E S P E C I A L (18.5)

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Changmin estaba nervioso, se miraba al espejo poco convencido de la ropa que su madre le había elegido para su cita.
Cita, realmente no sabía si estaba correcto el llamarle así, porque realmente solo iba para hablar con Younghoon y hacerle un poco de compañía por si decidía llorar.
Se mordió el labio e intentó secarse el sudor de sus manos con el pantalón, realmente no entendía por qué estaba tan nervioso.

— Cariño ¿no crees que ya es hora de irse? no querrás dejar esperando a tu chico.
— Mamá, no molestes al niño.
— ¿De cuándo acá me mandas tú? ¡Ja¡ en mis tiempos no podías ni hablarle de tú a tus padres.
—Mamá, abuela, mejor me voy, no quiero estar en medio de una de sus peleas, de nuevo.

Changmin salió del cuarto refunfuñado, estaba demasiado nervioso como para aguantar otra de las peleas entre su madre y su abuela.

🌸

Seguía mordiéndose el labio cuando llegó al lugar citado, buscó con la mirada el rostro de Younghoon, pero no lo encontró, suspiro pesadamente, los nervios aún no se iban y el que Younghoon estuviera retrasado no ayudaba mucho.
Decidió sentarse en una de las bancas cercanas a él, necesitaba tranquilizarse así que tomó su celular como una distracción, claro que no se esperaba que al momento de tomarlo le llegaría un mensaje que lo hizo sobresaltarse (porque así de exagerado era).

"Younghoon: Ya llegué ¿dónde estás?"

"sentado en una banca"

"Younghoon: ¿Cuál?"

"la que está frente al árbol"

"Younghoon: Changmin, es un parque, está lleno de árboles"

Estaba a punto de contestarle cuando sintió una mano en su hombro, se puso rígido al instante "ay santa virgen de guadalupe, ya me asaltaron y el younghoon nomas que no llega"

Se-señor t-traigo un arma y.... y no por nada me apodan el ke-kevin. - Escucho una risita tras él, genial el asaltante se estaba burlando de él, nomás eso le faltaba. —Si me va asaltar hágalo ya que tengo que encontrarme con un amigo.

— Changmin ¿qué demonios dices?

Changmin peló* los ojos el asaltante se sabía su nombre, a la verga, temblando miro sobre su hombro, esperándose ver al típico joven asaltante, pero lo que se encontró fue algo completamente diferente.
Uno de los chicos más hermosos que sus ojos habían visto, parpadeo repetidas veces, tal vez el asaltante lo había hecho alucinar, pero no, el chico realmente estaba ahí.

— ¿Younghoon?
—El mismo que calza y viste.

A-la-madre.

— ¿Eres una clase de príncipe asaltante?
— Lamentablemente no. – Younghoon lo miró con burla, aunque a decir verdad, ya sabía que su belleza dejaría mudo a Changmin. — Bueno a lo que truje chencha, vámonos.
— Qué –Changmin al fin pudo salir de su transe y se paró para mirar frente a frente al chico, que diosito lo perdone, porque después de sus pensamientos sentía que Chanhee no lo haría. — ¿A dónde?
—Changmin, mocoso tonto, anoche que hablamos te dije que te llevaría conmigo a un lugar muy importante.

Oh, tal vez no se dio cuenta porque estaba demasiado ocupado brincando por todo su cuarto.

🌸

Changmin conocía donde estaban, lo recordaba perfectamente, el olor a flores combinado con tristeza inundaba sus fosas nasales, estaban en el cementerio, para ser más exactos, estaba justo frente a la lápida de Taemin.

— Yo... Younghoon te dejaré solo.
—No. –La mano del chico impidió que se alejara, Changmin lo miró preocupado, Younghoon tenía los ojos llorosos y se mordía su labio inferior con fiereza. — Por favor no me dejes solo.

Ese día Changmin se quedó toda la tarde en el cementerio, con un lloroso Younghoon entre sus brazos.

🐤




Antes que nada, neta perdón por lo mal escrito que está este capítulo, soy un asco escribiendo jajsjajsja pero ya voy a mejorar, lo prometo.
Ahora, la palabra peló* en México, o al menos donde yo vivo cuando dicen que alguien "peló los ojos" es porque los abrió mucho o bien como se dice por acá los tenía "como platos".
Sin nada más que decir, me retiro, besitossss.

Pollito; The BoyzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora