Capítulo 3.

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Mí día de escuela comenzó como cualquier otro, pero el destino me tenía preparado algo completamente diferente a lo ordinario.

Un accidente de auto me arrebato a mis padres a los 10 años de edad y no hay un solo momento en el cual no piense en ellos. Sí pudiera expresarlo sería el dolor más grande que haya sentido en mi vida, no podía respirar y mi corazón a cada latido se quebraba hasta destruirse, pero no podemos cambiar el pasado; mentiría al decir que me encuentro totalmente en paz respecto a esa perdida y aún así albergo en mí la resignación.

Gracias a su incondicional apoyo y sus constantes llamadas, entendí parte de lo que ahora me permite seguir adelante.

Cuando se es joven, no aprendes lo delgada que es la línea entre hermandad y un amor de "novela", sin duda alguna yo no sabía eso a mis 13 o 14 años, haciendo a Michiru la chica de mis sueños en ese tiempo; no lograba ver mi proyecto de vida sin que estuviera ella en cada una de mis decisiones, eso hasta el día de hoy no ha cambiado mucho.

Las memorias a su lado eran bastantes para conocer su naturaleza y aunque cuando éramos niños jamás me hablo al respecto, en nuestra adolescencia fue lo que fortaleció nuestra amistad. "Siempre es mejor saber la verdad, no importa que tan dolorosa sea" una frase que me repetía constantemente y más al escuchar aquella que no me esperaba, pero que no estaba precisamente oculta.

Mich y yo crecimos, lógicamente y despertamos el interés de todas las amistades que resguardábamos, ya que al paso del tiempo en lugar de cerrarnos y centrarnos en "dos contra el mundo" fuimos socializando y haciéndonos cada vez más propensos en encontrar amigos en cada persona.

Ella fue la primera en todo, si, con eso me refiero a los aspectos íntimos aunque esto con más deseo de experimentar que romanticismo en nuestra voluntad.

¿La mejor sorpresa de todas? Dos grandes confirmaciones. La primera fue que no había cambiado nuestra relación y era obvio que ya nada podría hacerlo; un afecto más estable, la segunda y última sería lo que ya era un tema recurrente entre nosotros, a la bella Michiru no le interesaría estar con un hombre.

Y mientras nuestros grupos más cercanos daban por hecho que éramos pareja, sólo nos divertía burlarnos de sus conclusiones y de lo gracioso que nos parecía fijar nuestra mirada en la misma chica, al menos en esa época.

17 años, con toda la discreción que ambos podíamos tener, nos encantaba tener "citas" ya que lográbamos compartir métodos de conquista. "La ventaja es mía, porque soy una mujer y nadie desconfía de mis intenciones" me comentaba con altanería "Soy irresistible Mich, todas caen con mi sonrisa y caballerosidad, no tienes oportunidad" replicaba con la misma actitud.

Debo confesar que mirándolo así, aquellos días fueron de los más felices y divertidos de mi vida, de un modo pienso que ella opina lo mismo.

Pero lo único constante es el cambio, fue como nuestros años pasaron y el ingreso a la universidad lo modifico todo, poco a poco tuvimos que hacer elecciones.

-Debes estar con ella- un poco afligida, pero con felicidad en sus palabras.

-Pero, eso significa que ya no podremos…-No pude continuar, me silencio poniendo uno de sus dedos en mi boca.

-¿Fingir ante mis padres? Darien, no seas tan tonto –riendo un poco- eres mi mejor amigo y verte tan pleno con Serena me alegra a mí también, no te preocupes por mí, yo siempre estaré bien, sólo vive tu vida como desees hacerlo.

Si, tuve suerte al conocerla y que siempre fuéramos mejores amigos.
...

Aún sostenía una conversación trivial con Ryusei acerca de mi profesión cuando Michiru nos devolvió su presencia, para así comenzar nuestro desayuno.

-Yo lo haré- comento nuestro invitado con gusto –Después de todo no he tenido la oportunidad de impresionarte con mi talento culinario.

-Gracias, eres un encanto- respondió.

En unos minutos, nos encontrábamos disfrutando lo que sería la versión más presentable de un desayuno "Americano" que hayamos tenido jamás en nuestro apartamento.

"El Ganador" como recién descubrí que lo llamaré, se veía muy animado, sumamente conversador, tratando de halagar e integrar a Mich en cada una de sus anécdotas, de ese modo pudimos saber que no sólo era un gran cocinero, sino que además tenía un futuro prometedor en el ámbito empresarial, sin duda un partido perfecto para cualquier mujer.

Al finalizar, terminamos la limpieza correspondiente y él mismo fue quien optó por retirarse, haciendo énfasis en que deseaba llevar a su "novia" a una cita cualquier otro día, mi amiga acepto y le despidió desde en la entrada del edificio.

-¿Tienes planes para hoy?- Pregunté mientras tomaba y acomodaba algunos papeles dentro del maletín.

-Sólo deseo relajarme, hoy no debo ir a trabajar, supongo que pintaré y descansaré- Me comentaba al recostarse en el sofá. -¿por qué?

-Para que fueras después de mi trabajo, con Serena y conmigo a una fiesta.

-¿Y hacer un mal tercio? No, gracias.

-Es la fiesta de una de sus amigas, irías como mi invitada.

-Te lo agradezco, pero sólo quisiera relajarme después de esta noche.

"Esta noche" no fue la primera, ni la última. Sí yo me encontraba harto con la situación, no podía imaginar ella. ¿Qué tan difícil es decir ¡Basta!? Es mi hermana, me preocupo por ella...

-No lo hagas más –Le contesté sintiendo esa acumulada y tan conocida tristeza- Sí no es lo que deseas… deberías.

-Yo ya me decidí Darien, siempre lo he callado y no será diferente, menos ahora, cuando esta Ryusei de por medio -Esbozo una leve sonrisa- Siempre seré la dama perfecta que debo ser.

Ella estaba recostada en el sofá, sus brazos y un mechón de cabello tapaban su rostro, seguramente Mich no trataba de convencerme a mi.

-Iré al trabajo, es probable que no pueda contestar si quieres llamar, tengo muchos chequeos de rutina, algunos equipos deportivos han estado yendo toda la semana.

-De acuerdo.

Sabía que cuando usaba aquel tono serio, pero tranquilo no había forma en la que pudiera lograr que entrara en razón.

No es fácil crecer y menos cuando tienes ciertas expectativas sobre ti y ella más que nadie en este mundo estaba dispuesta a cumplirlas por sobre todo, inclusive su felicidad.

Las apariencias solo nos hacen daño.

...

¡Hola! 👏
¿Qué les pareció este Capítulo 3? quizá les parezca algo raro que la forma en la cuál se desarrollo su relación, pero así fue... XD

Ahora bien, pudimos conocer más sobre el pasado de Mich y Dar~ Pero no se me alarmen, que ya no hay capítulos enteros llenos de recuerdos, ahora comienza la verdadera historia... PREGUNTA ¿Cuántas veces tienes que encontrarte con alguien "sin querer" para considerarlo el destino? algo así le pasará a Mich...

Escondí una pista en uno de los últimos comentarios de Dar~ alguien sabe de ¿qué?

Por cierto! No quiero perder la oportunidad de agradecer por todos sus votos y lecturas a "Fuego de Amor" 😥 ya casi llegamos a las 100 estrellas ★ 👏 gracias De verdad! No creí pasar de 1 😊 les mando un fuerte abrazo y beso! 🔥

💗 Espero, como siempre que les vaya gustando la historia y que no olviden dejarme sus comentarios 📝 y votos 🌟 preciosos (mi precioso), para que podamos platicar más. Y pues, de nuevo gracias, ¡gracias! por leer... espero continúen y no la dejen de seguir. Bye bye**

TheDragonGiirl 🐲🌹

Las dos caras del Espejo: Apariencias entre Decisiones. 🌙 Sailor Moon Fic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora