A la mañana siguiente, Yukhei llegó a la empresa con la sonrisa más grande que le han visto; caminaba confiado y saluda a algunas personas que encontraba por los pasillos hasta su estudio, le pareció raro que los Dreamies no estuvieran merodeando en la puerta de su lugar de trabajo como siempre pero lo paso por alto hasta que entró a la habitación.
La imagen frente a el lo dejo helado y borro todo tipo de alegría; Kun estaba gritando y reclamándole a Jungwoo mientras el chico trataba de contener sus enormes ganas de llorar aparentando los cojines del sofá.
- ¡No debiste involucrarse con él, Jungwoo! ¡Sabías que esto pasaría e igualmente lo hiciste! - Kun gritó furioso a el menor, aún sin notar la presencia de Lucas en el lugar. El rostro del mayor de los tres estaba rojo de cólera y sujetaba con demasiada fuerza el teléfono en sus manos, dónde puedo divisar una foto de él y Jungwoo ayer en el parque, abrazados y besándose. - Realmente no quería que te entrometerse en esto, chico, he trabajado muy duro para cumplir el sueño de Yukhei como para que tú, pequeño tonto, llegarás a arruinarlo todo.
Su voz era amarga e incluso él se sintió herido al escucharlo escupir aquello a alguien tan dulce y frágil como Jungwoo, quien a esas alturas ya estaba llorando sin parar mientras escuchaba los murmullos y maldiciones en chino que soltaba Kun. El menor levantó la cabeza y, como si supiera que estaba ahí parado, miro en su dirección conectando sus ojos rápidamente, dejando todas las cosas de lado y corriendo a los brazos de Yukhei.
- L-Lucas... - sollozó mientras se dejaba apretujar y calmar por el rapero. Kun al fin notó su presencia y palideció, sabía que lo que había hecho estaba mal y ahora se estaba arrepintiendo al ver la mirada fría y severa de su artista, pero rápidamente volvió a su postura normal y carraspeó, llamando la atención de ambos.
- Necesito hablar a solas con Lucas, retirate, Jungwoo - ordenó el mayor mientras el castaño claro se separaba ligeramente de Yukhei y dejaba un casto beso en sus labios, separándose completamente y casi corriendo a la puerta, aún con los ojos lagrimeando tristeza.
[...]
Jungwoo podía oír desde la sala de prácticas de los Dreamies, la cual quedaba casualmente junto a el estudio de Yukhei, la discusión y los gritos de Lucas y Kun, ambos estaban peleando en tres idiomas: Coreano, Chino e Inglés, los únicos idiomas que sabían de mejor manera.
Sus manos temblaban antes el recuerdo de las ojos encendidos dde rabia de Kun cuando lo miro, o la manera en la que le había dicho " pequeño tonto", como si fuera un crío de seis años. El silencio de la sala fue interrumpido por Jaehyun y Doyoung entrando a la sala, ambos murmuraba entre sí y se miraban preocupados, hasta que sus ojos se toparon con el pequeño ovillo que era Jungwoo en ese momento.
- ¡Wonnie! - Doyoung corrió a él con un semblante aún más preocupado, YoonOh lo siguió de cerca con la misma expresión y corrió por un vaso de agua para el alterado pequeño.- ¿Que ha pasado, cariño? - acarició maternalmente las mejillas húmedas del otro Kim, secando las lágrimas que resbalaban por estas. Jaehyun volvió con un vaso de agua y lo entrego a el menor, quien se lo tomo de un solo, aun sollozando, y por la seria expresión en el rostro del chico de los hoyuelos, parecía haber escuchado la discusión en la otra habitación.
- Se lo que pasa - habló el rubio mientras tomaba asiento en el sofá donde estaba encogido el aun tembloroso Jungwoo, siendo seguido por su novio con aspecto de conejo, quien tomó asiento en sus piernas.- Acabo de escuchar a Lucas y a su manager dicutiendo en su estudio, estaban diciendo algo sobre que Jungwoo no debía haberse metido en la vida de Yukhei, que la foto estaba por todas partes y todo se estaba lleno a el caño - confeso seriamente mientras pasaba sus brazos por la cintura del preocupado Doyoung.
El Kim mayor gruño molesto y miro con lastima a Jungwoo, sabia por lo que el pequeño estaba pasando, y supuso que en él sería más serio ya que es más sensible. Estaba apunto de decir algo cunado la puerta se abrió estrepitosamente, haciendo a los tres chicos sobresaltarse sorprendidos
Yukhei entro a la habitación totalmente furioso e irritado, su rostro y orejas estaban rojos y sus puños fuertemente apretados a sus costados, pero todo su cuerpo pareció relajarse al ver el estado vulnerable del chico de los cafés, y rápidamente trotó por la sala de practicas hasta llegar hasta Jungwoo, quien lo miraba con los ojos enrojecidos y culpables, y un tierno puchero que hizo a el mayor sonreír ligeramente.
Ninguno de los dos dijo nada, simplemente se envolvieron en un apretado y cariñoso abrazo, consolándose el uno a el otro, Jaehyun y Doyoung -a pesar de estar muertos de preocupación por sus menores- salieron de la habitación sin que se dieran cuenta, dejándolos solos y abrazados en el sofá de la sala de practicas de los más pequeños de sus amigos, quienes los miraban desde detrás de la puerta del baño del lugar.
- Vamos a mi casa, cariño, no quiero que sigas en este lugar - hablo Yukhei mientras se separaba ligeramente del tembloroso Jungwoo, quien asintió y se aferró a el cuello del rapero con suavidad mientras era cargado por este a lo princesa.
Ambos salieron del lugar, Lucas aún dejando besos por las lágrimas de las mejillas de Jungwoo y esté dejando besos suaves por las mejillas de Yukhei, y uno muy pequeño por sus labios.
Y entre caricias y suaves palabras de consuelo, ambos chicos se fueron a la casa del mayor, ignorando a Kun y a el resto de sus amigos cuando salieron del edificio; él solo quería preocuparse por la sonrisa de su bebé, que había sido borrada por su manager.
