♌ δύο ♌

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Dominik se encontraba en su cuarto durmiendo plácidamente en su cama, mientras la lluvia caía y los truenos sonaban con fuerza. Se oyó como un objeto golpeó su ventana, este decidió dormir y no pensar que era algún asesino o algo parecido, pero segundos después se escucharon unos graznidos débiles. Con toda la poca valentía que tenia se levantó, comenzó a rezar aunque no era creyente y abrió la ventana, no había nada.

El graznido volvió a sonar, bajo la vista y vio al cuervo, este sintió lastima y lo cogió con delicadeza. Inspeccionó al ave y encontró dos quemaduras, una en el pecho y otra en el ala derecha. No habían plumas en esas zonas solo piel. Lo dejo encima de su cama y caminó hasta su escritorio.

Pobrecito —pensó mientras dejaba el cuervo en su cama y agarraba su laptop.

Tecleo, guía de primeros auxilios para aves, en el buscador y espero a que le salieran los resultados, segundos después aparecieron varios resultados y cliqueó en el primero que vio.

Bla bla bla gasas, jeringuillas...en caso de quemaduras aplique Blastoestimulina*, pomada para quemaduras bla bla, puede encontrarlo e su farmacia cercana bla bla...entendido—leyó, agarró un posit amarillo que se encontraba pegado a la pared y apuntó el nombre de la pomada

Dominik miró al ave de nuevo, agarró una sudadera que se encontraba en el suelo, junto con los primeros vaqueros que encontró en su armario. Pasó su mano por debajo de la cama hasta agarrar unas deportivas negras. Y salio de su habitación.

***

A

polo seguía caminando por las frías y lluviosas calles, buscando en cada callejón o tejado, pero cada vez perdía la esperanza, silbó con esperanza de que el cuervo volase hasta él, pero no fue así.

Ya eran las cuatro de la madrugada, debía volver al Olimpo antes de que amaneciese y le viesen volar.

Hizo aparecer sus alas de nuevo, miro hacia atrás, suspiró y comenzó a batir sus alas marrones.

***

Fue difícil, pero Dominik pudo encontrar una farmacia que abria hasta tarde en un Domingo, antes de que cruzase la calle, vio a un hombre con alas de pájaro salir volando. Eso lo dejó sorprendido y curioso, pero recordó al cuervo y cruzó la calle.

Al entrar un olor a productos químicos y plásticos lleno el lugar, una mujer rubia, de unos 20 años, con bata blanca y un moño desordenado, colocaba cajas pequeñas de Paracetamol y otros medicamentos, en un estante. Dominik caminó hacia ella y paró enfrente suyo.

  — Disculpe señorita...— dijo Dominik mientras sacaba el posit de su bolsillo. La mujer rubia dirigió su mirada hacia él y sonrió levemente. — ¡es Nikk Z !— gritó la mujer llamando la atención de algunas farmacéuticas y de un hombre que se encontraba comprando una caja de condones de colores.

Oh no, me olvide ponerme las gafas y la gorra—pensó Dominik mientras se alejaba de la mujer.

  — No, espera...¿que necesitas?— preguntó la mujer mientras dejaba caer las cajitas de medicamentos al suelo.

— Y-yo...necesito esto— dijo mientras le entregaba el posit amarillo a la mujer.

La mujer miró el posit y corrió hasta una puerta que tenia una señal de prohibido el paso a personal no autorizado, Dominik comenzó a mirar el lugar. Ordenado. Limpio. Con paredes blancas.

  — Aquí tiene. Dominik volvió a la realidad y vio a la mujer rubia entregándole dos cajitas pequeñas, con el nombre  Blastoestimulina, escrito en rojo. — solo necesito uno— dijo mientras sonreía levemente.

— Oh perdón, me olvide preguntarle si lo quería en spray o crema— dijo la mujer.

— En spray por favor—dijo Dominik mientras caminaba hacia una mujer de pelo y piel morena y coleta afro que se encontraba enfrente de la caja registradora.

La mujer rubia camino hacia mi con la cajita en sus manos. —No hace falta que pague señor....

— No, por favor tráteme como a un ciudadano mas—pedí mientras agarraba la cajita y la dejaba enfrente de la mujer de pelo moreno.

  — Serán $80— dijo la mujer mientras pasaba la cajita por un sensor de luz roja y sacó una bolsa blanca con el nombre de la farmacia en él, le entregué un billete $10 dolares y esta apretó unos números y metió el billete dentro, segundos después el recibo salió por un lado de la caja.

***

— ¡¿En el mundo de los mortales?!— gritó Zeus furioso.

— Sí, padre, mi cuervo se asusto y salió volando, después un relámpago cayó encima de él, provocando que quedase inconsciente y cayese.

— ¡Primero se te cae la lira al mundo mortal ¿Y ahora tu cuervo?!— dijo Zeus mientras se paseaba por la sala.

  — Lo encontraré, puedo volver a las tierras de los mortales y...— dijo Apolo mientras desplegaba sus alas.

— ¡No, ningún hijo mio bajara a ese vertedero!, conseguirás otro cuervo, ademas que más da, ya tienes a tu serpiente y a tu grifo— dijo Zeus mientras se sentaba en un sillón de terciopelo y agarraba una copa de cristal con vino en el interior.

— Pero sabes perfectamente que ese cuervo estuvo conmigo desde que era un infante.

— Me da igual— dijo Zeus mientras le daba un sorbo a su copa de vino. Apolo bufó molesto y salió de la gran mansión, dispuesto a bajar de nuevo y recuperar a su cuervo.

***

Pasaron cinco meses desde que Dominik tenia al cuervo, por fin tenia un amigo, aparte de su amigo Arley, un modelo Británico de su misma edad,  con quien pasar el tiempo, Dominik tuvo que enseñar al ave a volver a volar, pero no fue tan difícil ya que el cuervo aprendía con facilidad. Dominik se encontraba encima del sofá de su sala, con la música a toda volumen mientras cantaba Booyah a pleno pulmon, sabia que cantar de ese modo le iba a afectar, pero merecía disfrutar de su merecido día de descanso, el cuervo volaba por todo el salón hasta que de repente dejo de volar y se quedo en el suelo, paralizado.

El cuervo miraba hacia la gran puerta de cristal que llevaba al jardín, Dominik miro hacia aquella dirección encontrándose con  Apolo caminando hacia él.











*Blastoestimulina: Es un medicamento utilizado en el tratamiento de heridas y quemaduras de la piel, y tiene como función mejorar su cicatrización.

My Greek God I: Αpolo ⚣©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora