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El quinjet apestaba a nervios. Literalmente.
Íbamos de camino a Sokovia a enfrentar a Ultron y a rescatar a Nat.
El plan era bastante sólido, si es que los mini Ultron no se aparecían mientras rescatamos a Nat.
El nuevo "miembro" del equipo, Visión, estaba sentado a mi lado. Él era bastante ocurrente pero parecía buena persona. Me habían comentado que la piedra amarilla que tenía en la frente era una de las Piedras del Infinito, la piedra de la mente. Y que según Thor, eran muy poderosas si se juntaban todas las piedras y sumamente peligrosas en manos equivocadas. Lo bueno era que Visión no tenía planes con la piedra, al menos nada malo.
Sólo destruir a Ultron, como todos.
-En cinco aterrizamos-dijo Barton. Cap se puso de pie y abrió la compuerta, naturalmente se dejó caer porque señor súper soldado mejorado puede hacerlo. Rodé los ojos.
Los gemelos esperaban una orden de parte de nosotros, se les veía nerviosos.
Mi padre se acercó a mí, él también estaba nervioso.
-Si te digo que te vayas te vas. No te quiero aquí si las cosas se ponen feas ¿Entendido?-dijo serio. No me quedó de otra más que asentir sabiendo que no haría caso, que aunque me lo ordene no los iba a dejar.
Barton aterrizó y caminamos a una iglesia cercana, sabíamos que ahí se encontraba mi querido hermanito, hermano bastardo.
-Yo lo atacaré primero, se muero por destruir a Iron Man.-dijo mi padre. Asentí dándole la razón.
-Es verdad-dijo Visión-Eres a quien más odia.
No pude evitar reír ante eso. Nos acercamos a la iglesia, mi padre entro primero seguido del Cap. Sentí una mano queriendo colarse en la mía. Instantáneamente supe de quién se trataba así que la deje y tome la mano de Pietro con fuerza. Tal vez no lo admitiría en voz alta, pero vaya que estaba espantada.
Ultron estaba de pie, con un objeto circular enterrado en el suelo de la iglesia. Era muy extraño, pero por la forma y la posición no me agradaba, había algo mal.
-¿Vienes a confesar tus pecados?-habló Ultron. Pietro apretó mi mano con fuerza. Estaba asustado.
-No lo sé, ¿cuánto tiempo tienes?-respondió mi padre.
Esto iba a comenzar, y muy mal.

Un tiempo más tarde estaba con los demás peleando contra los mini Ultron. Cada vez que matábamos uno venían dos, era tedioso. Cap y yo íbamos en tierra aunque yo aveces me iba a los aires a lanzar rayos a los mini Ultron.
-¿Qué? ¿No necesitan ayuda?-dijo una voz atrás vez del comunicador. Fruncí el ceño. ¿Fury?
Tanto Cap y yo volteamos y vimos cómo se acercaban naves de S.H.I.E.L.D con espacio de poder poner a los habitantes de Sokovia a salvo. Sonreí.
-¡Fury!-exclamó Cap-¡Eres un imbécil!
Solté una carcajada súper estruendosa y golpee a un robot. Justo cuando lo iba a destruir el rayo azul y plateado se atravesó y lo destruyo, sonreí algo frustrada.
-Era mío-le dije. Él sonrió. Y por consiguiente yo también.
-¡Wow!-dijo Fury, se notaba que estaba riendo-¿Así besas a tu madre?
Negué, le dedique una mirada divertida al Cap y me fui a pelear de nuevo.
De repente una sacudida se hizo presente, era el suelo. Y por el comunicador mi padre estaba murmurando cosas.
-¡No!-exclamó. Y la tierra pareció dar un brinco. Se sentía como si se estuviera levantando.
-¿Qué demonios sucede?-dije asustada.
-Ultron hizo que un pedazo de Sokovia se levantara. Si esto cae no sería nada bueno-dijo mi papá. Cap y yo nos quedamos viendo al horizonte, donde la ciudad se dejaba de ver.
-Si se cae producirá extinción-asegure-Estamos a mucha altura.
-Trato de resolver esto, mientras sigan peleando. No nos vamos a rendir.
Tras esto me dirijo a donde estaban los gemelos y Barton. Súper por medio de Cap que Banner ya había rescatado a Nat y que Hulk ya había aparecido. Después de todo, este sí que era un código verde.
-¡¿ESTO ES TODO LO QUE TIENES, ULTRON?!-gritó Thor, pero se escuchó por el comunicador. Gruñí, que estupidez.
-Tenías que decirlo-dijo la voz de Steve. Supongo que los atacaron más.
-Esto es lo mejor que tengo. Esto es justo lo que quería: todos ustedes....contra todo lo que soy. ¿Cómo suponen que van a detenerme?-dijo Ultron.
-El viejo ya lo dijo-dijo mi padre volando cerca de ellos-Juntos.
Sonreí.
Pietro y Wanda estaban con Barton, luchando contra los mini Ultron con esfuerzo. Vi como una gran cantidad se nos venía encima así que uní mis manos y me concentré. Cerré mis ojos y justo cuando sentí que estaba cerca mande una ola de energía que los destrozo.
-¡Increíble!-exclamó Wanda acercándose. Me sonrió algo apenada. Le correspondió el gesto.
Decidí que le podría dar otra oportunidad a la Maximoff. Pietro asintió, en agradecimiento por no mandar a matar a su hermana en es  momento.
-¡Nos movemos!-dijo Barton.
Estuvimos horas luchando, eran demasiados. De repente otra voz se oyó por el comunicador, y era más ayuda.
-¡Si! Esta sí que será una buena historia.-dijo Rhodes. Me comencé a reír mientras le daba una paliza al mini Ultron.
-Si. Si vives para contarla-le dijo mi padre por el comunicador.
-Que aguafiestas papá-dije.
-¿Crees que no estoy a su nivel?-preguntó Rhodes indignado.
-Si salimos de esta, te regalo mis tacones-le dijo mi padre.
Pietro sonrió ante esto, al igual que Wanda.
-Tenias que volverlo incómodo.-respondió James.
War Machine y Iron Man se dedicaron a perseguir a Ultron, y de paso ver qué hacer con eso de que nos elevábamos en los aires cada minuto.
La batalla se estaba alargando. Los mini Ultron te atacaban mientras te decían cosas feas, ósea a demás de que te golpeaban te insultaban.
-¡Oh vamos!-le dije al mini Ultron. El muy cínico me había dicho "hermanita". Le lance un rayo quemándolo.-Estúpido Ultron.
-Gracias, pequeña Stark-dijo otro Ultron. Rodé los ojos.-Sabes, desde un principio supe que tú y yo no somos tan diferentes. Después de todo tenemos el mismo creador-dijo.
-¿Ah sí?-dije lanzando un rayo al robot, matándolo. Otro apareció, pero no me atacaban, solo me hablaban.
-Por supuesto. Igual de ambiciosos-dijo. Esto se volvía tedioso. Yo destruída uno y otro se acercaba.
-Igual de despiadados.
-Igual de fríos.
-Igual de poderosos.
-Te equivocas-dije sintiendo un nudo en mi garganta.
-Dispuesta a hacer lo que sea para ganar-continuó.
-Para-dije.
-Pero eres demasiado humana-dijo uno detrás de mí. Me voltee a encararlo, y tremenda sorpresa que me di.
Ante mí no estaba uno de los mini Ultron, estaba la creación de mi padre y Banner. Y no recordé una vez diferente a esta que sintiera tanto miedo.
-Eres demasiado humana-dijo con voz suave. Retrocedí-Sientes demasiado. Ese es el defecto.
-Pues me alegra no ser como tú-dije, la voz me temblaba.-Al menos tengo corazón, y alguien que me ame.
-Eso es una estupidez. Los humanos son estúpidos-dijo, notablemente enojado.-Tu en cambio, además de eso, ¿qué más tienes? eres mala, malcriada, narcisista, egocéntrica. Eres una niña. Una niña con poderes que podrían matar a alguien si perdieras el control. Con una chispa arderías.
-Mientes, tengo el poder total de mis poderes. No soy como tú-dije enojada.
-Eso es mentira-dijo él con una sonrisa escalofriante.-Y te lo podré demostrar. No te preocupes pequeña. Pronto veras todo lo que serás capaz, y cuando esto termine, y yo gane. Y solo quede tu padre por matar. Te usaré como arma.
-¿Arma?-pregunté confundida.
Siempre me pregunte cómo se sentía el estar en trance. O poseída, como sea. El Teseracto era una arma peligrosa, y ahora solo sentía frío. Mi mente me decía que despertara pero no podía, sentía que me movía, oía que hablaba pero no era yo la que hablaba. Era Ultron, atrás vez de mi.
Y yo era el arma.

𝑺𝑻𝑨𝑹𝑲✓ 𝑷𝒊𝒆𝒕𝒓𝒐 𝑴𝒂𝒙𝒊𝒎𝒐𝒇𝒇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora