Amor de Secundaria [Finalizada]

Parte IX

Seis meses pasaron, Eren y Annie adoptaron una rutina, acomodaron su tiempo y lo repartieron entre estar juntos y la escuela.

Todo parecía ir bien, la señora Braun adoraba a Eren y la señora Jaeger había aceptado perfectamente a Annie.

En cuanto a Mikasa, pronto supo que era inútil seguir intentando nadar contra la corriente, después de todo ella era una chica fuerte y aprendería a superar su dolor, aun así se mantuvo cerca para poder cuidarlo cuando fuera necesario.

La idea de que el año escolar acabaría y que cada uno tendría finalmente que partir por su cuenta era algo que mantenía despierto a Eren algunas noches, él no quería aceptarlo, pero tarde o temprano tendrían que hacerlo.

...

Era sábado por la madrugada, Eren seguía despierto por alguna razón no podía dormir, la película de Netflix se reproducía en su laptop sin que él la viera.

Sus ojos estaban fijos en el techo de su habitación, había revisado su teléfono cada 5 segundos, Annie no se había reportado en todo el día, él estuvo a punto de ir a buscarla por la tarde, pero Reiner tampoco respondía sus mensajes así que supuso que no estaban en casa.

El tejado junto a su ventana crujió y Eren se levantó en seguida, era una noche de lluvia, de hecho Eren a penas y pudo escuchar el sonido extraño a causa de las pesadas y constantes gotas de agua.

La silueta de una chica se formó a través del cristal empañado y Eren corrió a abrir la ventana.

—¿Annie estás bien? - fue lo primero que pudo decir.

La chica entró a la habitación temblando de frío —Descuida, no me pasó nada malo es solo que pensé que estarías despierto y...

—¿Por eso apareces a la mitad de la madrugada?

—¿Te molesta? Si quieres me iré - Annie volvió a trepar a la ventana, pero él la detuvo.

Fue por una toalla y comenzó a secar el cabello rubio de la chica.

—Te ves un poco preocupada - Eren sabía que esa aparición abrupta no era coincidencia.

—Mamá... se está comportando extraño, creo que oculta algo y estoy preocupada - Annie respondió sin muchos rodeos.

—¿A qué te refieres? - Eren acarició los hombros de la chica.

Eren se sentía muy orgulloso de Annie, aunque fue largo y difícil el proceso, ella se había disculpado con su madre por creer las cosas que su padre le había dicho sobre ella, la relación entre ambas había mejorado mucho desde entonces.

—No lo sé, parece estar molesta conmigo o con ella... o no lo sé, sale a menudo de la ciudad y cuando está en casa actúa raro, solo pasa al teléfono y... no lo sé, noto que algo no anda bien - la rubia apoyó su cuerpo contra el de su compañero.

Eren escuchó con atención, realmente no sabía qué decir, él nunca había visto a Annie, preocupada por alguien que no fuera ella misma.

—¿Tú qué opinas? - ella no sabía por qué había decidido refugiarse en el chico de ojos verdes.

—Nuestros padres tienen muchos problemas, es normal que a veces se sientan agotados, intenta hablar con ella o dale tiempo para que ella te lo diga - Eren abrazó a su novia, temía que pudiera sufrir hipotermia.

—Tal vez... - la chica conocía a su madre y esta vez sabía que algo grande estaba a punto de pasar, pero no se lo dijo a Eren.

—Debes quitarte esa ropa o te resfriarás - Eren se sonrojó al decirlo —Te... te prestaré algo de mi ropa.