My last dream <Ezra Miller> <elizabeth gillies>

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- No quiero sonar desconfiada, pero ¿estás seguro de que lo lograras?

- En la mañana parecías tan segura ¿ahora estas dudando?

- Odio admitir que tienes razón

Apretó el acelerador, estábamos concursando en una carrera donde el premio eran diez mil dólares para la primera pareja que cruzara la línea que estaba a 59 kilómetros de distancia y no, no lo hacíamos por el dinero solo queríamos pasar el rato

- ¿estas lista?

- Si

Soltó el escape, luego lo giro para acelerar y pude sentir como la rueda delantera comenzaba a elevarse del suelo, Matt comenzó a levantarse al mismo tiempo que yo, enrede fuertemente mis brazos alrededor de su pecho, el comenzó a gritar lo que me causo risa para después imitarlo. Comenzó a bajar la velocidad para bajar la motocicleta nos volvimos a acomodar en nuestro asiento y cruzar la meta, no podía creer lo que acababa de pasar, éramos los primeros en llegar, me abrazo eufóricamente, reíamos como unos locos celebrando nuestro triunfo cuando de pronto sus labios se posaron sobre los míos, no dude y le correspondí, mis brazos ahora estaban en su cuello profundizando el beso aún más, cuando el aire nos falto nos separamos lentamente sin separar nuestras frentes

- ¿Dónde habías estado todo este tiempo?

Me sonroje, cuando de pronto fuimos interrumpidos por toda la gente que nos felicitaba, nos entregaron el premio así que decidimos ir a un lugar más tranquilo, caminaba algo torpe ya que aún no podía olvidar la sensación de sus labios, me sentía una boba enamorada pero no quería espantarlo así que trataba de actuar lo más normal posible.

Me invito a sentarme con el sobre una banca, estaba agotada no sabia ni siquiera la hora, pero me di cuenta de que no había dormida nada cuando el sol comenzó a salir, era una vista espectacular pero no pude evitar que se me escapara un bostezo

- Puedes utilizar mi hombro

Acepte y recargue mi cabeza

- Sabes este has sido uno de los mejores días de mi vida, pero no pienso quedarme mucho tiempo aquí, quiero viajar, quiero conocer otros países así que gracias por estar hoy a mi lado, pero mañana que digo hoy por la tarde tomare el primer avión que salga

- Entonces te estas tardando vamos a tu casa por tus cosas

Me dolió que no tratara hacer que cambiara de opinión y me quedara con el pero a quien quiera engañar, solo era amor de un día.

Le di las indicaciones de a donde teníamos que llegar, no tardamos mucho me dejo en la puerta de mi casa

- Descansa un poco, regresare en unas horas para acompañarte a la estación

- No es necesario

- Es lo menos que te debo por lo de hace rato, lo olvidaba toma

Me dio el cheque

- ¿Qué? pero si tú has conducido tú debes quedártelo

- Pero era tuya la moto así que es tuyo

Se despidió de mi con un beso que roso mis labios, tuve que apretar la puerta con uñas para evitar gritarle que se quedara, así que subí a mi cuarto el cual seguía como lo había dejado, me arroje a la cama y me deje absorber por los brazos de Morfeo.

Desperté por que alguien golpeaba mi puerta, quería golpear a quien sea que fuera que había interrumpido mi sueño, baje como pude para abrir la puerta y encontrarme con Matt el cual parecía mas fresco que una lechuga así que cerré fuertemente la puerta para mirarme en el espejo que estaba detrás de ella, todo en mi era un asco, trate de hacer lo posible por mejorar mi imagen, abrí nuevamente la puerta

- Perdón ¿puedes esperar aquí? Voy a darme una ducha

- Jajja por un momento creí que no querías verme

- No es solo que me veo horrible, no quiero que me veas así

Pude escuchar como reía

- Créeme eres la chica mas hermosa que eh visto y eso nada puede cambiarlo

Una sonrisa se plasmo en mi rostro, estaba tan distraída que me metí a la ducha que el agua fría me regreso a la tierra así que solté un grito

- ¿estás bien?

- Si, si es solo que el agua estaba helada

Exploto en carcajadas

- Contigo la vida nunca es aburrida

Cuando estuve lista pude mirarlo con más atención, llevaba una camisa roja con líneas amarillas y verdes, un saco negro encima y su cabello algo revuelto, miraba las fotos con una expresión seria, pero inmediatamente que noto mi presencia me regalo una sonrisa, era increíble como de verse algo rudo podía cambiar a una imagen tierna y en mi parecer algo infantil, no lo pensaba de mala manera de echo me gustaba ya que parecía un niño indefenso

- Ahora me siento informal

A diferencia mía yo llevaba una camisa con encima una chaqueta, pantalones ajustado y unos botines todo en negro

- Voy a cambiarme

Rápidamente se acerco para abrazarme por la espalda, me levanto

- Estas perfecta

Suspiré, me di la vuelta estaba a punto de besarme cuando por el rabillo del ojo pude ver unas maletas en la puerta

- ¿Qué, que es esto?

- Ya te lo había dicho no creo que una chica deba estar sola