Una vida sin Charlie

Capítulo 5: Su pequeña historia

PRIMERO QUE NAAADAAA

Perdón por el cap tan corto del martes es que he estado corta de imaginación Y de tiempo. (cosa que es muy mala combinación ewe) pero aqui estoy. TALVES SEA CORTO TALVES NO. depende de el animo que tenga mi cerebro. Eeeen fin aqui les traigo el cap de hoy n.n espero que les guste.

—¿Qué...?—es todo lo que puedo decir. Siento mi estómago contraerse y me muerdo el labio para calmarme—. Ah..me alegro por ti. Ella te gustaba ¿no?—pregunto con la mejor sonrisa falsa que puedo hacer y espero que la crea. 

Charlie me mira incrédulo un momento y luego asiente.

—Pensé que debías saberlo—dice que aparta la mirada—. Eres mi mejor amiga después de todo. 

Sonríe y yo aprieto los puños y le devuelvo la sonrisa.

—Si...—digo y siento que las palabras "Mejor amiga" que tanto me gustaba escuchar ahora me apuñalan el pecho. 

—¿Quieres jugar videojuegos hoy?—dice como si intentara romper la tensión que se formó entre nosotros.

Recuerdo a mi madre y que aún no quiero verla.

—En mi casa no—digo bajando la cara—. Aún estoy en casa de Hope. 

El solo asiente, pone su mano sobre la mía y da un pequeño apretón. Su toque me hace dar un respingo y mi corazón se dispara. ¿Qué demonios me pasa?

—Vamos a la mía—dice y sonríe. Yo asiento y le devuelvo la sonrisa, necesito a mi amigo de vuelta. No puedo arruinar esto. 

Las clases pasaron rápidas y Charlie estuvo la mayoría de ellas con Nicole. Si, lo admito, me molesta pero ¿Qué puedo hacer?. Salgo al patio junto a Charlie y Hope, le digo a ella que llegaré tarde hoy y ella se va. Camino junto a él hasta el estacionamiento y oigo una bocina. La sangre desaparece de mi rostro al ver el auto de mi madre, Charlie también la ve y me toma de la mano. Si no fuera porque mi madre está aqui eso me haría temblar.

—No tienes que ir si no quieres—me susurrra en tono tranquilizador. yo niego con la cabeza.

—No, tengo que hacer esto—le digo y camino hacia el auto soltándome de su agarre. 

Mamá baja del auto y siento el alma caer a mis pies al ver su ceño fruncido. ¿Está enojada? ¿Ella?

—¿Dónde demonios has estado, Christine?—me espeta enojada y yo aprieto el entrecejo

—¿Te importa?

Ella me mira sorprendida un momento y veo sus ojos arder de rabia. Se cruza de brazos.

—Mira, jovencita. Soy tu madre y debes tenerme respeto—alza la voz—Asi que ahora iremos a casa y cumplirás tu castigo.

—No.—digo con voz fuerte. ¿De dónde salió esa voz?—No iré a ninguna parte contigo, ¡Me dejaste en la lluvia! Me desmayé, mamá. Pude haber muerto ¿Entiendes eso?. Asi que ahora iré con Charlie y tu irás a casa. Cuando quiera volver a dirigirte la palabra volveré. Pero por ahora, no.—digo en voz alta y siento su mano impactar mi mejilla. Me acaba de...¿Golpear?. Había hecho muchas cosas pero nunca antes me había golpeado. Me río pero es una risa áspera, por primera vez no quiero llorar. Solo puedo sentir la cólera recorrer mis venas—. Bien. 

Me doy vuelta y camino hasta Charlie, tomandolo del brazo.

—Por favor, vámonos—le susurro y el asiente. 

Ella ya eligió.

Llegamos a casa de Charlie cinco minutos después. Es raro, pero jamás había venido antes; su casa es verde claro con ventanas de orillo negro, es grande pero sencilla y da una sensación de tranquilidad.

Él abre la puerta y me invita a entrar, cosa que hago. Las paredes del salón son verdes también y los muebles son negros, veo a Sheila en pantaloncillos recostada en un largo sofá. Me saluda de un abrazo y vuelve a acostarse. No veo más personas en la casa, lo cual me parece raro.

Subimos a la habitación de Charlie y mi corazón late con fuerza. Jamás había estado en el cuarto de un chico y es...raro.

—¿Quieres sentarte?—me pregunta y lo veo sentado a orillas de su cama. Yo asiento y me siento a su lado.

—¿dónde están tus padres?—le pregunto examinando su cuarto con la mirada. Veo su mirada oscurecerse y lo siento tensarse a mi lado.

—Bueno...creo que puedo contartelo a ti.—dice y noto la tristeza en su voz. Creo que no debí preguntar—Christine, mis padres están muertos.

La palabra hace que de un respingo, no me lo esperaba. ¿Charlie, la persona alegre y siempre sonriente, carga con eso? Yo no podría.

—Murieron hace tres años—continúa—. Estabamos en el auto, nos ibamos de vacaciones de verano a la playa porque Sheila y yo queríamos ir, Mamá iba en el asiento trasero con nosotros y papá manejaba. En el camino, un auto venía en sentido contrario y nos desviamos. Caímos por un barranco y lo ultimo que recuerdo fue a papá saltando al asiento trasero y a mamá diciendome que todo estaría bien y que sin importar que pasara siempre sonriera.—escucho su voz quebrarse y las lágrimas se amontonan en sus ojos—. Cuando desperté lo primero que vi fue a mamá, sobre mi. Intenté despertarla pero no despertó. Estaba muerta. Ella murió salvándome.

Las lágrimas corren por sus mejillas y siento el alma caer a mis pies, no sé que hacer. Simplemente me acerco y lo cubro con mis brazos. El solloza en mi hombro y siento mi labio temblar, no quiero verlo así.

—Shh, todo está bien—le digo en voz baja—. Ella te amaba, ambos lo hacían, de eso estoy segura, Charlie. Así que deberías hacerle caso a tu madre y sonreir. No me gusta verte así, me gusta cuando sonríes. 

El me mira con las mejillas mojadas y sonríe. Su sonrisa me reconforta y lo abrazo de nuevo.

El es fuerte, es muy fuerte. No sé lo que es cargar con ese peso sin decírselo a nadie. Solo sé que yo no podría hacerlo.

Lo amo. Si, lo admito, amo a Charlie. Amo a este chico frágil pero fuerte.

El lo es todo.

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Lo hiiiiiice. lloré *^*

PREGUNTAAAS

*¿Les gusto?

*¿Qué les parece Charlie?

*¿Quieren que cambien algo?

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buee perdon otra vez y chauu babes

Neko fuera