Mitades compartidas.

Capítulo 9.-Cumpleaños sorpresa.-

"Tras seguir hablando de todo esto que ha pasado"

-Cariño, creo que deberías irte ya, no te han dado el alta y no quiero que te ocurra nada.-

-Princesa, no he tenido tiempo de explicarte que ya me dieron el alta. En el momento que te vi desaparecer por la puerta y tras calmarme un poco y gritarle a esa enfermerucha cuatro cosas fui a ver al director del hospital y pedí que se me diera el alta y me dijeron que las pruebas no saldrían hasta mañana y debía quedarme alli.-

-Entonces...¿No te habrás escapado?.-Digo apenada.-

-No pequeña, insistí tanto y les amenacé con que si no yo mismo me escaparía que no tuvieron otra opción sino la de dejarme salir...-

-Eres de lo que no hay, pero bueno tienes que mejorarte...Mañana no vayas al instituto por favor cielo.-Digo seria.-

-Claro que iré, tengo que defender a mi novia de los posibles niñatos que se acerquen.-

-No. No. Y no. Tienes que recuperarte bien.-

-Hacemos un trato Noé. Voy al instituto con la condición de que si me encuentro mal vuelvo al hospital.-Dice haciendo pucheritos.-

-Jajaja, como decirte que no con la cara de cachorrito abandonado que dibujas en tu rostro.-

Nos reimos muy alto, bastante alto que despierta a mi madre. Se asoma por la ventana.

-¿Noé? Pero, ¿Qué haces ahí a estas horas hija? ¿Y quién es? ¿Dani? Pero...Pero...¿¿Tú y él...??.-

-Mamá las preguntas una a una y sí ya está todo arreglado, vino a verme.-

-Oh vale vale, en ese caso os dejo que hableis, no esteis ahí fuera, entrad en casa si quereis, ahí hace bastante frio.-

-Muchas gracias Carla pero yo ya me iba, mañana pasaré a por su hija para ir al insituto, buenas noches.-

-Genial, como querais, buenas noches Daniel.-

-Uff, que alivio por un momento pensaba que tu madre me diria algo así como patán,imbécil o algo parecido.-

-Si, yo también lo he pensado, menos mal que el que no se ha levantado ha sido mi padre.-

-Jajaja si, querría ver mi cara de espanto. Bueno corazón me voy ya, descansa y recuerda que estaré soñando contigo, te amo mi princesa.-

-Adiós precioso, yo también soñaré contigo amor, que descanses y hasta mañana, te amo mi tesoro.-

Y finalmente nos acabamos besando. Un beso algo largo pero profundo. Se fue. Ya le echo de menos. Entro a mi habitación y me quedo profundamente dormida. Aunque mi mente sigue despierta. Esa enfermera me las pagará.

Tres semanas después...

-Noé, vistete que ya está aquí Dani.-Oigo a los habituales gritos de mi madre.-

-Si, mama estoy vestida, dile que suba por favor.-

-Está bien hija.-

Oigo unos pasos por la escalera y llaman a mi puerta.

-Si, pasa.-

-Buenos días mi princesa.-Dice y me besa apasionadamente.-

-Buenos días corazon.-Digo respondiendo a sus besos.-

-Pequeña, te tengo que dar una sorpresa, y para eso quiero que hoy vistas de la misma forma que yo.-

-Ems...¿Cómo?.-Digo yo desorientada.-

-Es decir, que yo hoy voy informal, si pudieras ir como yo...-Dice con su sonrisa, esa que me  vuelve loquita.-

-Oh si claro, haber que te parecen estos shorts azul electrico, esa camiseta roja de agatha ruiz de la prada y unas vans azules.-