Will P.[Imagina]

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Dedicatoria:

CasyeReyes

ChocobkDeCat

Kika145

enirasangster_119

***

Eran las tres de la mañana cuando te levantaste abruptamente de la cama. Amabas el tener un bebé dentro de ti, pero odiabas los antojos que solían aparecer durante la madrugada. Esta vez tenías antojo de aceitunas.

Miraste a Will quien dormía plácidamente a tu lado e hiciste una mueca porque sabías que se molestaría por tu petición, sin embargo, tu antojo de un par de aceitunas era más fuerte que nada

"Will" Le llamaste. Él se removió un poco en la cama "Will, ¿Estás despierto?"

"No" Balbuceó contra la almohada "Deje su mensaje después del tono. Beep"

"Por favor" Comenzante a zarandearlo hasta que de mala gana encendió la lámpara y te miró

"¿Qué sucede?"

"El bebé tiene antojo de aceitunas"

"Dios, no de nuevo" Rodó los ojos antes de abrazar la almohada y pretender estar dormido "Esta vez no pasará"

"Pero... el bebé las necesita"

"Cariño, son las tres de la mañana, las tiendas no están abiertas a esta hora"

"Hay un supermercado que abre las veinticuatro horas a veinte minutos de aquí" Will se quejó

"¿Veinte minutos? ¿Tu antojo no puede esperar hasta mañana?

"¡TE JURO QUE SI NO ME TRAES ESAS MALDITAS ACEITUNAS AHORA NO VOLVERÁS A TOCARME HASTA QUE ESTE BEBÉ CUMPLA LA MAYORÍA DE EDAD, WILLIAM!"

"Santo cielo, me he casado con una loca" Gruñó, antes de sacarse las sábanas de encima y ponerse los zapatos de mala gana "Bien, te traeré tus estúpidas aceitunas"

"Gracias, amor, te amo"

"Si, si, lo que digas"

Will salió de casa y montándose en su auto encendió el GPS rumbo a la tienda nocturna que habías mencionado. Era una noche realmente fría y las calles estaban totalmente solas, Will dio un golpe al volante con frustración.

Soltó una maldición cuando, al llegar al supermercado, el hombre de la caja le dijo que, para su mala suerte, todas y cada una de las marcas de aceitunas habían retirado sus productos de ese establecimiento a causa de un malentendido con las finanzas, pero que, si su deseo era conseguir un tarro, entonces tendría que conducir al menos otros veinte minutos hasta la próxima tienda.

Él hizo una rabieta antes de entrar al auto y conducir de nuevo

"Aceitunas" Se quejó "¿Porque no pudo ser algo más sencillo? Unas donas, tal vez"

Tuvo la misma suerte en la siguiente tienda y en la siguiente y en la siguiente. Estaba a punto de lanzarse a la autopista cuando en el último establecimiento al que llegó se encontró con un solo tarro de aceitunas negras que rápidamente tomó.

Llegando de nuevo a casa hora y media después, subió rápidamente a la habitación únicamente para encontrarte profundamente dormida abrazando su almohada. No quiso despertarte, por lo que, luego de hacer un pequeño berrinche, dejó el tarro de aceitunas cerca de tu lámpara de noche para cuando despertaras. Se arrastró hasta quedar frente a tu barriga y se abrazó a ella

"Ya quiero que nazcas" Susurró "Por favor. Tu madre está torturándome"


***

Me inspiré en un video re gracioso de Facebook xdxd

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