-No me importa, me rindo.
-Entiendo tú frustacción, yo he pasado lo mismo.
-Creo que no te puedes imaginar lo que es no recordar nada-dije sin ganas,
-Hagamos un trato, quedan 5 min caminando, aguanta sólo eso y luego decide lo que hagas con tu vida. Con todo el tiempo que llevas 5 min no te importará aguantar ¿o si?
Ahora misma estoy pérdida, asustada y triste. Siempre pensé que esto de salir de aquí, de poder llevar una vida normal, sería más sencillo. Tampoco creía que la puerta se iba a abrir sola, pero jamás me habría imaginado que yo tendría que tomar la iniciativa, Ahora que me paro a reflexionar todos estos pensamientos son una estupidez, ¿cómo he podido ser tan ingenua?
-No eres ingenua, fuiste capaz de mentalizarte con una meta ,eso es de valientes.
-Hay algo que se llama intimidad Adrián.
-Lo siento, no puedo evitar leer los pensamientos, no es algo que haya elegido.
Yo no conteste, los minutos pasaban y un silencio incómodo se abrió entre nosotros.. Yo quería hablarle y hacerle tantas preguntas, pero tampoco creo que este lo suficiente preparada para las respuestas.
-No te preocupes, los silencios no son incómodos. Y sólo te contestaré si accedes a continuar conmigo hasta el final.
-¿Queda mucho para ese final?
-Menos de lo que has superado. Ha llegado tu momento de decidir.
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¡¡Hola!! Sé que llevo meses sin escribir, sé que la mayoría no sabeis que existe esta historia y apostaría todo lo que tengo (si tuviera dinero) de que todo este relato os parece una idioted.
P.D intentaré a partir de ahora escribir más seguido
2 P.D siento mucho haberos producido dolor de ojos tras leer esto.