My last dream <Ezra Miller> <elizabeth gillies>

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Me sentía débil, la luz me lastimaba, todo me daba vueltas

- Hija que bueno que despertaste

- ¿mamá?

- Si hija aquí estoy

- ¿Qué haces aquí, como sabias donde estaba?

- Un chico que no ha querido irse me llamo y tome el primer avión

- ¿Qué chico?

- Un tal Mateo

- Matt, mamá ¿Dónde está? Déjalo pasar quiero verlo - traté de sentarme, pero no tuve fuerza así que tuvo que ayudarme

- ¿estas segura? Deberías descansar

- Por favor

No parecía muy segura pero aun así salió de la habitación, entro lentamente parecía más distraído de lo normal, llevaba la misma ropa y tenia la nariz roja, me miro sin pronunciar palabra

- Hola- dije para romper el silencio

- ¿vas a explicarme que es lo que pasa? No es la primera vez que estamos en una situación como esta ¿dime que sucede?

- Estoy muriendo, es irónico como creía que hacia lo correcto dedicando toda mi vida a estudiar cuando me dio una gran cacheta, sufrí un incidente que hiso que comenzara a pudrirme por dentro- reí amargamente- yo no pude decírtelo, no quería que me miraras como lo haces ahora

Aun se mantenía en silencio

- Entenderé si quieres irte

- ¿realmente crees que me iré después de todo lo que hemos pasado? Te lo dije te amo y encontraremos algo que te cure, tal vez la quimioterapia ayude

- Matt, Matt- tome su mano- estoy bien con esto, acepto lo que fue echo para mi ya que me hiso conocerte es ahora mi manera de pagar

- Pero no puedo dejarte ir tan fácil no ahora

- Jadiara estará ahí, puede hacerte compañía

- Sabia que lo habías planeado, pero ¿Por qué?

- No quiero que sufras cuando me vaya, no quiero que dejes de sonreír de esa manera tan sexi que me enamoro

- Sabia que algo andaba mal ¿Cómo fui tan estúpido? Debí haberte seguido pero esa estúpida chica no dejaba de insinuárseme, debiste decirle que era tu novio ¿y ahora? – hablaba tan rápido que me costaba entenderle, estaba enojado que golpeo la pared- no pienso darme por vencido estoy seguro de que encontraremos algo

- Matt renuncia a mi

- ¿realmente ya no quieres volver verme?

Baje la vista

- Si

Me tomo por el mentón para mirarnos

- Dilo otra vez

- No, no quiero separarme de ti – dije llorando – no quiero, no quiero

Me abrazo suavemente

- Vámonos no quiero morir en un solo y aburrido hospital

En ese momento alguien entro

- ¿Gabriel puedes explicarme eso de que se irán? Y a ti te agradezco que te preocuparas por mi hija, pero no eres de la familia así que te pido que te vayas

- no ira a ningún lado si no voy con él

- ¿acaso no vez tu estado? Necesitas los cuidados que aquí te brindan

- Señora yo la eh cuidado hasta ahora

- ¿y vez mejoría? Esta muriendo no es algo que tomarse a la ligera además ¿Quién te crees que eres?

- Mi novio – le sonreí pero mi madre parecía que le daría un ataque – ya no soy una niña y tu misma lo dijiste, ahora estoy disfrutando la vida, jamás me sentí tan viva, me siento feliz, ya no tengo de que arrepentirme

Suspiro

- Odio cuando usas mis propias palabras para convencerme, esta bien pero ahora avísenme donde estarán

- Gracias

Pedimos un alta, la cual debí haber conocido desde el principio y no hubiera tenido que huir la primera vez, donde decía que nos hacíamos cargo de cualquier riego y no culparíamos al hospital así que me ayudaron a cambiarme, iba a sentarme en una silla de ruedas, pero insistió en cargarme, podía sentir sus latidos, su olor a menta inundaba mis sentidos, me sentía en casa

- Debemos darte un buen baño hija

- ¿estas consiente de que nunca se ira? Por cierto, Matt ¿a ti no te molesta?

- Hace años que perdí el sentido del olfato, era joven no sabía los riesgos de las drogas y la cocaína daño el cartílago, me reconstruyeron la nariz, pero nunca volvió a ser lo mismo

- De seguro no estarías conmigo si percibieras cuanto apesto

- Estaría contigo aunque tuvieras tres brazos y escupieras fuego, yo ardería en el infierno por ti