Cuando vienes huyendo de un pasado tortuoso, buscas refugio.
cuando tu corazón esta destrozado no confías en nadie.
Cuando las burlas te vuelven desconfiada , no quieres cederle el paso a un desconocido.
dos personas distintas las cuales sus camino...
La ceremonia se llevó a cabo en la capilla privada de la mansión Isabelina, Grelyz sonreía más por el haber vencido a Florence, que por su enlace, había vencido. Y nadie podría le arrebatar su amado triunfo. Al fin era la esposa de Dawson, pero ante todo era la nueva condesa de Greenbush, sonrió mientras desviaba su mirada azul hacía Florence, al ver la tristeza en sus ojos , amplió su sonrisa; elevando una ceja , los invitados sorprendidos murmuraban, ya que la novia era otra, y nada más y nada menos que la propia hermana de la prometida,¿ Qué había sucedido?, nadie se atrevía a indagar, ya que lord Bantry era el hombre con más influencia en Londres, tenía el favor del mismísimo rey; Dawson no mostraba ninguna reacción, de vez en cuando desviaba su mirada color cuervo , hacía Florence, quién estaba sentada junto a sus padres en primera fila, con su inseparable prima lady Korin, quien le mantenía la mano apretada a Florence, transmitiéndole su apoyo incondicional, mientras lanzaba miradas asesinas al canalla.
Dawson cerró sus ojos con fuerza, lo mejor era dejarla ir, y vivir su amargo infierno al lado de Grelyz. Quien le había demostrado su verdadera cara en el transcurso de ese mes, cuanto se arrepentía de haberla dejado ir, pero.... ¿ Qué más podía hacer?, debía salvarla del lodo, donde él se hundía poco a poco.
Arrastrar a Grelyz, era otra cosa, ya ella estaba podrida.
La ceremonia transcurrió entre los coros de alabanzas y el sermón del sacerdote, del cuál no escuchó ni jota, salió de su cavilaciones al sentir los delicados tirones de Grelyz en la manga de su casaca color vino.
__Dawson, Dawson,__ lo llamaba con dientes apretados, mientras disimulaba una sonrisa, sus blancos dientes resaltaban a través del rojo de sus labios.
__¿Que quieres ?,__ inquirió con fastidio.
__Ha terminado la ceremonia, debes besarme,__ dijo mientras observaba de reojo a los presentes, Dawson la tomó por las mejillas y la beso con irá, y amargura, el principio de su fin, comenzaba con ese beso. Florence cerró sus ojos al ver cómo Dawson besaba a su hermana. Le dolía, aún le dolía , no era de palo como par olvidar de un momento a otro, las heridas del corazón tardaban tiempo en sanar, solo esperaba no volver a confiar.
La recepción fue amenizada por Florence, Korin se unió a su prima, con su magnifico piano, el cuál fue trasladado desde su mansión.
