El cuadro de tu boca - Historia Aiteda

Magia

Hace dos semanas que no se nada de Luis, siento una frustración muy grande dentro de mi, lo necesito, tengo que conseguir que me escuche.

Alfred y Amaia montaron una pequeña fiesta en su casa para reunirnos todos, sería un buen momento para verle y con suerte poder aclararlo todo.

Me duche y me puse un vestido corto negro, no quería que me dolieran los pies, así que me puse unas converse blancas, me maquille, cojí la chaqueta y me dirigí a casa de Almaia.

Amaia abrió la puerta y se lanzó sobre mi

-Hola Aitaanaaaaaaaa!!!!!
-Hola Amaia
-Como estas?
-Bueno, puedo decir que estoy...viva, a estas alturas supongo que es mucho.

Amaia quería seguir hablando pero llamaron a la puerta, llegaron Nerea y Raoul.

Poco a poco fueron llegando todos, todos menos Roi y Luis.
-Tranquila, dijo Ana abrazandome por detrás, van a venir.
-Ven, vamos a tomar algo

Estuve charlando con Ana bastante tiempo, suficiente por olvidarme por un momento de él, hasta que llamaron a la puerta.

Oí su voz, y un escalofrio recorrio todo mi cuerpo, por fin estaba allí y no sabia que hacer, estaba bloqueada, mi mente no me ayudaba y mi cuerpo no respondia, así que decidí ir al baño.

-Maldita sea Aitana, que haces encerrada en el baño? me dije a mi misma, sal ahí afuera, no seas cobardica, él sabe que tú estas, y le va extrañar sino te ve, o no, incluso quizas ni se da cuenta.

-Vas a tardar mucho?
No puedo creerlo, era él, detrás de la puerta
-Hola? hay gente que viene de un viaje largo y debe usarlo.

Tiré la cadena aunque no había usado el baño, no podía parecer que me escondia
Abrí la puerta y allí estaba él, con una camiseta de manga corta blanca, su chupa y unos tejanos azules.

-Hola.. No sabia muy bien que decirle
Se quedo mirandome dudoso por un instante hasta que me besó la frente. Acto seguido entro en el baño, suspiré aliviada.
Ya nos hemos visto, y no ha ido tan mal, supongo...
Que debía hacer ahora? esperarle aqui fuera? irme? Obte por la segunda opción, fuí a por otra copa.

Una mano acaricio dulcemente mi brazo por detrás, me gire y allí estaba él, no pude evitar sonreir, mi corazón se aceleró por completo

-Vamos a un sitio más tranquilo
Me cojió la mano y yo simplemente le seguí.
Salimos a la terraza, él se sento en una silla y encendio un cigarro, yo me sente en otra silla junto a él.

-Luis...Luis yo...yo nunca volví con él, fue todo una historia imaginaria suya, de su cabeza, él...me pidio casarme con él..
-Lo vi...responde mientras me mira fijamente
-Y vi como lo rechazastes
-Yo solo quiero estar contigo, empezar de cero, olvidarme del resto y solo estar por ti.

Se levanto de su silla y me agarro la mano para que me levantara.
Casualidad que justo en ese momento empezara a sonar nuestra canción, esa canción que se había convertido en un himno del amor, un himno de nuestro amor.
Me miro fijamente a los ojos, cada vez estaba más pegado a mi, podía oir su corazón latir, su respiración acelerada, me agarro por la cintura

-No puedo vivir sin ti...no hay manera...  eso lo dijo todavía más cerca, tenia sus labios a centimetros de mi, respire profundamente para respirar su aliento, me acerqué lentamente a sus labios, casi podia notarlos, casi podía sentir su MAGIA.