Me enamoré de mi alumno.

Capitulo 7

                                                                                Miercoles 22/01

 Ike entró al aula observando a los alumnos presentes, el día estaba nublado, y al parecer las amenazas con las tormentas aún estaban. Tomó asiento, observando a todo el par.  —Bien, los nombraré y quiero que digan presente, o solo digan aquí me da igual. Porque su preceptor faltó. — Añadió, tomando su libro de temas. — ¿Falco? 

—Aquí profesor. 

—¿Link? 

—Aquí proooofesoooor~— Añadió el rubio en un cantito. 

El profesor lo miró por un tiempo, y después volvió a observar el libro. —¿Link?— Al notar su error, negó con la cabeza.—¿Pit? — El castaño levantó la mano. —¿Pit!?— Pero el seguía con la mano levantada.—Bueno, tendrá falta. 

El castaño se levantó de repente y sacudió su cabeza, golpeando la mesa incluso. —¡No cuesta nada levantar la cabeza profesor!— Red le jaló un poco las ropas, para que se sentara. —¡Presente querido profesor! — Sonrió, mientras columpiaba sus pies sobre su asiento. 

El tutor miró a Pit con una mueca en sus labios, y comenzó a leer la lista. — Red ya te vi. . .— Siguió tildando, suspirando un poco. —Ah esperen, me olvidé de Fox. ¿Fox? — Al levantar la cabeza el zorro hacía pucheros muy notorios. —Lo siento, lo siento.  Ahora sí. . . — Volvió a tildar. —Sonic. .. ¡Esperen me olvido de Peach! — 

—¿Profesor? ¿Está bien?— Preguntó la rubia algo divertida por los errores que él tenía. — ¡Pero puedes tildar a todos, hoy estamos todos, profesor. — Añadió peinando un poco sus mechones. 

El profesor solo le dedicó una sonrisita, y rascó su mentón.  —Solo tengo algo de sueño. Ayer no pude dormir. Pero eso no importa. Saquen sus libros. — Añadió, abriendo su bolso. — Dije que saquen sus libros. 

—No tenemos libros de matemáticas profesor. — Sonrió forzosamente el rubio, logrando captar la atención de su profesor. —IkeNyaa también estaba distraído esta mañana. — añadió, pero ya con una sonrisa más sincera. 

—¡Oh si! Link nos contó de que recataste un gatito!— Peach juntó sus manos, con una sonrisa tan bonita, la sonrisa que la definía. 

—¡Que no es la gran cosa!— Dijo el erizo cruzando sus brazos.— Yo quise salvarlo pero nadie me abrió la ventana, si me la abrían yo lo salvaba y fin del cuento. — En eso, recibió un codazo de parte de Wolf. —¡Auch! Que te pasa! 

Basta decir que Sonic se sienta sobre libros sobre la silla para poder llegar a una altura cómoda de la mesa. — Estoy aturdido erizo, cállate un poco. — Ordenó, mientras dejaba escapar un bostezo. —Ahora que lo pienso, por qué Falco está tan callado? 

—Lo estuvo así desde ayer. Creo que la lluvia lo ha dejado reflexionar mucho. — Se encogió de hombros, observando al faisán que permanecía callado en su asiento. —Da miedo. . . ¡Oye Fox! — El zorro que estaba adelante, se volteó a ver al par de atrás. Sonic para no hablar, hizo señas. 

Primero señaló a Falco con la cabeza, haciendo una mueca hizo un gesto italiano con su mano para expresar la pregunta. Fox se encogió de hombros negando con la cabeza, El lobo empezó a girar sus manos, para finalizar por hacer circulos a lado de su cabeza.
Fox solamente respondió negando con su mano, señaló a Falco y entrecerró los ojos frunciendo el ceño, como si pensara. Sonic y Wolf se miraron mutuamente, y solo negaron con la cabeza. 

—Los del fondo, dejen de hacer señas raras. — Añadió el profesor, alarmando a los tres que hablaban en silencio. —¿Falco, todo bien? — Preguntó, al ver al faisán con la cabeza baja. —Falco. . .