La única a la que puedo amar // Dahmo

CAPITULO 7: Asumiendo sentimientos

      Llegamos a su casa, pagué y nos bajamos.

- Que linda casa tienes. – dice Sana

- Se ve grande.

- Gracias...

      Nos invita a pasar y por dentro era grande como se veía desde fuera, todo se veía puesto en su lugar y nada sucio.

- Envidio tu casa. – digo asombrada

- ¿Lo tomo cómo un cumplido hacia mi limpieza?

- Y sí.

      Nos presentó a sus padres que fueron muy amables con nosotras a pesar de no conocernos. Luego nos llevó a su habitación, al entrar todo era como el cuarto de un adolescente, una cama sin hacer, paredes cubiertas por posters de sus ídolos, escritorio junto a una silla llena de ropa sin doblar, varios pares de zapatos tirados por todos lados y su armario desordenado.

- Disculpen el desorden...

- No... No creo que esté tan desordenado.

- Nono, para nada... - afirmo

      Lo dijimos de una manera insegura.

- Ahora me cuesta creer que tú seas la que limpia la casa. – sonríe Sana

- Sí lo hago yo, lo que pasa es que...

- No te puedes excusar. – respondo rápidamente

- Sólo déjenme acomodar...

- Sería mejor que me dejes a mí.

      Sana nos apartó y empezó a acomodar. Dejaba todo impecable, fue impresionante. Cuando terminó el cuarto no parecía el mismo que vimos antes, este era el de una princesa debido a que todo estaba en su lugar, limpio y con olor a flores.

- Wow, es asombroso. – Dahyun se queda con la boca abierta

- Es como el cuarto de tu casa.

-¿Mantiene su cuarto así de limpio?

- Sí, su cuarto es como el de una princesa.

- Gracias... - Sana se sonroja

      Pasamos la tarde hablando de todo. Fue tanto tiempo que en un momento la madre nos llama para cenar. Nos sentamos en la mesa y fuimos como una familia. Sus padres nos preguntaron varias cosas, les asombraba que nosotras fuéramos extranjeras. Como muestra de gratitud con Sana lavamos los platos. Nosotras lavábamos y Dahyun secaba y guardaba, mientras lavaba involuntariamente miraba su figura.

- Es muy hermosa...

      Se dio cuenta que le estaba mirando, entonces sonríe. Me puse roja por el hecho de que se dé cuenta. Terminamos de lavar y nos fuimos a la habitación a dormir. Al abrir la puerta vimos que sus padres nos habían armado como una especie de cama en el piso para que podamos dormir. Entramos y Dahyun se tira en su cama.

- Si quieren yo duermo en el piso y ustedes aquí.

- No te molestes, ya es suficiente para nosotras dos. – responde Sana

- Yo no tengo objeción alguna. – digo

      Entonces nos preparamos para dormir y cada una se acostó en su cama. Yo compartí con Sana como era de costumbre pero antes de dormirme usé mi celular, revisé mis rede y mensajes y decidí dormirme al rato.

Dahyun

      Con la propuesta que le di buscaba que se sintieran cómodas pero por dentro sentía que quería dormir junto a Momo, ese sentimiento no era normal en mí, no podía sentir lo mismo que sentía por Sana.