El que yo conocí.(nejiten)

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El Hokage siempre dijo que los ninjas de konoha éramos una familia, y aunque sabía que tenía razón, nunca lo había sentido más que ahora. Mirando como todos nos ayudábamos, me sentía orgullosa de mi propia aldea, si el Hokage estuviera con vida seguro también se sentiría igual.

Después de todo lo ocurrido se rumora que la aldea del sonido, lluvia y sobre todo arena, aparte de pedir oficialmente una disculpa, también  "donaron" mucho dinero para la adea como muestra de lo arrepentidos que estaban, y no solo eso, también muchos de sus ninjas estaban trabajando en la reconstrucción de aquí.
Personalmente no les tenía mucha confianza.

—Buenos días Tenten— saludo Gai Sensei —¿Tú llama de la juventud está lo suficientemente alta para este día? — dijo exclamando para sonreír potente.

Le sonreí y asentí.— Sensei, solo no trate de notar tanta alegra, muchas de las personas perdieron cosas en sus hogares, puede que estén tristes.

—También han perdido familiares— agregó Neji.

Gai Sensei nos mino con orgullo y asintió— deberán mostrar respeto sin agobiarlos.

— ¿deberemos?— pregunte extrañada—¿no vendrá con nosotros?

Gai Sensei negó— tengo que ir a un lugar, porfavor pongan mucho empeño para reparar la aldea.

Neji y yo asentimos obedientes, Gai Sensei nos dedico una última sonrisa antes de irse.

***

Mientras parchaba el techo de una casa no debía distraerme porque las personas damnificadas eran muchas, cada hora un habitante informaba más inseguridades en su casa y no se daba abasto ni con los ninjas de la arena. Según sabía los del sonido y lluvia llegarían hasta hoy pero no los miraba por ninguna parte.

Cuando estaba por terminar un par de ancianos se detuvieron frente a la casa que este a parchando y comenzaron a cuchichear.

— ¿No crees que se están poniendo muy lentos para escoger un siguente Hokage?.— pregunto una señora.

— La verdad no me sorprende que haya muerto, es decir, lo respetamos y todo pero tenía que retirarse pronto, necesitamos a alguien más joven.— el hombre mayor hablaba como si no entendiera el sacrificio del Hokage por konoha.

Apreté el martillo con fuerza por el enojo. ¿Cómo podían referirse así de Hokage?...

— ¿Me estás escuchando Tenten?.— una mano paso por delante de su mirada baja llamando su atención.

— ¿Qué?, ¿qué pasó?— le pregunto a Neji, este frunció el ceño al ver mi actitud.

— Tenemos que ir a la entrada de konoha...—ahora fui yo la que frunció el ceño.— solo sígueme, después terminaran los de el sonido.— sin más me sujetó del antebrazo e hizo que lo siguiera.

Ya estando en una calle más abierta confirme que era cierto, los ninjas del sonido venían con carretas de material suficiente para la reconstrucción de la aldea.
Saludaban y se organizaban.
Al llegar a las puertas que dividían la aldea de el exterior habían ninjas de nivel joinin, estaba formado un círculo con libretas, moviendo sus bolígrafos con rapidez sobre el papel.
De igual forma note como genins y chunnin estaban parados como nosotros esperando un comunicado, o más bien charlando entre ellos. Las Kunoishi saludaban o coqueteaban a los ninjas provenientes del sonido o lluvia y cuchicheaban mientras que algunos ninjas bromeaban entre ellos.

Mire a Neji que aún no me había soltado del brazo. Sonreí como Tonta, el me miró extrañado por mi sonrisa y después soltó mi brazo desviando la mirada.— no tienes porque sonreír de esa manera.