vodka; woochan

3.

Woojin estaba enojado con Minho por obligarlo a ir a esa fiesta, pero bueno las cosas por algo suceden ¿No?.
Minho por su parte intentó hablar pero las respuestas del mayor eran muy secas así que el estar al lado en el salón era una mala idea hoy.

Fueron libres cuándo sonó la campana. Ambos iban por el mismo camino, pero esta vez Minho decidió dejar al rubio ir por su cuenta porque lo que hizo estuvo mal aunque él no lo haya hecho  con malas intenciones.

El rubio tenía puestos sus audífonos hasta que unos brazos por detrás lo sorpendieron.

—¡Woojin!

—¿Chan?

—Sí.

—¿Qué haces por aquí?

—Voy a la escuela cerca de la tuya y me parece raro haberte visto recién hoy.

—No me destaco así que es comprensible.

—Entiendo... ¿Cómo estás?.

—Mejor... emm... quería preguntarte algo.

—Pregunte.

—Bueno... quería saber si hicimos algo esa noche.

—¿Algo cómo qué?.

—Ya sabes... eso.— Afirmó haciendo que sus mejillas tomaran un color carmesí.

—No tuvimos sexo, estabas inconsciente y sucio.

—Perdón.

—Descuida no es nada.

—Perdón por todo lo que t-te hice p-pasar, me siento tan a-avergonzado. Dijo mientras lágrimas caían de su rostro.

—Woojin mírame. Dijo tomando las manos del menor haciendo que este lo mirase.

—A mí no me interesa lo que hayas hecho porque por lo poco que te conozco sé qué eres una buena persona, sino no estarías disculpandote conmigo en este momento.

—Gracias.

—¿Quieres que te acompañe?.

—No hace falta.

—Lo mismo tengo que ir por ahí porque vivo a unas cuadras.

En el camino fue silencioso y cómo a Woojin le hacía algo de frío Chan lo había tomado de la mano.
Cuándo llegaron el rubio se despidió del menor y este se fue a la parada de buses porque no iba a caminar con ese frío hasta su casa.