Yukhei se había visto más de quince veces en el espejo mientras se media diferentes chaquetas, ninguna parecía convencerlo. Hoy tendría su primera cita oficial con Jungwoo, porque tomar café caliente, té o chocolate en el estudio del rapero mientras hablan y terminar dormidos en el sofá después de una pequeña sesión de mimos no contaba como una cita.
Todo iba de maravilla con su chico, ambos iban lento y con calma, disfrutando del dulce amor que compartían, eso sí, aún sin tocar los labios del otro, pero Yukhei ya se conocía el rostro de memoria de Jungwoo de tanto que lo había besado mientras se daban lindo mimos, eran realmente pura miel.
Lucas sonrió a el espejo mientras se acomodaba una olvidada cazadora de cuero que tenía a el final de su armario, la prenda le quedaba perfecta con la sudadera azul oscuro y esos ajustados jeans negros que tanto había pedido Jisung que se pusiera para su cita. Los Dreamies los habían estado staneando desde la distancia-no-tan distancia, ya que se la pasaban con la oreja pegada a la puerta y vigilando por las cámaras que habían en el estudio donde Yukhei y su pequeño pasaban la mayoría del tiempo, eran realmente molestos y lindos.
El timbre de su teléfono cuando llega un mensaje rompió el silencio de su habitación, y rápidamente corrió a ver de quién provenía el texto, y como lo sospecho, era de Jungwoo. Era una foto del menor, era de como iba vestido, y solo podía ver de su cuello para abajo pero casi le da un infarto
Jungwoo iba a llevar uno de esos realmente adorables suéteres que no son de su talla y de un ligero color azul bebé, con unos ajustados jeans blancos que iban a la perfección con su aura de bebé y sus rellenitos muslos, muslos que Yukhei siempre ha querido acariciar y mimar aunque no pensará mucho en ese aspecto.
No respondió el mensaje y salió rápidamente de casa, tomando dos de sus máscaras favoritas, guardandolas en uno de los bolsillos de su chaqueta junto a su teléfono, para luego salir disparado de su apartamento hasta la calle para pedir un taxi y poder llegar a tiempo a su esperada cita.
[...]
Jungwoo tamborileaba nerviosamente la mesa del restaurante donde había quedado con Yukhei para cenar y poder tener una cita decente, el mesero se acercó de nuevo con intención de pedir su orden, aunque parecía que quería más que pedir una simple orden de Jungwoo.
- ¿Esperas a alguien, hermoso? - el chico estaba apunto de sentarse frente a él cuando la mano de Yukhei lo detuvo.
- Sí, alguien que ya llegó - uso "la voz", como solía decirle Ten a la voz de mando de Lucas cuando estaba fastidiado, y en este caso, celoso.
El chico retrocedió instantáneamente y se disculpó haciendo una reverencia bastante penosa, Yukhei se sentó frente a Jungwoo y le sonrió ampliamente, estirando su mano para tomar la del menor y dejar un beso en el dorso de esta, arrancándole una risa tierna y un sonrojo suave.
- Ha llegado su acompañante para hoy, Señor Jungwoo - bromeó el chino con una reluciente sonrisa, aún sin dejar de sujetar la mano delgada y pequeña de Kim.
- Llegó a tiempo, Señor Yukhei - el chico de los cafés le siguió la corriente con una sonrisa deslumbrante. Después de su confesión, se había vuelto más seguro y ya no le daba vergüenza mostrar su hermosa sonrisa a Yukhei, quien disfrutaba de verla, y más sí el la provocaba.
- ¿Que te parece si pedimos para llevar? Tengo una idea - la voz emocionada del rapero propuso a el menor, Jungwoo accedió con un asentimiento, un tanto confundido pues él pensaba que solo cenarían, darían una caminata y luego a sus hogares.