Nuestro Lazo [Joerick]

Final

~ Antes de leer este capítulo deben saber que los Omegas en Omegaverse solo se tardan por lo menos 5 meses para tener el cachorro. Teniendo esto en claro sigamos...también deben saber que haré el parto de Erick como el de una mujer

(...)

Han pasado cinco meses desde aquella noche de placer.

- ¿Joel puedes pasarme unas galletas?- Erick ha subido un poco de peso, su embarazo es más que notable, sabe que está en su etapa final así que aprovecha para que Joel le traiga todo con la excusa que su gran panza no lo deja moverse

Erick tiene los pies hinchados, Joel siempre se los soba antes de acostarse para que al siguiente día pueda levantarse de la cama

- si claro bebé- se levanta del sofá y camina a traer las galletas, busca entre las cosas que tienen y encuentra unas con chispas de chocolate, sabe que son las favoritas del Omega

Llega al sofá, se recuesta y le da las galletas recibiendo un gracias por parte del Omega.

Erick abrió el paquete de galletas, iba a llevar una a su boca cuando sintió un tirón en su parte baja

- mierda- se queja del dolor que aquel tirón le dio

- ¿qué fue eso?- Joel está asustado, él sintió el dolor de su Omega

- creo que ya llegó la hora- dice respirando con dificultad

- estás hablando de...- su voz se cortó

- si Joel- rodó los ojos, Erick agarró su panza, le dolía demasiado

Joel se levantó y se formó en lobo aulló fuerte dando a entender que su heredero ya iba a nacer, si, era un varón que pintor sería el próximo Alfa de su manada

Erick respiraba con dificultad le dolía demasiado, sus paredes parecían abrirse aunque sabía que su hijo no podría nacer como si él fuera una Omega parecía que su trasero estaba siento abierto para meter una bola de fútbol.

El aullido se escuchó por todo el lugar así que en cuestión de segundos estaban miembros de la manada afuera de la casa pero solo se dejó entrar a la curandera que ayudaría en el parto

(...)

- Erick necesito que estés tranquilo por favor- pedía la señora

- ¡duele como una mierda! ¡¿Cómo quiere que esté tranquilo?!- gritó el Omega, iba a matar a Joel por hacerle pasar por esto

- solo respira y empuja para que el bebé pueda salir

Erick respiraba lo más que podía y hacía un esfuerzo pero sus fuerzas ya eran pocas como para seguir

- Erick solo respira- ordenó la mujer

- y-ya no p-puedo- dijo con dificultad

- sé que puedes Erick, quedate conmigo

Erick atrapó la mayor cantidad de aire que pudo y pujó lo más fuerte que sus fuerzas le dieron

Ya no podía, sentía que se desmayaría en cualquier momento pero entonces lo escuchó llorar.

Los gritos de su bebé llegaron a sus oídos como música, las lágrimas del Omega rodaron sin previo aviso. Su cachorro había nacido

Joel entró con lágrima en los ojos y agarró al cachorro en sus brazos, gruñó y se acercó a Erick

- e-es hermoso- sonrió con lágrimas cubriendo sus ojos

El Alfa le mostró el bebé y Erick lo cargó- es demasiado hermoso- limpió una lágrima rebelde

- hermoso igual que tú- le acarició la mejilla- gracias por esto, gracias por darme una vida que nunca imaginé tener

Joel le dio un tierno beso y él bebé empezó a llorar de nuevo, parecía tener hambre.

Ambos rieron y Joel le entregó el bebé a Erick para que le diera pecho, aquello era algo maravilloso para el Alfa, su Omega y su hijo, las dos cosas que más amaba en el mundo juntas.

Un gruñido se escuchó en la habitación y ambos miraron al bebé, el sonido había venido de él

- enojado como su padre- Joel rió

- querrás decir gruñón como tú- se defendió Erick

- puede ser- Joel se encogió de hombros- solo gruño cuando alguien te toca o cuando me ordenas algo durante el sexo- sonrió

- cállate bobo- dijo muy sonrojado

- ¿qué? Es la verdad- rió

Erick negó con la cabeza y siguió observado a su bebé, era hermoso, se parecía mucho a Joel aunque también tenía ciertos rasgos de él, ese bebé sería un gran reto pero igual lo amaría y lo defendería con su vida

- yo también lo defenderé con todas mis fuerzas Erick- le prometió

- no te metas en mis pensamientos Joel- rodó los ojos- y se que lo harás- le sonrió

- ¿ya te he dicho que te amo?- sonrió

- si pero no me canso de escucharlo- dijo con un brillo en sus ojos

- te amo- le dio un beso en los labios- siempre lo haré

- el bebé se llamará...¿Jay?

- me gusta Jay

Ambos sonrieron y se dieron un beso, el bebé tenía sus ojitos cerrados pero se le vio una pequeñita sonrisa, Erick pasó un dedo por el brazo del bebé y sonrió, ese pequeño ya se había ganado su corazón desde que supo que sería su hijito aunque debe admitir que se había asustado igual lucharía por él

~Final...Gracias por el apoyo que me dieron con esta novela, mañana es posible que publique el Epílogo y una nueva novela así pendientes