capitulo 16

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Sam

La mayoría de los vampiros de Covington que estaban debajo de nosotros volaron hacia atrás y golpearon el suelo con fuerza. Sospeché que era gracias al don de Harvey. Los animales irrumpieron en escena desde todas partes; un jaguar, arañas, monos, simios, y aves tropicales. Sin duda los había llamado Alora. Saltaron a la batalla sin dudarlo, lo que fue una buena cosa porque muchos de los enemigos estaban intentando coger a Antonio. Para mi alivio, aguantaba por su cuenta.

Me volví hacia Sebastian y Luther que estaban cubiertos de gelatina rosa después de que la burbuja explotara cuando chocó contra la pared.

—Tienen que llevarse abajo a Antonio. Es la diana número uno. — Sebastian abrió la boca, sin duda para regañarme por el riesgo que había estado dispuesta a correr, pero sacudió la cabeza. Sí, después habría tiempo de hablar. Cogió el brazo de Luther y los teletransportó a ambos fuera de allí.

— ¡Vuelve aquí, bastardo! —gritó una voz femenina. Cambiando de dirección, vi que Paige e Imani estaban persiguiendo a un Langley que se estaba retirando. Los otros vampiros de Covington intentaron apartarse del suelo, pero Jared los mató con una flecha eléctrica.

Enredó su mano en mi pelo y me dio un beso duro, lleno de enfado y alivio.

—Hablaremos más tarde sobre el hecho de que te pusieras en riesgo de nuevo. Por ahora, luchemos.

No podía estar más de acuerdo, así que no dije nada mientras nos teletransportaba fuera. Mi estómago cayó mientras veía todos mis alrededores. La que había sido una preciosa comunidad ahora estaba hecha un desastre, la cual parecía más un campo de entrenamiento táctico. Pero no tenía tiempo para lamentos. No ahora.

En vez de eso, extendí las palmas y succioné la energía de alrededor, recargando mi don hasta que estuvo lleno de fuerza y estuvo goteando energía una vez más. Dios, se sentía bien. Después conjuré mi látigo, disfrutando de la sensación familiar que zumbaba contra mi piel.

—Permanezcamos juntos —insistió Jared.

Una rápida mirada a Antonio y noté que la mayoría de los guardias de la mansión se quedaban cerca de él, ayudando a Sebastian y a Luther a protegerle. Pero no estaba segura de que necesitara su ayuda. Antonio estaba demostrando como de fuerte podía ser un viejo vampiro mientras eliminaba a todo el que venía a por él. Una gran ayuda era uno de los guardias que tenía algún tipo de escudo líquido puesto que extrañamente, absorbía cualquier bala o arma que se acercara a él.

Segura de que Antonio no necesitaba mi asistencia, busqué a mi escuadrón. Estaban agrupados juntos cerca de un restaurante al otro lado de The Hollow, cuidando de lo que quedaba del edificio... casi como si lo defendieran. Me pregunté si eso significaba que había alguien dentro del restaurante que necesitara protección.

Un sonido silbante en el aire fue la única advertencia que tuve. Jared y yo nos agachamos. Si no hubiera tenido velocidad Pagori, no hubiera podido esquivar la bala. Instantáneamente, formé una gran roca frente a mí. Más balas vinieron en nuestro camino, pero solo se empotraron en el trozo de tierra.

Jared miró brevemente alrededor, moviéndose rápidamente para esquivar

la bala.

—El bastardo está tumbado sobre su estómago sobre la arena.

Su localización exacta fue todo lo que necesité para actuar. Rehaciendo mi látigo en una bola de energía, miré rápidamente alrededor de la parte izquierda de la roca y alcancé al francotirador. Sus cenizas se reunieron con el resto de las de la arena.

taste of moment #3 (sabor del momento)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora