¡¿Un romance en la prisión Nanba?!

Noticias inesperadas

Todos los guardias estaban en la sala de reuniones, Mitsuru les había avisado que la alcaidesa tenía una importante noticia que dar, pero no había dado detalles de la misma, así que estaban ansiosos por saber de qué se trataba.

-¿Qué habrá pasado para que nos llame tan repentinamente? -se preguntó en voz alta Hajime

-Seguramente se ha dado cuenta de que no sirves para nada y te despedirá -dijo Samon con sorna

-Siempre hablando estupideces saru sin cerebro

-¿Qué dijiste? Maldito gorila

-Ustedes dos nunca pueden comportarse- replicó Kiji molesto mientras se empolvaba la nariz

-Sea lo que sea debemos acatar las órdenes de la alcaidesa- comentó Kenshiro con seriedad

Todos callaron al escuchar los pasos firmes que se acercaban desde el otro lado de la puerta. Se abrió con ímpetu y brusquedad, dejando ver la ruda mirada de la alcaidesa de la gran prisión Nanba. Inspeccionó a todos con sus grandes ojos rubí pero cuando su mirada se encontró por breves segundos con la de Sugoroku Hajime, inmediatamente miró hacia otro lado, esperando que su gesto no delatara el nerviosismo y la emoción que eso le producía. La pobre no sabía que aquello había sido interpretado por el supervisor del ala 13 como un desprecio absoluto.

Se sentó y colocó una carpeta sobre la mesa, hojeo los papeles que allí tenía y aclaró su garganta para comenzar a hablar.

-Los he llamado aquí porque tengo una gran noticia que darles hoy. Como bien saben la prisión de Nanba es reconocida por ser la mejor en todo Japón, eso es en buena parte por el trabajo de ustedes. Felicidades guardias

-Muchas gracias por sus palabras -respondieron todos

-En la última reunión que tuve con el comité, me han informado que el número de postulantes para guardias ha incrementado. Es por eso que debemos instruir a los nuevos y futuros supervisores que se nos irán uniendo. Espero mucho de ustedes.

Todos comprendieron las palabras de la alcaidesa pero no les parecía que la noticia tuviera tanta trascendencia como les había dicho Mitsuru, pero todos llegaron a la conclusión que tratándose de él, era normal exagerar todo

-Pero esa no es la mayor razón por la que los convoqué- dijo sonriendo con mucho entusiasmo por comunicarles lo siguiente- lo que quiero que sepan es que el día de hoy se reincorpora a las actividades de coordinación general, la supervisora Ookami Ryoko

Todos abrieron los ojos sorprendidos, después de casi un año sin la presencia de la supervisora, saber que volvería a la prisión de Nanba si que era algo que no se esperaban.

-Wooow eso si que es una gran noticia!- gritó Mitsuru poniéndose de pie- la prisión de Nanba tendrá la belleza de Ryo-chan impartiendo orden por las celdas...mmm me pregunto si eso no será interpretado de otra forma por los reclusos...

-Silencio- lo regañó Momoko

-Vaya, vaya, así que Ryoko-chan estará de nuevo con nosotros- comentó Kiji sin poder ocultar su alegría- ¿eso quiere decir que se recuperó del todo?

-En efecto. Será de gran ayuda para todos que vuelva a coordinar las actividades de los reclusos

Hajime dejó escapar un suspiro con una mezcla de fastidio y cansancio, personalmente a él no le interesaba mucho aquella noticia. Sus recuerdos sobre la coordinadora eran sobre lo ruidosa y descuidada que era, solo le daría más dolores de estómago tener que lidiar con ella.

-Bueno, eso es todo supervisores, pueden volver a sus respectivas alas- concluyó la alcaidesa Hyakushiki

Todos se pusieron de pie y saludaron con una reverencia, la alcaidesa tuvo que reprimir sus deseos de hacer que Sugoroku Hajime se quedara allí con ella, no tenía ninguna excusa pero seguramente ya encontraría una para hacerlo ir a su oficina tarde o temprano.