Quiero decirte que Te Amo

Gracias por salvarme (Parte 1)

Narradora:

- EHHHH?! Pero porque debemos ir nosotros? No sabemos como llegar! - dijo molesto el rubio a su padre, Kedamono solo se limitaba a observar, realmente no tenía problema en pasar tiempo a solas con Popee - De eso no se preocupen, Paola sabe de memoria el camino, además tienen que saber como moverse fuera, no pasarán toda la vida sin salir del circo - dijo Papi con aire tranquilo y de brazos cruzados.

Popee:

-De hecho, tiene razón Popee - oí decir a mi amigo, el cual me miraba de forma tranquila... me atrevo a decir que tenía un brillo de felicidad en su máscara o siempre se ve así o... ahhh es difícil saber lo que siente si usa esa mierda todo el tiempo, tampoco entiendo el por qué oculta su rostro... solo puedo leer de forma correcta sus expresiones cuando tiene emociones fuertes como miedo o algo así.

- PERO... se supone que debes apoyarme - le reclame a mi compañero y el tonto solo alzó los hombros - Ni modo - contestó de lo más tranquilo - Ahg! ok, nos vamos de una buena vez o qué? - dije ya resignado a ir por las provisiones que nos faltabas para pasar el invierno - Muy bien, ves hijo? deberías aprender de Kedamono, él es la voz de la razón de ustedes dos - dijo ese idiota afeminado extendiéndome una lista de compras.

- Ugh, mejor cállate, - respondí molesto y le arrebate esa lista.        

- Vámonos - dije a mi amigo, este ni lento ni perezoso me siguió y fue directamente al asiento del piloto, él si sabía manejar, yo no, Paola nunca me dejó conducirla, pero en fin. - ¿Piensas irte así?¿Por qué no te pones algo más fresco? El camino será largo - me dijo Keda con mirada confundida - Oh, mm ok iré rápido - dije bajando de un salto para ir a nuestra carpa a cambiarme, termina poniéndome un short de mezclilla y una camiseta amarillo pastel con rayas blancas en posición horizontal y unos zapatos ligeros, me miré un momento al espejo, parezco una chica... creo que este short está muy corto... mi trasero se ve más que otras veces! No se ve mal~
-No, eso sería mejor si trabajara más en adelgazar mi cintura- me dije a mi mismo mientras posaba de espaldas al espejo contorneando mi cuerpo con mis manos.

Seguí bien a gusto alardeando sobre mi cuerpo frente al espejo hasta que  -Poppe, apúrate! - gritó mi lobo favorito, dejé de pavonearme y arreglé mis coletas, ya listo corrí a Paola para irnos de una vez, era temprano pero entre más rápido vayamos más rápido regresaríamos.

- Volveremos al anochecer señor Papi - dijo el moreno mientras se despedía con la mano y yo me decidí a imitar su gesto... qué?Tengo problemas de ira pero no quiere decir que no tengo modales... de vez en cuando.

- Claro, los esperaremos para la cena, cuida de Popee por favor - dijo mi fastidioso padre regresando la seña de despedida.

...

ESPEREN! Que Kedamono me cuide?!

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Popee:

- Oye...- dije sin voltear a ver al chico junto a mi -¿Por que mi papá insiste en que debes actuar como mi niñero? - pregunté cruzado de brazos - Bueno... es obvio porque yo ya soy mayor, tú aún eres menor de edad, además, el sitio al que vamos no es muy seguro que digamos- me respondió sin apartar la vista del camino.

- Pero como sabes que no es seguro si tú nunca has ido allá, es la primera vez que vas y la mía también - dije a modo de un pequeño reclamo.

-Popee, no se necesita de la experiencia para algo así, vamos a una ciudad, es un ritmo de vida muy diferente, hay mucha más gente y por lo tanto hay más peligros de los que cuidarse, no es como el desierto, ahí solo tienes que cuidarte de las serpientes, escorpiones y de no deshidratarte... hablando de, me das un poco de agua? - concluyó el más alto, yo solo asentí con la cabeza y saqué de mi bolso azul una botella que había traído por lo mismo del largo viaje que haríamos, debido a que él estaba conduciendo opté por darle el agua yo mismo, poniendo una mano bajo su mentón para que no mojar su camiseta, a diferencia de mi, él solo se puso una camiseta ajustada de color morado oscuro, esta marcaba sus pectorales... era raro, ya que me gustaba su pecho marcado, tanto hacerlo correr por su vida y obligarlo a ayudarme con mis trucos había dado sus frutos jajaja.