Esta noche he vuelto a soñarte...
soñé que tocabas mis mejillas y me besabas
haciéndome tocar el cielo nuevamente, como siempre ha sido.
Soñé que volvía a escuchar tu voz diciéndome lo mucho que me amabas,
diciéndome lo que te gustaba de mí
lo que te parecía único y que nadie más tenía.
Soñé con tus ojos cafés, ese café que penetra mi alma,
con ese cabello castaño, que siempre me encantaba oler.
No sé qué me duele más
Soñarte o extrañarte, gracioso
porque de las dos maneras me derrumbo.
Maldigo el día que te perdí y ahora
maldigo todos los sueños que me hacen recordarte...
