Las perdices tenemos el trabajo más degradante que existe. Lo que daría por limpiar suelos, recoger la basura o incluso investigar muertos. Cuando un humano no tiene nada interesante que pueda ayudarte a ayudarle hay que observarlo más de cerca hasta encontrar algo útil. Y con observarlo más de cerca me refiero a seguirlo a todas partes, incluso hasta el baño. ¿ Sabíais que el 90% de los adolescentes se llevan el móvil al baño ?
Pues estaba yo en el baño tan tranquilo espiando a mi humanito cuando de repente empiezan a llamarle y él lo coge. ¡ En el baño ! Al llamarle al menos descubrí que se llama Nate. Y encima creo que me vio porque luego cerró la ventana cuando era bastante necesario dejarla abierta y estuvo buscando algo durante media hora. Voy a pedir un aumento, porque este trabajo es inhumano.
~ Puck III
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Perdices
RomancePerdices: aves con las que terminan los cuentos, la clave de la felicidad