartar de aquella curva tan extraña en la montaña que parecía esparcer magia acunado a la luna que estaba medio llena y se posaba ensima de ella, sin titubear, ni pensarlo mucho ___ avisó a su tripulación:
-Descansaremos en esta isla- pauso, pensado por algunos minutos -sin embargo sólo bajaremos cinco hombres por esta noche para asegurar la zona, si avistamos otros barcos ó nos encontramos con problemas regresaremos de inmediato para planear y según sea el caso organizar una estrategia y emboscar. Pienso descansar aquí sea como sea, sean cautelosos- dijo por último aquella mujer de ojos castaños.
Después de indagar un rato y de mirar a la gran cantidad de hombres y una cuantas mujeres que conformaban su tripulación anunció con voz firme su decisión, mientras aquellos a los que había observado antes la miraban espectantes para escuchar quienes serían los afortunados que pondrían sus pies primero en aquella tierra nueva.
- Ben, Smith- empezó a nombrar ___,
- Pool, William- continúo la Capitana
- y por último ... - penso unos intantes antes de mirar hacía atrás, por ensima de su hombro, donde se encontraba parado a unos pocos pasos de ella un joven corpulento y de asombroso físico al que ella estaba orgullosa de considerar su mano derecha y un hermano.-Por supuesto yo, mientras tanto tú Zack te quedarás por si sucede algo- le sonrió y este último le devolvió el gesto.
-Seré yo quien quede a cargo, ¿entendido?- dijo el segundo al mando con voz poderosa.
-¡sí señor!- respondieron con sincronía el resto de la tripulación.
-Acompáñame Zack- pronunció ___ con un gesto para que el chico la siguiera a su camarote, volteo unos segundos y grito a los hombres en la borda:
-Preparaos todos saldremos en unos minutos- siguió su camino con Zack pisandole los talones, al estar en el camarote el joven cerro la puerta tras de si y pregunto:
-¿qué es lo que tienes pensado ___?-
-Revisaré la zona, si esta todo en condiciones vendrá alguien y avisará y bajarán todos, si hay problemas también alguien vendrá para hacerlo saber, y si no hay señales de nadie por la mañana ya sabes que hacer-
Pasado algunos segudos lo miró amenazante, -cuida bien de mi pequeño- dijo ___ refiriéndose "Ángel caído" su barco.
-Debes estar alerta en todo momento-
Zack asintió y abrió la puerta sabiendo que la conversación había terminado, dejo que la dama pasara adelante y después la siguió.
-Es la hora- anunció ___ y uno de los cuatro hombres que había escogido se acercó para indicar a su Capitana que el bote que los llevaría a la costa estaba esperandolos ya, ___ se volteó dio una última mirada a Zack.
-Volveré pronto enano - dijo ella y él sonrió al escuchar el apodo que ella le había puesto, y al que se había acostumbrado, la primer vez que se vieron, hace diez años para ser exactos; para aquel entonces el tenía 15 años de edad y ella 18, a pesar de que ella era la mayor él era el más alto pero, claro, ese detalle no había impedido que ella le llamara de ese modo.
-Ten cuidado tonta- {tonta} Adjetivo que le habia puesto él ese mismo día en objeción al apodo antes mencionado. Ella devolvió la sonrisa y comenzó el descenso al bote que rápidamente empezó a dirigirse a la costa.
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☆The cradle of the Moon☆ H.S
أدب الهواةEl tiempo nos ha demostrado que "Hay un paso del amor al odio" ... pero ¿es posible que suceda al revés?, ¿podrá convertirse el supuesto "odio" en amor?, ¿Acaso ___ y Harry podrán aceptar la muy notable atracción entre ellos y pasar al siguiente niv...